Bezzecchi ‘arrastra’ a Bagnaia
El de Aprilia acumula seis victorias en su paso por el Mundial de MotoGP y, cada vez que se subió a lo más alto del podio, el de Ducati acabó en el suelo.
En el Mundial de MotoGP siempre se habla de estadísticas, casualidades o coincidencias que, en ocasiones, siempre pueden parecer locas. Pero, sin duda, hay una de esta misma temporada que se puede llevar el trofeo a la más extraña de los últimos tiempos. Extraña porque implica a dos pilotos italianos, que además son amigos, pero que, a la vez, no tiene nada que ver uno con el otro. En su día compartieron marca, ahora son rivales y, mientras uno ya tiene dos Mundiales de MotoGP, el otro sueña con poder conseguirlo algún día. ¿Quizás 2026 sea el año? En la recta final de campeonato demostró que tiene nivel y una moto que está cerca de alcanzar a las Ducati. Pero todavía tiene que llegar a ser una amenaza directa para los Márquez.
Y se quedó a las puertas en este curso. Marco Bezzecchi finalizó el año con el tercer puesto de la clasificación general de puntos. Una posición que, a principios de año, no parecía realista, sobre todo porque Aprilia tenía que comenzar el año sin el campeón del mundo en pista y teniendo que depositar toda su confianza en un piloto nuevo para la casa de Noale, que no conocía a la perfección de RS-GP con la que tenía que competir. Pero el italiano ha cumplido con creces las expectativas y, en su primer año con la fábrica, ha sumado tres victorias en las carreras de los domingos que les ha posicionado como la mayor amenaza para los de Borgo Panigale. Precisamente, su anterior marca, la que dejó para ser piloto oficial por primera vez en su carrera deportiva en MotoGP. Y le salió bien el cambio, porque como tercer mejor piloto del año, es el mayor favorito para desbancar a los hermanos de Cervera.
Bezzecchi ha demostrado que la moto tiene potencial y que, poco a poco, se acerca con firmeza a ser un oponente de peso para Ducati. Y es que los de Borgo Panigale ya no son tan invencibles. Su hegemonía se ha disipado a lo largo del año y, solo Aprilia, les ha arrebatado cuatro victorias de domingo... y otras tres esprints. Todas ellas, menos una de Raúl Fernández, con Marco Bezzecchi como protagonista. Lo cual, deja grandes hitos para los de Noale: es el primer piloto de su marca en enlazar dos victorias desde su entrada a MotoGP, consiguen por primera vez el Top-3 en la general, primer piloto con cinco poles en un año y tres victorias en un año. Estos dos últimos datos hacen que empate con Aleix Espargaró como el mejor piloto que ha pasado por Aprilia. Tanto en poles como en victorias. Su nuevo Il Capitano.
Pero si hay una estadística loca en el haber de Bezzecchi... es el efecto colateral que implican sus victorias de domingo. Un dato que no hace ni pizca de gracia a su amigo, Pecco Bagnaia. Y es que, cada vez que Marco se sube a lo más alto del podio, el de Ducati se va por los suelos. De tres victorias que cosechó en domingos, en las tres se vio también una caída del bicampeón (Gran Bretaña, Portugal y Comunidad Valenciana). En Silverstone y Portimao se fue al suelo por falta de sensaciones con la moto y, en Valencia, fue víctima de un toque en la primera vuelta de la carrera. Y otra cosa más: siempre que Álex Márquez ha ganado la esprint, Bezzecchi le ha arrebatado la victoria en las carreras largas. Curiosidades varias de una temporada especial.
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Pero es que el dato no se queda ahí. Si miramos dos años atrás, en 2023, su penúltimo año con la Ducati de VR46 Racing Team, Bezz consiguió otras tres victorias y, ¿adivinan qué sucedió? Exacto, que Bagnaia no acabó la carrera. La primera victoria de Bezzecchi en la categoría reina llegó en el GP de Argentina de aquel curso, carrera en la que Pecco Bagnaia se fue al suelo cuando luchaba con Álex Márquez por el podio (lo cual, además, le hizo perder el liderato de la clasificación general). La segunda ocasión llegó en Francia, cuando Pecco se vio implicado en un accidente con Maverick Viñales. De hecho, en aquella ocasión, italiano y español se quedaron en la escapatoria encarándose, discutiendo e incluso empujándose. Por último, la tercera de Marco llegó en India, con el de Ducati jugándose el Mundial: a siete vueltas del final, Pecco perdió el tren delantero y acabó con todas sus opciones. Puso la lucha por el título en un pañuelo aunque, por suerte, acabó ganando. Sin embargo, este año no corrió la misma suerte y esas cinco caídas consecutivas del final de temporada le hicieron perder el tercero del Mundial... hasta acabar en la quinta plaza.
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