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Dakar

Schareina: “Después de una caída tan fuerte había que sobrevivir”

El español salió por orejas e impactó violentamente en el kilómetro 12. “Empezamos mal el día”, admite, pero fue capaz de salvar el Dakar.

Haradh (Arabia Saudí)
Schareina: “Después de una caída tan fuerte había que sobrevivir”

Era un día decisivo para la lucha por el Dakar en la posición de Tosha Schareina. El español necesitaba seguir recuperando tiempo con Sanders en la general, sin perder de vista una estrategia que será decisiva de cara a las tres últimas etapas con dunas. Sin embargo, una caída en el kilómetro 12 tras salir violentamente por orejas de la Honda, cambió por completo sus planes. En cierto modo la suerte le sonrió, pues la caída llegó en la parte más blanda de una especial que acabó en terreno pedregoso. Y a partir de ese momento llegar con vida hasta el final pasó a ser la prioridad de un piloto, que sigue manteniendo la esperanza de luchar por la victoria hasta el final. El tiempo se consume, pero las posibilidades se mantienen.

Todos hemos visto el vídeo de tu caída, muy aparatosa, pero te vemos más o menos entero, ¿no?

—Sí, la verdad es que cuando me he caído digo ‘ostras, empezamos mal el día’, ¿no? Pero la verdad es que cuando iba cayendo me he levantado y me he sorprendido mucho. Después de una caída tan fuerte, estar bien... He caído sobre blando y también cuando me he subido a la moto he visto que todo estaba bien, por supuesto algo torcido, pero todos estaba en orden. Ya había que sobrevivir durante todo el día e intentar no perder mucho tiempo. Ricky (Brabec) venía ya (por detrás), ya había perdido 3 minutos con él, así que me he intentado enganchar porque sabía que iba a ir fuerte en las piedras y así lo hemos hecho hasta el final.

Son casi 15 minutos ahora los que tiene por detrás de Daniel Sanders. Mañana sale el séptimo y ya empieza todo dunas. ¿Cómo lo ves? Va a ser estrategia pura, ¿no?

—Mañana nadie va a querer apretar. Todos van a querer hacer atrás, ya no sé si pararse o ir lentos, pero por supuesto, porque la etapa decisiva serán las 300 kilómetros en dunas. Pero bueno, ya veremos cómo va todo. Al final todos queremos lo mismo, ¿no? Mañana no apretar para salir atrás en la (etapa) de 300, pero bueno, a ver qué sale.

¿Hay terreno y días suficientes para recuperar esos 15 minutos que están ahí perennes?

—Bueno... todo puede pasar. Daniel (Sanders) está haciendo una carrera increíble, por supuesto. No está fallando nada y un poco tiene la sartén por el mango, ¿no? Pero bueno, todo puede pasar. Ya habéis visto hoy, como yo he tenido esa caída súper temprano en el día. Por supuesto habrá que ver mañana cómo hacemos, quién sale desde atrás, quién adelante para esa (etapa) de 300, donde se puede perder o ganar mucho tiempo... así que ya veremos.

Te has encontrado a Ricky Brabec, pero mentalmente ha sido difícil volver a engancharte.

—Sí, por supuesto, después de una caída así y más al principio, ¿no?, cuando pasa al final intentas ya empujar hasta el final y que pase lo que pase. Pero cuando es al principio ir así tocado hasta el final... pues siempre es peor. También me ha dado un halo de esperanza que sea Ricky el que venía por detrás, porque se ve que iba a tener buen ritmo, iba a abrir bien la etapa, así que me he enganchado a él. Le doy las gracias desde aquí, porque bueno, ha abierto la etapa y ha tirado del todo el día.

¿Te ha pillado muy desprevenido esa caída?

—Sí, siempre que coges algo que no te esperas, siempre viene desprevenido, y más a primera hora de la mañana. Hemos salido yo a las 7:01, iba con el sol muy bajo e intentaba agachar la cabeza para tener visibilidad y en un momento no se veía ni siquiera si lo había cogido con la rueda delantera o trasera, en un momento, pues estás en el aire. Es parte del juego, al final vamos por sitios que no ha pisado nadie, pero son cosas que pueden pasar.

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