El Acciona Sainz se reencuentra con la victoria en Extreme E
Laia Sanz y McConnell cierran a lo grande el Desert X Prix. Primer triunfo de la temporada en una final donde no entró McLaren y el RxR sufrió más de lo esperado.
El “vamos” que acompañó a una expresión de rabia en el rostro de Laia Sanz cuando la española aparcó el Odyssey, era la manera más clara de manifestar cuánto de importante era lo que habían conseguido. Porque aunque la temporada de Extreme E no ha hecho más que comenzar, hacerlo con victoria siempre tiene un sabor especial. Sobre todo si sirve para redimirse de un estreno agridulce y, aunque parezca mentira, sacarse la espina de cómo acabó el último curso. “Después de cómo terminamos en Chile este triunfo es especial”, recordó nada más bajarse del coche Laia, pero ese no era el único motivo de celebración. Porque a un cambio de estrategia le acompañó una victoria, y eso quiere decir que las cosas en el Acciona Sainz funcionan y saben de qué manera actuar para volver a ser candidatos al título; lo demostraron con una muestra de superioridad en el momento más necesario.
En la gran final no estaba el McLaren de Cristina Gutiérrez y Ekstrom, que ganó en la carrera de redención (marcada por una bandera roja tras un vuelvo del JBXE del que Akeel salió ilesa) por 69 milésimas que dieron sentido a las palabras que Carlos Sainz dedicó en el Dakar hacia el sueco. Porque aunque fue en un contexto completamente diferente, el español aseguró que quien subestimase el potencial de Mattias no sabía de automovilismo y el piloto de Woking simplemente volvió a destacar con una remontada salvaje donde cambió de nuevo las líneas y minimizó daños en un certamen donde, como reconoció la burgalesa, todo puede cambiar de un momento para otro. Y eso es a lo que se dedicó el Acciona; cambió todo el desenlace de una final que dominaron de principio a fin.
McConnell fue el primero en ponerse al mando y cogió la cabeza desde una primera curva a la que el ganador del día anterior, el RxR, llegaba a la zaga. Ahlin Kottulinsky intentó hacerse hueco a la fuerza, pero le fue imposible ante un polvo cegador y un terreno repleto de rodaduras, que le hicieron llegar al cambio a más de 9 minutos de la cabeza. Con dos vueltas por delante un Kristoffersson muy comprometido con la causa podía tratar de buscar el doblete para el equipo de Rosberg, pero Laia Sanz estaba ahí para demostrar que este era su día y tanto Andretti como Veloce, para complicarle la vida a una estructura que vuelve a comprobar de primera mano como este 2024 no será un paseo triunfal... para nadie.
Defensa implacable de Laia Sanz
La victoria del Acciona Sainz no estuvo cantada en ningún momento. De hecho la tuvieron que trabajar por partida doble. Porque aunque McConnell le entregó el coche a Laia Sanz en cabeza, la española debió defenderse del prototipo de Andretti desde que hizo el relevo. Las distancias se ajustaron incluso por debajo del segundo en las dos primeras posiciones, mientras que por detrás el RxR era incapaz incluso de asaltar un podio al que tuvieron que renunciar. Pero en la última vuelta, la española encontró la manera de subir una marcha y coger la ventaja necesaria para estrenar su contador de victorias esta temporada. Funcionó el trabajo en un equipo renovado, “Fraser (McConnell) ha hecho un gran trabajo”, Laia acabó “muy contenta” con su progreso y el jefe Sainz felicitó el trabajo bien hecho y el primer aviso del equipo: quieren que este sea su año.