Toyota y Repsol van a por el Dakar

Toyota se visitó de largo con una carta de presentación bastante imponente, a la altura del escenario. En una pantalla principal comenzaron a leerse todos los éxitos que cosechó la marca japonesa durante un 2025 en el que, junto a Repsol, firmaron la segunda posición del Dakar, conquistaron el Mundial de pilotos e hicieron lo propio en el de fabricantes junto al Hilux. Alrededor y sin salir de Madrid, el ambiente simulaba todos esos escenarios que permitieron a los de Gazoo Racing aumentar su palmarés en el desierto. Y de nuevo con la arena entre sus pies, dejaron claro que aspiran a mejorar todos esos éxitos.

La ambición crece por momentos en el seno de un equipo reforzado con la llegada de Toby Price. El australiano, dos veces ganador del Dakar en la categoría de motos, llega bajo la condición de leyenda pero la necesidad de demostrar que está a la altura de los mejores en este nuevo desafío junto a Gazoo Racing; donde le acompañarán Seth Quintero y un Henk Lategan que ya ha presentado sus galones. Hace menos de un año que el sudafricano luchó por el Touareg de 2025 hasta el último suspiro y de cara a esta 48ª edición, su objetivo es “dar un paso más”.

“Una gran arma para el Dakar”

Durante su última visita al desierto, Henk aprendió que “el segundo es el primero de los perdedores” y tiene claro que ahora quiere “luchar por ganar”. De hecho, el sudafricano está convencido de contar con los ingredientes para poder hacerlo... a sabiendas de que es “muy difícil dar ese pequeño paso adelante y pasar del segundo al primer puesto”: “Hemos aprendido que tenemos la velocidad, la constancia y la energía. Casi lo conseguimos, pero este año trataremos de poner juntas todas esas habilidades”. Que podrá combinar con un Hilux mejorado al que saben que deberán ir educando con el paso de los kilómetros. Pero no existe ninguna duda de que van “con una gran arma al Dakar”.

Toyota jugará con el mejor coche de la última edición pero también con grandes talentos como el de un Quintero que para esta edición, acepta la presión: “Después de dos años de aprendizaje ahora es momento de estar arriba y conseguir los objetivos”. En todo ese proceso Repsol también pondrá su granito de arena con el combustible renovable: “Ha trabajado muy duro durante el desarrollo del nuevo coche”. Y como resultado han formado una alianza, en la que el americano tiene muy claro dónde encontrar a sus rivales: “Estarán en casa, serán mis compañeros”. Sobre todo en una edición donde Seth despliega su ambición: “He ganado etapas, pero ahora quiero ganar mucho más”.

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Sobre el terreno tiene la mejor arma posible para hacerlo. Un Hilux con el que se reencontrará Price tras una despedida prematura en su primer Dakar sobre cuatro ruedas. En esta ocasión, al otro lado del volante le acompañará el español Armand Monleón. Y aunque será su primera experiencia juntos, “estar en el Top-10 o el Top-8″ es la ambición del piloto australiano. Toby reconoce que alcanzó “mucho éxito en las dos ruedas”, pero ahora sueña con replicarlo en esta nueva aventura para la que pide un poco de paciencia: “Estar con Toyota y Repsol es un sueño hecho realidad, pero tener el mismo éxito puede llevar trabajo. Daré el 100% cada día y ojalá tengamos un buen resultado al final del Dakar”. Está en el lugar perfecto para conseguirlo.

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