Ducati cierra en lo alto

Después de dos días de lluvia y con mucho trabajo concentrado, pilotos probadores y el único rookie de la categoría han aprovechado al máximo las últimas horas del shakedown de Sepang. La última de tres jornadas de pruebas intensas antes del gran debut oficial de este viernes, donde los pilotos oficiales se unirán para poner a prueba las monturas de este curso 2023. Incluso algunos ya se han dejado ver por el trazado malasio, como Aleix Espargaró o Fabio Quartararo, muy curiosos en sus respectivos boxes, viendo las grandes novedades que las marcas han llevado tras un invierno con mucho trabajo que hacer.

Y, parece, que eso ha dado sus frutos. Pese a que Yamaha lideró los dos primeros días condicionados por la lluvia en Sepang, Ducati ha puesto el broche final a los test demostrando por qué en la reciente campeona del mundo. Michele Pirro se llevó el mejor registrado de las tres jornadas, siendo además el único piloto de los presentes en bajar la barrera de los dos minutos (1.59.803) con la nueva GP23, probando un carenado actualizado más grande y con detalles en los laterales para trabajar el efecto suelo. Al menos de manera oficial, porque Dani Pedrosa, con su KTM, volvió a rodar sin transponedor y, por lo tanto, se convirtió de nuevo como un fantasma en pista. Sin datos y fuera de los cronos oficiales. Eso sí, pudo rodar con un nuevo carenado, parecido al que presentó Aprilia este lunes y lo que sería una evolución del que ya probó el español en los test de Valencia del pasado noviembre.

Sin grandes novedades salieron a pista los probadores de Aprilia, Lorenzo Savadori, y Honda, Stefan Bradl. Ambos pudieron cerrar los test con los nuevos prototipos, a la espera de cederlos a los pilotos titulares para poder seguir desarrollando y preparando la temporada. De hecho, no destacaron mucho sus tiempos en este tercer día en Sepang, donde el único rookie de la categoría, Augusto Fernández, les sobrepasó al mejorar sus tiempos. El campeón del mundo de Moto2 no está dejando indiferente a nadie y comienza sus días de descanso (hasta viernes, con las pruebas oficiales) en una cuarta posición muy consistente (lideró la sesión de la mañana con un 2.00.482) y, sobre todo, con buenas sensaciones en su GasGas.

Yamaha vuela

Sí hubo trabajo en el box de Yamaha. Cal Crutchlow no fue este martes el único representante de la fábrica de Iwata en pista y, de hecho, se fueron alternando las diferentes motos para maximizar el trabajo. El británico se centró en probar nuevas evoluciones aerodinámicas para la marca y, pese a que llamó la atención de los presentes, estas soluciones no se llevaron el gran protagonismo de la jornada. Lo hizo el motor de la nueva M1. Pese a que los tiempo no son oficiales (como lo serán los del viernes), sí se pudo ver un claro avance en el prototipo de los japoneses: habían recuperado la velocidad que se perdió en los test de Valencia y que tanto enfadó a Quartararo al finalizar el día.

Este martes, Crutchlow llegó a registrar una velocidad punta de 334.4 km/h, es decir, 4 km/h por encima del mejor registro del francés en la misma pista, el pasado año durante el GP de Malasia. El tirón de orejas de su campeón parece haber tenido efecto en la fábrica, sin embargo, todavía hay mucho por probar antes del estreno, el próximo 26 de marzo en Portimao. Por ahora, los equipos ya piensan en el viernes, la gran prueba de fuego con los pilotos oficiales.