La lluvia trastoca los test de las novedades
Superbike 2024 se pone en marcha con unos entrenamientos repletos de novedades: Rea con Yamaha, Bassani con Kawasaki, la vuelta de Iannone...
El Mundial de Superbike 2023 acaba de finalizar y ya se ha puesto en marcha el de 2024 con los primeros test de pretemporada en el mismo escenario en el que Álvaro Bautista se proclamó bicampeón del mundo, el circuito de Jerez-Ángel Nieto.
En el trazado andaluz se puso el semáforo del pit-lane en verde a las 10:00 de la mañana para tener una primera toma de contacto con las novedades que llegan tras un efecto dominó en el mercado: Jonathan Rea con la Yamaha R1 que hereda de Toprak Razgatlioglu (quien no estuvo con la BMW porque no tiene permiso de Yamaha), Axel Bassani con la Ninja que abandona el norirlandés, Michael Ruben Rinaldi se sube a la Ducati del MotoCorsa que deja su compatriota, Nicoló Bulega asciende a la Panigale oficial como compañero de box de Bautista y Andrea Iannone, que vuelve a las motos tras cumplir su sanción de cuatro años por dopaje.
La lluvia marcó la jornada y redujo la actividad en pista de los pilotos. Los tiempos, a los que no hay que mirar para sacar conclusiones, fueron dominados por Remy Gardner, seguido por Rinaldi (el que más vueltas completó, 36), Aegerter, Rea y Bautista, separados los cinco por 0.7 segundos entre el 1:39.837 del australiano y el 1:40.564 del español. “Hemos empezado el primer entreno de 2024 con muchas partes húmedas y por evitar una de ellas he cogido otra que no se veía y he tenido un ‘high side’ sin consecuencias físicas. Luego ha empezado a llover y no hemos podido probar nada de la nueva reglamentación y especialmente el peso combinado. Veremos si nos deja la meteorología”, dice el campeón sobre la primera toma de contacto y una caída que provocó una breve bandera roja.
En circunstancias parecidas se fue al suelo Jonathan Rea, al pisar una zona mojada en la curva 13: “He pasado por una zona con agua y por desgracia la moto ha sufrido daño, aunque no iba al límite. La Yamaha me da buen ‘feeling’, es fácil de manejar y veo margen de mejorar”, explicó el seis veces campeón, para añadir que solo le resultó extraña “la posición sobre la moto”.
Y eso precisamente es lo que todos los pilotos señalan del primer día de Jerez. No hay que mirar a la tabla de tiempos, lo importante ahora es acoplarse a las nuevas monturas y equipos de trabajo. “Necesito familiarizarme, rodar...”, indica Nicoló Bulega. Algo que también le vendrá bien a Iannone tras su periodo de parón obligado. Vuelve a una moto de carreras, y como él dice, “la sensación ha sido muy buena”. Para el italiano lo mejor es que ha “vuelto a pilotar”.
Pero no solo hubo novedades en la categoría mayor. En SuperSport se estrenó Adrián Huertas con la Ducati, donde llega desde Kawasaki y siguiendo aquel efecto dominó. Coge la moto con la que Bulega arrasó en 2023 y así valora el madrileño su primer día de trabajo en el garaje rojo y sus primeras 30 vueltas: “Han sido sensaciones muy buenas en el primer contacto con la moto y con el equipo y me siento increíble. Son como una familia nueva que me han acogido muy bien. La Panigale V2 me ha sorprendido, tiene un potencial increíble. Podemos hacer un buen trabajo. Hay mucho margen de mejorar”.
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