“Soy como el turrón, vuelvo a casa por Navidad”
“Los comentarios de Maverick han sido muy positivos”, dice Acosta de su nuevo compañero, y remata: “El tío será competitivo”.
Arranca la segunda temporada de Pedro Acosta en MotoGP, la primera en el equipo Red Bull KTM, el oficial, el naranja de toda la vida, los colores a los que estaba acostumbrado y con los que ganó sus títulos de Moto3 en 2021 y de Moto2 en 2023. Con el ha llegado al box oficial de la casa austriaca Aki Ajo en el papel de team manager, el mismo con el que creció y ganó antes de llegar a la clase reina este año.
“Para haber estado todo el día carenado para arriba y carenado para abajo, y con el neumático medio, no ha ido nada mal. Estoy contento de estar en casa otra vez”, empezó diciendo el noveno del test de Montmeló, para luego profundizar: “Motos como tal, eran las mías del fin de semana. He estado centrado todo el día en aerodinámica, Brad ha estado centrado en electrónica, han venido un par de cosas nuevas, pero eran un par de cosas tontas por ahora. Porque este tema lo teníamos que cerrar aquí, más que otra cosa. Viendo que nos vamos a Malasia, a Tailandia y que luego hay una semana para irnos tan lejos, no es tampoco fácil gestionarlo todo. Ha sido un día bastante largo para entender en qué camino de aerodinámica y electrónica teníamos que ir”.
Su KTM mostró un cambio en el sillí, y explicó que “lo de la silleta era una cosa por comodidad, más que nada. Ha ido bien para todo el mundo. Es una posición de la moto un poco más natural con las piernas. Le ha gustado a todo el mundo, ya lo probamos en Misano. He estado probando cinco carenados diferentes y luego han probado lo que a mí me ha gustado más. Lo bueno es que los comentarios con el carenado han sido más o menos con el mismo estilo. Al final he estado mirando lo que había hecho Brad, probar un poco de electrónica tonta y acabar el día”.
Sobre su moto, dice: “Necesitamos tranquilizarla un poco de primeras. Influye mucho con el wheelie, con cómo trabajan los controles, entonces necesitamos encontrar algo que no haga que los controles trabajen mal, pero que tampoco sea lento y que gire. Lo quiero todo, para que te hagas una idea. Hemos mejorado en un par de áreas que era importante, y con esto de la aerodinámica, como es algo tan nuevo, no es tan fácil que un piloto se vaya contento con más de una cosa en el test. Si hemos probado cinco y nos vamos con uno, estamos contentos”. Y añadió: “En el test de Misano ya tenía tres motos dentro del box. Ha cambiado poco. Cambia que ahora las motos son naranjas”.
Tiró de su humor característico para definir lo que le suponía verse de nuevo vestido de naranja, de KTM oficial: “Me siento en casa. Esto es como el anuncio del turrón El Almendro, “Vuelve a casa por Navidad”. Llevaba un año fuera y se había hecho largo. Volvemos a casa con la gente que, más o menos, me he criado. Con los que conozco desde que tengo quince años, desde que estoy aquí en el Mundial. No ha cambiado mucho, pero no he tenido problema en todo el día con cosas que venía arrastrando de otras carreras, entonces me voy contento”.
En este sentido, le gusta reencontrarse con caras conovidas: “Ha entrado un poco todo a la vez. Ha entrado más o menos el grupo que yo tenía en Ajo Motorsport, y luego los chavales nuevos. También da gusto ver al que es mi mecánico de confianza, Adri, que ya lo tenían en los dos años de Moto2. Verle tocar otra vez la moto, quieras o no, da confianza no y da a gusto ver que alguien con quien confías en los ojos cerrados está otra vez donde tiene que estar y no cambiando de neumáticos y manchándose las manos. Han sido muchos pasos adelante. Hoy estoy muy contento, incluso sin hacer un time attack”.
Y se entendió muy bien con uno de sus dos nuevos compañeros de marca: “He estado rodando con Maverick hoy porque tenía que probar yo una cosa aerodinámica. Necesitaba alguien delante que fuese rápido, y Maverick en ese momento era el más rápido de KTM después de mí. Los comentarios de Maverick han sido muy positivos, los de Bastianini, después de caerse y destrozar una moto, la verdad es que no los he escuchado mucho. Maverick rodaba bien, yo he ido detrás de él. Es verdad que después de dos o tres años en Aprilia tengas tus manías y tengas tus cosas, pero el tío será competitivo”.