NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MOTOGP | VALENCIA

Pol y Honda, el adiós más amargo

El pequeño de los Espargaró se despide tras dos años con los del ‘ala dorada’ en los que ha aprendido “muy poco”, pero en los que “por suerte” no ha perdido la pasión.

Pol y Honda, el adiós más amargo
Mirco Lazzari gpGetty

No han sido dos años fáciles, pero la despedida tampoco pudo ser más amarga. Pol Espargaró esperaba un fin de semana con menos sufrimiento, pero la Honda volvió a hacer de las suyas y el de Granollers tuvo que decir adiós al equipo, y al 2022, con una nueva caída ante la afición de Valencia. Pese a todo, el español no lucía nada preocupado. Todo el peso de sus hombros se había esfumado en la escapatoria de la curva dos del Circuit Ricardo Tormo. Allí se puso el punto final a sus dos años más duro, en lo personal y en lo profesional. Dos temporadas que comenzaba con grandes expectativas y en los que solo pudo sumar dos podios, uno en cada curso con el Repsol Honda.

Y, tras un fin de semana para olvidar, el catalán ya mira luz al final del túnel. Este martes dejará atrás los colores del ‘ala dorada’ para enfundarse los del nuevo proyecto de GasGas, que tan emocionado le tienen. Y es que una cosa ha dejado claro: ni los peores momentos son capaces “por suerte” de hacerle perder la pasión por el motociclismo. “Es mi trabajo, pero también es mi pasión. Disfruto a pesar de que las cosas me vayan mal. Siempre hay un poquito de esperanza en que las cosas pueden ir mejor. Y no siempre las cosas han ido mal. Ha habido entrenamientos en los que he sido competitivo. Sólo esas vueltas en las que te sientes competitivo y ves que eres rápido valen un millón por los malos momentos”, explicaba a la prensa tras la carrera, sin preocuparse del nuevo cero con el que ponía fin a la temporada.

Y es que, ante todo, Pol Espargaró siempre ha sido un piloto ejemplar, profesional e implicado en su trabajo. “Siempre he intentado venir lo más motivado posible”, confiesa, aunque las caídas, más que los malos resultados, “hacen desmotivarte porque sabes que cuando vayas a apretar, probablemente una de ellas, va a venir”. Por ello, “en lo deportivo ha sido nefasto”. Técnicamente, admite, ha aprendido “muy poco” al no ser capaz de conseguir buenos resultados y, aunque “personalmente, sí, evidentemente, he aprendido”, no compensa todo lo sufrido. “Tienes que pasarlo mal para darte cuenta que los momentos buenos también hay que disfrutarlos”, añade, con esperanza de que su nueva etapa traiga solo cosas positivas.

Y parece que, por el momento, lo nuevo que ha probado KTM este fin de semana, va por el buen camino: “Me consta que han cambiado algunas cosas que les han funcionado, cosas que ya tenían pensadas para el año que viene, pero no querían esperar y las querían probar aquí. Han funcionado, como se ha visto”. La actuación de Brad Binder lo demostró y, teniendo en cuenta que el pilotaje del sudafricano es “prácticamente calcado” al de Pol, hace que crezca la motivación del de Granollers: “Me tranquiliza ver que Brad sigue siendo rápido, que sigue utilizando el mismo estilo que cuando yo estaba ahí. La respuesta va a ser muy clara y muy pronto porque ya voy a poder vivirlo en el test”.

Su consejo a Honda

No se marcha con rencor, pero Pol Espargaró siempre se ha mostrado como uno de los más críticos con la marca japonesa. No recibía actualizaciones y, su manera de trabajar en torno a Marc, siempre le ha perjudicado. Por ello, en su última despedida, el catalán lanza una última opinión sobre la fábrica: “Desgraciadamente, los pilotos no lo pueden evitar. Es una manera de trabajar que Honda tiene y es así. Si tienen suerte, y Honda quiere, el año que viene la moto va a ser competitiva, porque músculo técnico y poder tienen, pero deben quererlo y creo que estos dos años, los que yo he estado, no lo han querido suficiente”.