Laia Sanz: “Estoy aquí gracias a Carlos Sainz”

La ‘reina del desierto’ afronta su décimo cuarto Dakar, el tercero en coche. Laia Sainz repite con el Astara Team con el que ya compitió el pasado año, esta vez con metas más elevadas.

¿Afronta este tercer Dakar en coche con más confianza?

Obviamente, los nervios del primer año no se volverán a vivir, pero lo cierto es que cada año es un reto nuevo. Lo afronto con muchas ganas, y a partir de octubre ya se empiezan a sentir los nervios. Estoy feliz de volver, que nunca es fácil, y menos en coche, donde es difícil encontrar las oportunidades.

¿Se siente ya más piloto de coche que de moto?

No. Para eso tienen que pasar muchos años. Por el hecho de haber estado tantos años y de los resultados en moto…en coche ya han pasado tres años, pero yo me siento una ‘rookie’. Corro el Dakar, corro Extreme-E, pero nada más, cuando hay gente que lleva millones de kilómetros.

¿Y cuál es su objetivo en este tercer asalto al Dakar en coche?

Creo que hemos dado un saltito, y el objetivo es llegar a tener algún día un coche de la máxima categoría. Hay que ir dando pasos. Yo vengo de la moto, de un lugar cómodo donde ya me había ganado el sitio, y ahora estoy en el camino de hacer lo mismo en coche, donde todo es más complicado, los presupuestos mucho más elevados y hay que ir pasito a pasito. Este año hemos dado un salto con el coche, y tenemos que mejorar lo del año pasado, donde tuvimos mala suerte a principio de carrera, por lo que pasan cuatro días hasta que vuelves a tener una posición de salida aceptable. Esperemos que este año no ocurra y veremos hasta dónde podemos llegar.

De la moto ya llegaron dos ganadores de coches, Peterhansel y Nani Roma, y una mujer, Jutta Kleinschmidt. ¿Cuál de ellos es el espejo en el que se mira?

Quizás Jutta me llamaba la atención antes, pero de los tres, sin duda Peterhansel. Es Monsieur Dakar y no hace falta decir nada más. Me gustaría tener las oportunidades que ha tenido Nani, que pasó de la moto al coche entrando en un equipo oficial directamente. Eso hoy en día no pasa, pero ojalá algún día llegue a un equipo oficial como él…aunque eso te lo tienes que ganar. Y en eso estoy.

¿Aspira a ganar en coches algún día?

Ganar no se si es realista, pero si me preguntas después de mi primer año en moto que llegaría a ser novena pensaría que es coña. Hay que soñar, pero lo que me gustaría es llegar a tener los medios para saber hasta dónde llego como piloto. En coches necesitas un buen equipo, y en moto es quizás más fácil hacerlo bien en plan privado.

Pero en Extreme-E ya ha dado alegrías al equipo Acciona-Sainz.

Está claro que en Extreme-E he conseguido una mejora muy grande, y además ese no es mi estilo, con carreras al sprint que me daban miedo al principio. El Dakar es mi hábitat, pero todo lo que pasó tapó un poco el ritmo que teníamos. Por eso me gustaría tener un Dakar sin problemas para ir haciendo buenas etapas y ganarme las cosas como hice en motos.

¿Cuánto ha ayudado Carlos Sainz en esta progresión en coche?

No tengo palabras suficientes para agradecerle todo. Yo estoy aquí gracias a él, y me ha ayudado muchísimo. Está claro que yo también trabajo duro, pero el proceso de aprendizaje en el coche no es fácil, sobre todo si no estás en un equipo oficial en el que haces muchas horas de test. El hecho de tener a Carlos me ha permitido adelantar el proceso de aprendizaje con pocos kilómetros, y siempre me da muy buenos consejos en general. Es guay tener a alguien como él que te ayuda. Me lo dicen hace unos años y no me lo creo.

¿Echa de menos la moto?

Un poco sí. No volvería ni de coña, pero echo de menos una parte de la moto, el ambiente y eso. Lo que no echo de menos es el peligro y el riesgo que asumíamos.

¿Le gusta estar en un equipo totalmente femenino con coche nuevo?

Me alegra compartir equipo con Patricia. Tenemos muy buen rollo, y eso es importante. Intento ayudarla y dar consejos. En el equipo ya nos conocemos del año pasado, está más rodado, y el coche nuevo es un paso importante. El motor es turbo y más ligero, pero sobre todo lo que cambia es que el centro de gravedad es mucho mejor y tiene un comportamiento mucho más noble.

¿Y la parte ecológica?

En motorsport, si queremos seguir vivos, tenemos que dar pasos hacia la sostenibilidad, y dejar la menor huella posible. Es un valor añadido del equipo el utilizar combustible sintético.

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