Ogura ríe y García llora

Y pasó lo que se veía venir hace tiempo, la pérdida del liderato en Moto2 de Sergio García en favor de Ai Ogura, que hizo lo que tenía que hacer, ganar en Misano 1, mientras que el español sólo pudo ser duodécimo, y ni tan mal, porque partía 24º y lo dio todo para recuperar doce posiciones a pesar de estar hecho polvo físicamente. Puso la carne de gallina el verle llorar a su llegada al box, sin importarle que se supiera que los hombres, y los héroes, también lloran en esto de las motos. Además, a partir de ahora sólo puede ir a mejor. Seguro.

Los dos primeros de la general son compañeros de box en el MT Helmets-MSI y atraviesan por puntos anímicos completamente diferentes. Mientras que el nipón va a más después de las dos fracturas que sufrió en la mano derecha durante la cita de Austria, donde no corrió, el español ha sumado seis puntos en las últimas tres carreras al ser 14º en Austria, retirarse en Aragón y acabó 12º en Misano, lo que le deja segundo de la general a nueve puntos de Ogura. Todo ello por culpa de la luxación de ambos hombros en dos semanas. Es como si le hubiera mirado un tuerto al bueno de García, aunque tirar de casta para salir a pista en una carrera en la que se planteó no hacerlo le dio cuatro puntos que pueden ser muy valiosos en el futuro.

El daño pudo ser menor para el castellonense de haber ganado la carrera Canet, pero el valenciano volvió a evidenciar una mandíbula de cristal en las últimas vueltas y no supo contener a Ogura. Lo hizo muy bien en la primera parte de la prueba, aguantando el tirón de Arbolino. Fue él quien evitó su escapada y luego lideró durante bastantes vueltas. Después dijo estar enfadado por un error que cometió y por la caída de neumático que sufrió, pero eso es algo que le pasa a todos.

Ogura lanzó un primer ataqué sobre Arón en la vuelta 18, a cinco del final, pero lo hizo colado y volvió enseguida a la segunda plaza. No le importó el falló y al siguiente giro volvió al ataque, confirmándolo esta vez con decisión en la curva 9 y tirando desde ahí hasta la meta, que cruzó con 0.609 de ventaja sobre el español. Tras ellos, a cuatro segundos, un Arbolino que tuvo la suerte de librarse del acoso de Vietti, que llegó hasta él en las últimas vueltas, pero se fue al suelo a tres del final cuando estaba cuarto.

Tras los tres del podio y hasta cerrar las diez primeras plazas, González, Dixon, Aldeguer, Salac, Moreira, Arenas y Binder. Más atrás, García en la cita duodécima plaza, Ramírez 15º, Alcoba 17º, Guevara 21º, Masiá 24º, Artigas 26º, Orrado 28º y López 29º, que se cayó al principio y reanudó la marcha para entrar último con dos vueltas perdidas. Detalle de casta del madrileño, porque algún otro hubiera dado por terminada su carrera.