Raúl Fernández vuelve a pasar por quirófano
El piloto del Trackhouse será operado este martes otra vez del síndrome compartimental. “Sigo con problemas en el brazo”, dijo el español tras Mugello.
“He vuelto a tener problemas”, comunicaba Raúl Fernández al finalizar el GP de Italia y, eso, trae consigo la peor de las noticias para el de Aprilia. En menos de un año, el madrileño tendrá que volver a pasar por quirófano para operarse del síndrome compartimental. El mismo problema que le hizo retirarse el pasado 2023 del GP de Francia, frustra ahora una buena racha que el del Trackhouse estaba firmando en MotoGP. “Desde principios de año sigo con problemas en el brazo, y el martes tendré que operarme de nuevo. Estoy contento con el trabajo que he hecho, pero en las últimas siete vueltas he tenido que gestionar la situación, como hice en la carrera anterior. Es lo mismo desde principios de año”, explicó tras la carrera, en la que fue duodécimo.
Por ello, aprovechando este parón del Mundial hasta el GP de los Países Bajos, que se celebrará el próximo 28 de junio, Raúl Fernández será operado este martes en Barcelona. “Estoy contento porque hemos visto el problema, estoy contento con el trabajo que estamos haciendo, pero, sinceramente, con esto es bastante difícil pilotar la moto. He tenido muchos problemas, lo he hecho lo mejor que he podido, he intentado terminar la carrera en una buena posición. En Barcelona, con Marc Márquez y Aleix Espargaró no pude luchar por el podio por culpa de eso”, explicaba.
Tras poner fin al test de Mugello, prácticamente inservible por las condiciones climáticas, el piloto del satélite de Aprilia viajará a la ciudad Condal, donde pasará por quirófano para poner fin a esos problemas en el brazo. Suele ser una operación sencilla y, aunque se espera que esta ocasión sea así, no fue lo que sucedió la primera vez en el caso del madrileño: hace justo un año, esa intervención fue inusualmente más larga, con un problema que afectó hasta nueve músculos, lo cual, le dejó hasta tres incisiones diferentes en el brazo.
Y, aunque estaba ya programada desde hace tiempo, Raúl no quiso hablar de ello durante el fin de semana: “No podía hablar de ello antes, porque quería estar concentrado. Antes de venir aquí, vi a un médico. Vimos que estaba volviendo. No fue fácil para mí concentrarme realmente en el fin de semana, pero creo que hicimos un buen trabajo y estoy contento. Ahora, tenemos que pensar en la recuperación”, añade el español que, por lo menos, tendrá tres semanas de descanso al posponerse el GP de Kazajistán.