Márquez relata su sufrimiento: “He estado jodido”
“Ganaba y me ponía a llorar a causa del dolor”, desvela el ilerdense, sobre todos los lastres que le provocó una lesión que deja atrás: “Ahora estoy bien”.
Han pasado más de dos años desde que Marc Márquez comenzó a trabajar para recuperarse de una lesión, que le ha cambiado con el paso del tiempo. “Venía de una carrera deportiva en la que parecía un superhéroe”, relató en Viajando con Chester, y “de golpe, de un día para el otro, fractura, infección operaciones...”. Lo que podría haber sido una lesión común que apenas le habría apartado de los circuitos unos cuantos grandes premios, acabó condicionando por completo la trayectoria de un campeón que pasó “de arrasar y estar en la gloria” al infierno: “Y es duro”. Se acumuló la mala suerte de una, las cosas no salían como se pretendía y el ilerdense decidió “evadirme del mundo, porque en el momento en el que prestas atención a eso (lo que opina la gente), te hundes. He estado jodido”.
“Ahora estoy bien”, dijo Marc, pero ha sido una situación de todo menos sencilla para un otacampeón para el que “hace seis meses, la retirada era una opción importante”. ¿Dónde está el principal cambio que ahora le lleva a sentirse bien? “En que no hay dolor”. Esa ausencia es el nuevo punto de partida de un piloto para el que el dolor se impuso a sus triunfos: “Me salía llorar cuando ganaba, no me salía sonreír”. Pero ahora ganar volverá a ser una fiesta y también, otro paso en un largo camino donde todavía queda superar todo ese proceso que le ha tenido dos temporadas lejos de esa versión arrolladora: “Lo superaré cuando esté luchando por victorias cada fin de semana. Estoy cerca, muy cerca, pero aún no”. “La moto de ahora puede ganar carreras, pero no luchar por el Mundial”, destacó, sobre una Honda en la que desde Japón siguen trabajando para estructurarla a la altura de un campeón. Pero no uno cualquiera.
Márquez ha sido el líder indiscutible de Honda en la última década, incluso estando alejado de los circuitos y también tras haber pasado “cinco inviernos en una camilla”. Además de los recientes por culpa de la lesión de Jerez 2020, el ilerdense también se acuerda de los problemas anteriores que sufrió en ambos hombros (2018 y 2019), además de los “cuatro” episodios de una diplopía de la que recayó por última vez en marzo de 2022 y que siempre será una amenaza. A pesar de las intervenciones que le realizaron y todos los ejercicios que llevó a cabo Marc para superar la lesión ocular, con un “golpe en la cabeza eso puede volver”. “Es una lesión que está ahí”, pero que no ha mermado en absoluto el carácter de un piloto que seguirá arriesgando: “No ver el riesgo puede ser una virtud o un defecto”, que siempre irá con él.