Márquez: “Messi y Nadal son mis dos referentes”
“No me gusta nada que me comparen o que pongan mi nombre con el de Messi, que ha sido Dios”, dice.
Mucho dio de sí el primer encuentro con Marc Márquez en las instalaciones del circuito de Termas de Río Hondo, en Argentina. Después de verle entrar en el paddock el jueves enfundado en la camiseta de la selección argentina de fútbol, con su 93 a la espalda y su nombre, había que preguntarle si está de acuerdo con una de las afirmaciones que muchos hacen sobre él en esta zona del planeta. Para gran parte del público argentino, Márquez es el Messi de las motos al igual que Rossi, el Maradona.
“Siempre he dicho lo mismo: no me gusta nada que me comparen o que pongan mi nombre con el de Messi. No. Para mí Messi es un referente, ha sido Dios. No digo que sea mejor Maradona o Messi, es por épocas. Un atleta tiene siempre su época. ¿Quién es mejor? No se sabe, no se han enfrentado el uno contra el otro, pero sí que para mí Messi ha sido un referente, junto a Rafa Nadal, los dos referentes que he tenido en el deporte, por los valores que han trasmitido fuera de la pista, sobre todo. Y Messi es Messi, y yo estoy muy lejos de eso; por eso hoy he entrado con la camiseta, pero sin ningún nombre, con el mío, porque son dos nombres históricos con los que no me gustan comparaciones”.
Fútbol al margen, el del Ducati Lenovo sabe bien que su próxima victoria en GP será la número 90, la misma con la que igualará a Ángel Nieto como el piloto español con más triunfos mundialistas, sólo superado por Giacomo Agostini (122) y Valentino Rossi (115). Aunque no sabé qué, su equipo de trabajo tiene algo preparado para la ocasión y homenajear al Maestro Nieto cuando se dé el caso: “Sé que la siguiente es la 90. Por mi parte, no he preparado nada, porque no me gusta, pero seguro que el equipo de Vertical habrá pensado en ello”.
En cuanto a su balance en Termas de Río Hondo, un circuito que puede estar celebrando su último GP, porque entraría en su lugar Buenos Aires, recuerda que aquí las ha tenido de todos los colores: “Yo creo que tener un gran premio en Argentina, en Sudamérica, es necesario. Y si es posible dos, como se dice si vamos a Brasil, mejor. Hay mucho aficionado y creo que es bueno también no sólo centrarse en Europa, y en la zona de Asia, sino también América y Sudamérica. Yo lo mantendría, pero no soy el que decide. Sea aquí, en Termas, o sea en Buenos Aires, pero hay que mantener, hay que abrirse al mundo, abrirse a diferentes culturas. Sobre el balance: ha habido domingos locos, como el de 2018, que fue una carrera extraña en la que me dejé llevar por la adrenalina; otras, como la de 2019, en la que gané por mucha distancia; y otras, no recuerdo el año, en la que me caí con dos o tres segundos de ventaja. Eso significa que en el deporte, en el motociclismo, hay que estar atento desde que se empieza hasta que se acaba, e intentaremos este fin de semana tener un buen recuerdo”.
Y sonrió cuando AS le recordó que tras su caída de 2015, después de un toque con Rossi, dijo que aprendió cosas que no reveló todavía, ni quiso hacerlo ahora: “No es el momento de revelarlo…”.
Y un último detalle sobre su reciente victoria en Tailandia, donde se dejó adelantar por su hermano Álex y rodó tras él 16 vueltas para que subiera la presión de su neumático delantero. Se le preguntó si ese cálculo de las vueltas fue previo o durante la carrera y si habría hecho lo mismo si en vez de Alex hubiese estado Pecco detrás de él. Su respuesta: “Lo del cálculo: lógicamente, no estoy yo calculando encima de la moto el porcentaje, es algo hablado con el equipo. Luego tenemos una información en el ‘dashboard’ que te ayuda, y el piloto la tiene que saber gestionar. Y en este gran premio la pude gestionar bien. Pero, por ejemplo, el año pasado en Holanda me faltó poquito para que me sancionaran. Con esa experiencia este año lo pude gestionar un poquito mejor. Habría hecho lo mismo con Pecco, porque era la única opción que tenía para que no me sancionaran con 16 segundos. Mi única estrategia era estar detrás de uno para mantener la temperatura alta. Y sobre lo de los dos hermanos, la suerte que tenemos es que nos llevamos fenomenal, no somos solo hermanos, somos mejores amigos y nos alegramos, o por lo menos por mi parte, y creo que también por la de Alex, mutuamente de los éxitos del otro. Así que intentaremos seguir ayudándonos fuera de la pista, y luego en pista cada uno dará su máximo”.
Y lo que dejó claro es que no habría podido tirar con todo en busca de una ventaja por encima de los 16 segundos que le hubiera dado la victoria incluso con sanción. “Eso no era posible”, aseguró a pesar de su superioridad.
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