Martín invierte las cifras

Con 365 días de diferencia, el Mundial de MotoGP llega a su final con una situación muy parecida, pero no igual. Jorge Martín y Pecco Bagnaia se juegan el título de campeón en la última carrera, la temporada ha sido un mano a mano entre las dos GP24 y el matiz en este nuevo guion, se encuentra en el nombre que aparece en lo más alto de la general. Después de Kenny Roberts (1978, 1979 y 1980), el italiano es el segundo piloto de la historia que se juega el campeonato de la categoría reina en la carrera final durante tres años consecutivos (2022 frente a Quartararo y 2023 y 2024 frente a Martinator). Sin embargo, en esta ocasión, el piloto de Ducati llega con 24 puntos de desventaja en el marcador.

Esa cifra representa un escenario cómodo, dentro de lo que supone jugarse un Mundial (especialmente el primero), para Martín. El español depende de sí mismo para entrar en los libros de historia, pero paradójicamente esa ventaja es de la que dispondría Bagnaia a su favor si MotoGP no hubiese introducido los esprint. Llama la atención que el sexto piloto de la historia en ganar diez carreras en la clase reina durante el domingo en la misma temporada (tras Agostini, Doohan, Rossi, Stoner y Márquez) por las tres de su rival, no esté al frente de la general. De hecho, tras haberse impuesto en la mitad de rondas que componen el calendario, Pecco puede ser el primer piloto que no logra el título pese a conseguir ese número de triunfos.

El italiano admite que la carrera larga “no es nuestro problema, es donde somos más fuertes que el resto”. Sin embargo, los sábados han sido el gran caballo de batalla para el bicampeón desde que comenzó el año. Y también, los culpables de que pueda dejar escapar su tercera corona consecutiva en la clase reina: “Me gustaría entender y mejorar lo que pasa el sábado. Siempre me falta algo el sábado, no puedo atacar, no puedo estar enganchado al piloto de delante... y eso tenemos que entenderlo. Es ahí donde hemos perdido todos los puntos. Cuando ganas diez carreras y todavía estás veinticuatro puntos por detrás, tienes que mejorar algo.”

Jorge le ha metido 48 puntos a Pecco los sábados, a pesar de que el italiano solo está un triunfo por detrás de su rival en los esprint (siete de Martín por los seis del italiano). Sin embargo, más allá de la falta de velocidad que sufría Bagnaia en la carrera corta, las caídas también han marcado la diferencia; pues intentando reducir su desventaja, el bicampeón ha encontrado el límite hasta en ocho ocasiones por las tres del español. A pesar de haber dado un paso adelante durante los sábados en comparación con un 2023 en el que acabó como campeón, esa necesidad por parte del piloto de Ducati (también a nivel mental) de no ceder terreno con su rival, hizo entender muy pronto que la regularidad sería clave. Y los esprint también.

Bagnaia: “No me gusta el juego sucio”

Paradójicamente, será durante la carrera corta cuando Martín se enfrente a su primera bola de título durante el fin de semana en Montmeló. La cuenta más fácil de todas sale con una primera posición al esprint, que coronaría a Jorge independientemente de lo que hiciese Bagnaia en el trazado español. Pero, ¿tiene alguna estrategia pensada el italiano para llevar la batalla al límite? “Soy un tipo que juega limpio y no me gusta el juego sucio”. A Pecco solo le queda confiar en un fallo del líder, ya que el circuito de “Barcelona es más delicado que Valencia, y por lo tanto es más fácil cometer errores”. Pero ese apunte es una espada de doble filo, especialmente en una pista donde el pasado ya jugó en su contra.