Toyota no se rinde: “Tendremos una oportunidad”
Los pilotos de la marca japonesa deslizan optimismo en un encuentro con la prensa y ni salir tan atrás, les desmotiva: “Cualquier cosa puede pasar”.
En Toyota tienen una misión clara a partir de este sábado en las 24 Horas de Le Mans, remontar para reconquistar el triunfo que en 2023 pasó a manos de Ferrari. Sale a por ello con uno de sus coches “en el medio de la jungla”, como define Hartley el puesto 11 del GR010 Hybrid #8 que comparte con Sébastien Buemi y Ryo Hirakawa. El otro, el #7 de José María López, Kamui Kobayashi y Nyck de Vries, parte desde el fondo del grupo, detrás de todos los Hypercar. A pesar de las dificultades a las que se enfrentan, en el garaje del Gazoo Racing están confiados y así se muestran ante un reducido grupo de prensa internacional entre la que estaba este medio.
Para Hartley no se decide nada, como es lógico en una carrera de 24 Horas, en la clasificación. El neozelandés expone encima de la mesa los buenos ritmos de los coches japoneses en los libres: “Hemos sido rápidos en los free practice. Si nos fijamos en los tiempos de vuelta promedio para todos los coches estamos en la pelea. No estoy diciendo que estemos por delante y que vamos a dominar la carrera, pero creo que hay seis fabricantes que piensan que tienen la oportunidad de ganar esta carrera, lo cual es increíble. Y definitivamente nosotros somos uno de ellos. No va a ser fácil porque hay muchos coches en la parrilla. Pero vamos a tener una oportunidad”.
Buemi, por su parte, aspira a ganar sus quintas 24 Horas de Le Mans. Y dice que para él sería especial, no más que la primera, pero sí por la gran cantidad de rivales que tendrán enfrente: “Creo que si nos fijamos en la calificación, sí, hay que estar de acuerdo en que ganar este año lo hará un poco especial por la competencia a la que nos enfrentamos. Nos concentraremos en nosotros mismos, nos aseguraremos de no cometer errores. Estamos un poco frustrados por no haber llegado a la Hyperpole, pero cuando nos fijamos en los libres, hemos estado arriba. Eso significa que tenemos un buen coche”.
No apuestan por una carrera loca, con lluvia, coches de seguridad o incidentes, porque igual que te dan, te quitan, y por ello Buemi prefiere unas condiciones, por decirlo de algún modo, más estables, en las que el ritmo, la fiabilidad y la estrategia predominen sobre los golpes de fortuna. Así lo explica: “El problema de eso es que a veces puedes tener un poco de mala suerte, con esas zonas lentas, con el hecho de cambiar neumáticos. Diría que hemos demostrado que somos bastante buenos en estrategia, como por ejemplo el coche #7 ganando en Ímola, entrando en boxes en el momento adecuado. Pero normalmente (unas condiciones locas) son una lotería”.
Más dificultades tendrán en ese coche #7 del que habla Buemi y que está condenado a salir detrás de todos los demás Hypercar por la bandera roja que provocó Kamui Kobayashi. Algo a lo que sus compañeros Pechito López y Nick de Vryes quitan importancia. “No afecta para nada (salir de tan atrás)”, expone el argentino y el neerlandés amplía el argumento: “En una carrera de 24 horas hay que tener en cuenta las condiciones a las que nos enfrentemos. Puede que en algún momento se despliegue un coche de seguridad y es una oportunidad para cerrar todas las brechas de nuevo. Cualquier cosa puede pasar y creo que la ejecución va a ser clave. Y no cometer errores”.
No hablan los pilotos del BoP (Balance of Performance) porque no se puede, por reglamento, pero la norma no afecta a la presa, que pregunta. Y Pechito López, torea con maestría la cuestión: “Está muy bien. Las reglas son las reglas. Son bastante iguales para todos. Quiero decir, algunos coches son mejores en algunas áreas, otros, en otras…”. Y Toyota espera ser la mejor fábrica el domingo a las 16:00 en la meta del circuito de la Sarthe.