Loeb no llega a tiempo: “Solo por ritmo no se puede batir a Sainz”

Son pocos los peros que se le pueden poner hasta la fecha al Dakar que está haciendo Loeb. Pero la rotura de una barra de la dirección trasera que llegó al inicio de la carrera, es el peaje que está pagando el francés a tres días de que acabe la prueba. Con ese incidente el piloto de BRX se dejó algo más de media hora por el camino y ahora, su diferencia con el líder de la general se establece en 20 minutos. Desde que comenzó la segunda semana los tiempos han ido cambiando de bando según las circunstancias y si ayer fue Sainz quien salió beneficiado, hoy Seb ha salido al ataque para ganarle cuatro minutos al crono.

“Tuvimos dos pinchazos en la mitad de la etapa y por eso perdimos tiempo, pero excepto eso hicimos un buen día”, comienza diciendo el francés, sobre una jornada donde vuelve a acusar los mismos problemas de siempre. Las ruedas son una gran preocupación porque “siempre es importante (conservarlas)”, sobre todo en una penúltima etapa donde está previsto que se decida la carrera. Las piedras marcarán el recorrido y Loeb es consciente de ello: “En los próximos días llegaremos a una zona de muchas piedras por lo que sabemos que será una parte del juego, pero espero que tengamos más suerte y que podamos empujar”.

¿Está la clave en ser más rápido que el resto? “Empujar es lo único que podemos hacer”, asegura Loeb ante su situación actual, pero recuperar la diferencia con Sainz no será solo cuestión de velocidad: “Recuperar la diferencia y batir a Carlos solo por ritmo no será fácil. Carlos es rápido y si no tiene problemas mecánicos, de navegación o algún pinchazo, será muy difícil”. En ese sentido esperan ser ellos quienes no fallen con “una buena navegación”, porque además, “pensar en lo que estén haciendo otros no es hacer nuestro trabajo”. El suyo es seguir como hasta ahora, en modo ataque, para sacar el mayor rédito posible de una situación que a nivel estratégico se le complica.

Al Attiyah ha abandonado la carrera en el día de hoy después de un problema mecánico que, en conjunto con la avería de motor del día anterior han desquiciado al qatarí. Nasser, que debía ser un comodín para Loeb especialmente en la etapa (11) de piedras, no ayudará a su compañero pero “así es la vida”: “Por supuesto que sería bueno tener a otro coche cerca de mí, especialmente estos próximos días, porque será una especial larga y dura con piedras, pero trataré de hacerla por mí mismo”.

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