El bigote no corre peligro
Price, Benavides y Howes, tres “buenos amigos”, se juegan el Dakar en dos minutos. El americano puede conseguir su primer Touareg, pero no sacrificará el bigote.
Comenzaron el Dakar con más de 10 favoritos a la victoria en motos, pero el desierto ha sido selectivo y a dos etapas para concluir la 45ª edición, son tres los aspirantes destacados a conseguir el Touareg. El desenlace no es predecible, como tampoco lo ha sido una fase previa de eliminación que dejó fuera a las primeras de cambio al vigente campeón. Una caída en la etapa 1 privó a Sunderland de defender su corona y en estos momentos Price, Howes y Kevin Benavides se preparan para convertirse en el relevo de una categoría donde, de alguna manera u otra, KTM volverá a salir airosa de la dureza del desierto.
La marca austriaca se dotó de un trío campeón que ha cumplido con las expectativas, salvo en una variante. La plaza de Walkner ha sido ocupada por la Husqvarna de Howes, uno de los pilotos con mayor proyección en las últimas temporadas junto a una moto que también pertenece el grupo de KTM. Por lo que todo se quedará en casa. De hecho el americano ya se siente en ella, incluso jugándose frente a dos pilotos que ya saben lo que es conquistar el Dakar, su primer Touareg. “Toby (Price), Kevin (Benavides) y yo somos muy buenos amigos”, cuenta Skyler a AS, sobre unos rivales que se conoces muy bien: “Entrenamos juntos, pilotamos juntos... Estaremos felices por quien gane esta carrera”.
Se nota la sintonía en el momento en el que, totalmente por separado, ambos responden a cuál es la estrategia que les espera a dos etapas del final: “Full gas (gas a tope)”. Ninguno de los tres dudó a la hora de dar una respuesta que viene motivada por la situación de la general. Price tomó el liderato tras la etapa 12 por ¡28 segundos! y desde la posición del australiano hasta la tercera de Benavides, la carrera está en poco más de dos minutos. Por ello, a pesar de que “la última etapa no será muy difícil”, Toby no se confía ante una última lucha contra el crono donde las dunas serán decisivas: “Las dos etapas se harán muy largas, vamos a ir a por un buen resultado pero no será fácil. Todavía quedan dunas y si se nos engancha la moto, la ventaja puede desaparecer”.
Price está convencido de que puede “ganar la carrera”, pero es de los tres contendientes es el más adelantado a la hora de partir en busca de su destino, después de que Howes y Benavides jugasen sus cartas en la especial del viernes. El australiano necesita “un buen día” para terminar de enfilar el que puede ser su tercer Dakar, pero “cualquier cosa puede pasar”, teniendo a sus rivales a la zaga. “Será un día muy físico”, reconoce un Skyler, que marca el punto principal: “No abro la especial y mi posición me permitirá empujar al máximo hasta el final”. En la misma situación se encuentra un Kevin que en busca de su segundo Touareg, controló durante el viernes “porque no me servía nada salir delante” y será en la 13ª lucha contra el crono “el momento para atacar al 100%”.
Será la primera ocasión en la que Howes se vea con posibilidades reales de hacer suyo el Touareg. “Sabía que era capaz de estar en esta situación si todas las piezas del puzzle encajaban correctamente”, cuenta el americano, que tiene claro dónde, en caso de ganar, no cederá: “No me cortaré el bigote”. Su seña de identidad le acompañará en “una etapa importante” y todo lo que venga después. Tres “buenos amigos” se están divirtiendo y ahora podrán hacerlo más que nunca, en un desierto que busca vencedor entre tres aspirantes para los que ya no hay estrategia. Solo vale atacar, hasta el final.