Bautista se reencuentra con la MotoGP: “Me lo esperaba peor”
El español se sintió muy cómodo al manillar de la Desmosedici tras el primer día de test. Sobre un posible wild card con Ducati, aclara: “No hay nada”.
No es época de Reyes Magos, pero Álvaro Bautista hizo la carta a tiempo tras la pasada temporada, para recibir su regalo. Fue una petición especial a Ducati como recompensa a su primer título de SBK y después de todos los éxitos que está llevando el español hasta las vitrinas de la marca italiana, la petición se ha hecho realidad. El talaverano volvió a subir a una MotoGP “casi cinco años después” en la primera de las dos jornadas de test que ha programado la casa de Borgo Panigale en Misano para él y todo acabó mejor de lo esperado. Desde el principio “hubo buen ‘feeling’ con la moto” y aunque nada tiene que ver la Desmosedici con el prototipo de las derivadas, el niño que se escondía detrás de la sonrisa disfrutó de un regalo que tratarán de optimizar de cara a la segunda jornada.
Tanto Ducati como Bautista quieren que la experiencia, la cual comenzó con nueve vueltas, sea completa. El español se fue soltando poco a poco y acabó con un total de 60 vueltas que equivalen a más de dos carreras completas en MotoGP. Sus palabras no engañaban y sus gestos, tampoco, cuando aseguró que se había “encontrado bastante bien”. De nada importó que la MotoGP “haya cambiado mucho”, pues Álvaro dejó atrás los recuerdos para disfrutar del prototipo campeón. Y se llevó una grata sorpresa. “Sinceramente me lo esperaba un poco peor”, reveló el talaverano, pero a pesar de las buenas sensaciones siempre mantuvo los pies en el suelo: “El objetivo es ir poco a poco, no ir al límite porque no estamos aquí para arriesgar nada, sobre todo porque en una semana y media tenemos la cita de Donington (Park). Este test es para ir lo más cómodo posible y disfrutar sin buscar nada loco”.
Bautista renunció a la locura pero no a la diversión junto a una moto “mucho más rígida, mucho más potente, con frenos diferentes y un cambio totalmente distinto” a lo que acostumbra en Superbike. Primero tuvo que aprender cómo funcionaba la Desmosedici y la segunda parte de la jornada se centró en trabajar la ergonomía pensando en el miércoles: “Probamos cosas al final del día para ver si funcionan y poder empezar mañana con ello. El objetivo es ir pilotando cómodo en la moto para poder disfrutar y entender mejor cómo conducir esta moto”. Apenas necesitó unas vueltas para entender qué necesitaba y también, sorprender a Marco Zambenedetti, Director Técnico de Ducati Corse: “He visto una adaptación muy rápida a los neumáticos y a la moto. Sus tiempos por vuelta han sido positivos después de un par de tandas. Es muy rápido. Tengo curiosidad por ver qué hace estos dos días”.
La posibilidad del wild card
A pesar de los halagos que llegan por parte de la fábrica italiana, la tabla de tiempos no estuvo en ningún momento entre las preocupaciones de Bautista, como tampoco una supuesta reaparición en MotoGP. El español fue claro desde el principio. “No tengo nada más en la mente que este test”, zanjó, e inmediatamente explicó el por qué de esta petición a Ducati: “En toda mi carrera (en MotoGP) no tuve la oportunidad de estar en un equipo oficial y ahora tengo este test para que pueda disfrutar y dar lo mejor de mi. Más allá no hay nada, estoy disfrutando estos dos días y vamos a seguir así. El próximo objetivo es Donington (Park), que será donde tengamos que ir a por todas. Ahora sólo disfruto el momento, no hay un mañana”... “todavía”.