Laia Sanz, ante la oportunidad de su vida

Estar en el lugar adecuado en el momento adecuado. Hace doce meses que Ebro retomó su actividad y casi el mismo tiempo, que Laia Sanz dijo adiós de manera prematura al Dakar. La española comenzaba su particular carrera para estar de vuelta en la salida del mítico raid y el próximo tres de enero cumplirá su objetivo junto a la firma española; que regresa a la prueba por la puerta grande. El s800 XRR (con base de Century) competirá en la categoría reina y por fin, le dará a una de las grandes leyendas del motorsport la oportunidad que lleva buscando desde que dio el salto a las cuatro ruedas en 2022.

“La oportunidad llega en el momento ideal”, explica una Laia, que durante la presentación del proyecto que le acompañará al Dakar estuvo acompañada por Maurizio Gerini, su copiloto por quinto año consecutivo. A pesar de que la española admite que buscaba una oportunidad como esta desde hace cinco años, a su favor ahora se enfrentará al desierto con una experiencia que es la clave del proyecto. Porque como puso en relieve Pedro Calef, CEO de EBRO, esa experiencia es la que quieren “mantener en esta nueva historia”.

El Ebro Audax Motorsport muestra su entusiasmo por regresar al desierto y por hacerlo con una “leyenda” como Laia: “Es un orgullo tenerla defendiendo nuestra bandera”. A pesar de que la piloto española pide paciencia para los primeros días de carrera, Sanz está convencida de que “si nos encontamos bien y evitamos grandes errores, al final del Dakar estaremos bastante delante". Aunque primero deben comenzar con calma un desafío que supondrá la primera toma de contacto entre el s800 XRR y el desierto de Arabia: “Tenemos que ser prudentes. Es el primer año (del proyecto) y teniendo en cuenta la juventud debemos plantear el Dakar de menos a más. Además de cómo acabó el año pasado, nos equivocaríamos sicomenzásemos con demasiadas ganas; que están".

Desde el realismo Laia es consciente de que este 2026 será una prueba de fuego para el Ebro Audax Motorsport. La española resalta la importancia de haber podido probar el s800 XRR en condiciones reales de carrera durante el Rally de Marruecos, ya que esa prueba les permitió afinar detalles que seguirán puliendo durante el Dakar. Afortunadamente “la base del vehículo es buena”, como defiende Pedro Calaf, y lo demostraron dejando lo mejor para el final. Porque mientras que Sanz reiteraba una y otra vez que estaba “cumpliendo un sueño”, no fue hasta que se desveló el vehículo cuando al rostro de la multicampeona le invadió la ilusión y sobre todo la ambición, de cara a un estreno para el que llega “lo mejor preparada posible”. Es la oportunidad de su vida.

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