Loeb juega en solitario

Las opciones de luchar por la carrera a una etapa del final son imposibles, pero al menos Loeb parece que se despedirá de Abu Dhabi con más de una alegría en el cuerpo. La primera por esas victorias que juega ahora en solitario y la segunda, por una ventaja bastante importante que puede dejarle muy bien encaminado en la lucha por el Mundial. Tan solo necesita lo que Al Attiyah hasta el día de ayer, hasta que un fuerte accidente le obligó a abandonar, y eso es algo tan sencillo como una precaución que jamás será demasiada cuando la lucha además de contra los rivales, también es contra el desierto. Este es el rival que menos en cuenta se tiene, pero el que habitualmente suele jugar malas pasadas. Pero a pesar de tenerlo todo en contra en la primera etapa, el piloto de BRX ha conseguido familiarizarse con un terreno que de una forma u otra, le ha recompensado su capacidad de resiliencia en los momentos más complicados. Y eso que el día no fue sencillo.

La carrera se perdió el día uno, con un fallo hidráulico que obligó a Loeb a cambiar el motor y penalizar con 50 horas, pero ha adquirido otro color en un penúltimo día donde el francés se llevó el triunfo. A pesar de la niebla que retrasó la salida de las motos en dos horas y redujo la distancia de la especial para los coches hasta los 173 kilómetros, no fue demasiado complicado ante la ausencia de un Nasser para el que este desierto era como el patio de su casa y con el local fuera de juego, el de BRX únicamente tuvo que cumplir con su papel de favorito y referente en una categoría donde el podio, sigue teniendo también a los mismos protagonistas.

Lategan y Al Rajhi, a seis y nueve minutos respectivamente, cumplieron con su papel y secundaron a un piloto que tan solo ha necesitado dos días casi limpios (porque en esta cuarta etapa rompió un diferencial) para estar de lleno en la lucha. No de la manera que le gustaría, pues el liderato es utópico y la carrera está cada vez más cerca de sumarse en forma de trofeo a las vitrinas del piloto saudí, pero al menos de una forma que da un cierto respiro para los siguientes escenarios.

Luciano se repite

Mientras que unos se estrenan, otros repiten triunfo manteniendo la tónica de la temporada. Luciano Benavides conquistó su segunda victoria en Abu Dhabi y aunque dicen que no hay dos sin tres, habrá que esperar para saber si el argentino forma parte de la excepción o de la regla. Porque hasta ahora la única certeza es que a pesar de su triunfo, la ventaja de Van Beveren (segundo en la etapa a 3:22 del ganador) afronta el último día del rally con el colchón más importante que ha tenido hasta ahora y que coincide con el tiempo que se ha dejado frente al piloto de Husqvarna.

Branch acabó tercero, pero esa plaza en la general está reservada para Cornejo en una lucha donde Honda, tiene todas las de ganar, a pesar de las opciones que perdió Quintanilla. El piloto que dominó el comienzo del rally, perdió sus posibilidades al sufrir un problema con su moto en el kilómetro 250 que le dejó parado durante casi 30 minutos. Tiempo más que suficiente para que se esfumasen todas las opciones que le aseguraban hasta ese momento una segunda plaza en la general, que ya forma parte de la historia. En una lista de siete candidatos, el nombre del chileno se borra a un día del final. Toca pensar en la siguiente.