Márquez: “Mi cambio ha sido a base de caídas y lesiones”
“Mi mentalidad es estar delante, pero si ahora sólo me guío por los pilotos de delante es fácil ponerse nervioso y perder los papeles”, dice.
Estaba contento Marc Márquez tras la carrera del GP de Austria, la primera en domingo que termina esta temporada y la primera en la que puntúa. Fue duodécimo, lo que no es para tirar cohetes, pero sacó cosas positivas, porque ahora mismo su mentalidad es otra.
-¿Cómo hace para tomarse las cosas con más calma?
-Pues la respuesta es fácil, se hace rompiéndote tres huesos y un ligamento en seis carreras. Es ahí cuando paras en verano y dices calmado y en frío: ‘ha pasado algo este principio de temporada que no hemos hecho bien’. Y lo que no hicimos bien fue afrontar las carreras pensando que se podía optar a luchar por estar delante. El instinto es atacar, atacar y atacar y no conformarte, y entonces se produce caída, caída, caída, lesión, lesión, lesión. Así no coges nunca ritmo ni físico, porque vas de lesión en lesión. Es verdad que siempre te puedes lesionar, porque lo haces con la tontería más pequeña, pero el cambio de mentalidad ha sido a base de caídas y de lesiones.
-Misano no está tan lejos. ¿Qué espera de ese test tan importante?
-No lo sé. Al final han tenido un año para trabajar y desde el test de Valencia en 2022, en el que ya mostré mi descontento y dije que con eso no se podía luchar por el Mundial, y empezamos prácticamente con la misma moto que en Valencia tras el invierno, porque todo lo que se probó no iba bien. Y, efectivamente, no se podía luchar con esa moto por un Mundial. Han tenido estos siete u ocho primeros meses para trabajar y vamos a ver qué es lo que llega. Ojalá que podamos dar un paso, aunque sea una moto que no podamos usar en 2023, pero que al menos ya nos deje un poco de esperanza para el 2024.
-¿Qué opina de que cada vez dependa más de la moto la posibilidad de ganar?
-Cuantas más cosas técnicas haya, más vas a depender de la moto. Si tu coges una moto de 2017, era una moto más sencilla y ahora la aerodinámica, los alerones, el sistema delantero, el sistema trasero, hay muchas cosas. Cuando a una moto le vas sumando cosas técnicas pues dependes más de que eso vaya bien y el piloto, cuando no encuentra o no tiene las herramientas necesarias, es más difícil hacer un cambio o incluso sacar la cabeza en agua, que antes se podía.
-¿Se compensa con el pilotaje lo que falte?
-No, con el pilotaje dependes más de la moto, pero esto no es ninguna excusa. Tienes que saber dar los comentarios a los ingenieros, que los ingenieros te entiendan, que lo mejoren y sí, pero dependes más y eso que en la F1 es aún más exagerado. Fernando Alonso es el mismo el año pasado que al principio de esta temporada, que peleaba por las victorias, y ahora de repente no puede pelear ni por el top cinco. Él es el mismo pero cuando dependes del coche o de la moto, el atleta da su ciento por ciento pero tienes que saber entender que es un deporte de equipo. Venga, última pregunta que hoy he puntuado y estoy contento... (Risas).
-¿Nos puede contar un poco la carrera? Cuando escribimos sobre usted ahora hay que contener un poco las lágrimas...
-Es lo que hay, pero tienes que sacar las cosas positivas y en ese tipo de carreras al final lo que te guías un poco para no perder la confianza en uno mismo es compararse con las otras Honda. Aunque esa no es mi mentalidad. Mi mentalidad es estar delante, pero ahora si sólo me guío por los pilotos de delante es fácil ponerse nervioso y perder los papeles. Hoy, por ejemplo, hemos hecho una apuesta arriesgada, hemos tirado de experiencia y hemos escogido el neumático blando de detrás (el único de toda la parrilla que lo hizo). Todos los ingenieros estaban en contra, pero tanto Santi como yo queríamos ese neumático y me han hecho dudar al final, pero Santi me ha convencido para ir con el compuesto blando y era el que tocaba para la Honda ¿Por qué? No lo sé, pero era el que en 28 vueltas mejores prestaciones o rendimiento podíamos obtener. Tenemos que seguir entendiendo. Este fin de semana hemos probado muchísimas cosas, muchas, muchas, incluso demasiadas, pero ahora espero que a los ingenieros les pueda ayudar para seguir adelante.