Podio redondo

Álex Palou logró en Texas una remontada y podio redondo. El español, que partió en la séptima plaza de la parrilla, logró ascender hasta la tercera en Texas, en una carrera limpia en la que acertó con la estrategia y en la que tuvo opciones de victoria hasta el final.

La victoria fue para Josef Newgarden, quien como el español supo moverse por la cabeza y sobrevivir al óvalo de Fort Worth. El de Penske arrancó en la cuarta plaza, pero el español remontó más para desde la séptima ascender hasta la tercera, para mejorar su resultado en esta pista. Los óvalos no son el territorio preferido del español, pero fue el mejor de los Ganassi a pesar de salir por detrás de auténticos especialistas en los circuitos redondos como Scott Dixon y Takuma Sato. El japonés acabó contra el muro en su estreno con la estructura del Ganassi, mientras que el neozelandés, segundo en la salida acabó quinto.

Fue un pleito reñido y disputado, en el que campeón de Penske se impuso al mexicano de McLaren, al que no le sirvió al final llevar una vuelta de ventaja sobre el resto. Llegó al liderato mediada la carrera y a base de ritmo presentó credenciales que las banderas amarillas habituales el milla y media de Texas pusieron en cuestión. La última dejó a Palou con desventaja en los neumáticos, más usados que el resto de los aspirantes al victory lane. Ello no le impidió aspirar al español a un triunfo que abortó Grosjean. La pelea terminó dos vueltas antes de lo previsto, cuando el francés se fue contra el muro y causó la quinta y última bandera amarilla de la jornada. Esta interrupción privó a O’Ward de una última oportunidad de disputarle la victoria a Newgarden, que se erigió vencedor con el español en el último lugar del cajón.