Pol Espargaró no llega a Mugello

Sin duda, los pilotos están hechos de otra pasta. Se han cumplido poco más de dos meses desde su terrorífico accidente en el GP de Portugal y Pol Espargaró ya piensa en su siguiente carrera. De hecho, es ambicioso y, mientras sigue implicándose al máximo en su recuperación, el piloto de GasGas se marca un objetivo que sorprende a propios y extraños: el GP de Italia de este fin de semana, en Mugello. Se le vio entrenando en moto en el trazado de Motorland Aragón, pero una nueva revisión médica ha truncado su cometido, al menos por el momento. Tal y como ha comunicado su equipo, GasGas, Pol está cerca de volver a MotoGP y, aunque puso toda su motivación en la primera carrera de este triplete, un “pequeño edema alrededor de sus vértebras que necesita tratamiento” le obliga a esperar unos días más. Su regreso tendrá que esperar, aunque lo volverá a intentar la próxima semana, para el GP de Alemania en Sachsenring.

“Tenía muchas ganas de volver a subirme a la moto pero, como dije desde el principio, la decisión final la tomarían por mí los médicos y me pidieron que esperara unos días más. Mi plan original era volver para una de estas tres próximas carreras antes de las vacaciones de verano y esa sigue siendo la idea. Lo más importante es estar preparado físicamente, y esta llamada significa que tengo unos días más para seguir trabajando en casa y llegar en la mejor forma posible y lo antes posible. Me siento muy bien y estoy muy motivado. Espero ver al equipo y a todo el mundo del deporte, y seguro que a los aficionados, tan pronto como pueda”, explica el español en el comunicado de su equipo, quien también anuncia que Jonas Folger seguirá siendo el elegido para ocupar su plaza, acompañando a Augusto Fernández.

Pese a que Pol confesó que había pensado en la retirada tras ser consciente de la magnitud de su accidente, la mentalidad tardó apenas unos días en cambiar drásticamente. “Pensé en dejarlo”, admitía a DAZN antes de Le Mans, aunque consciente ya de que intentaría reducir los plazos de recuperación al máximo para regresar a la competición antes del parón de verano. Y, como no podrá ser en Italia, seguirá preparándose físicamente para la siguiente cita. “Si no puede ser allí, intentaré estar en la segunda carrera (Sachsenring, 18 de junio) o en la tercera (Assen, 25 de junio) de este triplete”. Pero lo importante es recuperarse al máximo de su lesión en la espalda. Tendrá dos oportunidades más para cumplir su objetivo, pero es incapaz de esconder las tremendas ganas que tiene por volver a subirse a la moto: “Es por lo que me levanto todos los días, es mi combustible. Ver que las KTM funcionan es lo que también me hace querer volver”.

“Sufrí por mi vida”

Doble fractura en la mandíbula, lesión en el oído, fractura en las cervicales que desencadenó en un problema neuronal con afectación en los nervios, dos fracturas en las costillas, tres en las vértebras... y todavía con muchas ganas de volver. Por fortuna, Espargaró admite estar “en una situación privilegiada” con “muy poco dolor, casi nada” que le permite afrontar los días con naturalidad y, por tanto, volver a unos entrenamientos que le acerquen cada vez más a su regreso con GasGas. Perdió entre ocho o nueve kilos al tener que mantener la mandíbula completamente cerrada por su fractura y, aunque “realmente en la UCI no era muy consciente”, confiesa que tuvo miedo. “Sufrí por mi vida los primeros días”, revela, mientras su entorno sí era consciente de la gravedad de la situación. “Los veía sufrir”, añade el español, con ya plena capacidad para hablar, sonreír o comer con normalidad. Ya solo queda dar el paso que le ponga de vuelta en el paddock de MotoGP. Y eso es solo cuestión de tiempo.