Edgar Canet: “A Nani Roma no le gustó que corriese el Dakar”
El catalán se estrena en la carrera como piloto oficial de KTM y el más joven de la edición, pero llega con la lección aprendida: “¿Ganar? Más adelante”.
Desde los cuatro años andaba subido a una KTM, pero Edgar Canet (19 años, Barcelona) no sabía lo que le tenía guardado el destino. En su debut dakariano, donde figurará como el piloto más joven de la edición, el español se ha convertido en oficial de la marca austriaca. Y aunque a aquellos que le acompañaron durante su trayectoria deportiva, como su familia o un Nani Roma que le apadrinó durante sus inicios en el motocross, la idea de verle en el Dakar siempre les generó rechazo, el sueño de ese niño que llega con la lección aprendida se ha hecho realidad.
—Llega al Dakar como una estrella, pero lo cierto es que se le ha ido descubriendo mucho en este último año. Para quien todavía no le conozca, ¿quién es Edgar Canet?
—Pues Edgar Canet es un piloto de motocross que ha estado desde los cuatro años encima de una moto. Sí que de pequeño había corrido algún enduro al que se le llama ‘enduret’ por la zona de Barcelona, pero sobre todo me he estado centrando en las carreras de motocross. Ya cuando cumplí los 18 años, que había corrido el europeo, el Mundial junior de Motocross, pues decidí apuntarme a una carrera en Marruecos, en África... porque era también un objetivo que tenía y cuando cumpliese los 18 años, decidí probarlo para ver si me gustaba. Cuando volví de esa carrera de Marruecos fue cuando le comuniqué a mis padres, que quería que mi carrera deportiva se iniciara en el mundo del rally raid, y así ha sido. A partir de este 2024 he empezado a entrenar a tope para ello, a hacer todas las pruebas posibles, que corrí como en Argentina, en Portugal, en Marruecos, la Baja Aragón... He estado entrenando también todo lo posible para llegar preparado al Dakar.
—¿Cuál fue la reacción en casa cuando habló de pasarse a los raids y hacer el Dakar?
—Uff... cuando les planteé la idea el objetivo era el Dakar, porque en el mundo del rally raid es la carrera más importante y lo que llevamos viendo durante todos estos años en la tele, todos los días de Navidad... La verdad es que a mi madre no le gustó para nada. La verdad es que lo pasa bastante mal, pero bueno, yo lo que les digo es que en el rally yo puedo hacerlo bien, sé dónde está mi límite, y sé dónde puedo apretar y dónde no. Al final es una carrera donde compito contra mí mismo, no hay nadie más al lado que me esté apretando. Sí que lo hay, pero es muy diferente comparado con el motocross. Entonces los raids son un deporte donde yo creo que puedo ser yo mismo y hacer mi carrera, no tengo que estar pendiente de los demás. Esto también es un punto donde me gusta más esta competición.
—¿Le motiva más ser su propio rival que estar midiéndose constantemente con el resto?
—Bueno, sí que me gusta estar midiéndome con el resto, porque cuando voy a entrenar con Barreda o con cualquier otro piloto, siempre nos comparamos y cogemos tiempos y todo lo que sea posible. Pero sí que al estar compitiendo, uno mismo ya sabe dónde están los límites y si tienes a alguien al lado, a veces es más fácil sobrepasarlos. Al estar más solo, digámoslo así, puedes estar más concentrado en ti mismo. Y yo creo que en este aspecto me va mejor.
—Dice que entrena con Barreda y él siempre ha sido un piloto que ha destacado por jugar con los límites. ¿Cuál es la mayor lección que le ha dado hasta ahora?
—Pues con Joan hice mi primer roadbook, la verdad. Mi primer roadbook que hice en una moto fue con él y ahí fue cuando le comenté que quería dar el paso del motocross a rally raid. También se lo comenté a Nani Roma, porque Nani siempre ha sido como mi padrino en el motocross, desde que yo tengo 11 años. Nani y Kini han sido mis padrinos y siempre me han estado ayudando. Por eso, cuando le di la noticia a Nani de que quería correr el Dakar, hace bastante tiempo, no le gustó y me dijo que de momento hiciera motocross y que esto ya se vería más adelante. Él quería que de momento hiciera motocross y que me hubiera concentrado en el motocross. Pero pasado un año, cuando cumplí los 18 y le dije que me gustaría de competir en raids de verdad, insistió en que no, que él quería que yo siguiera haciendo motocross porque los raids eran muy peligrosos, hasta que vio que empecé a hacer roadbooks con otras personas. Los hacía con Joan o me iba a buscar roadbooks para entrenar; ahí empecé a hacerlo por mi cuenta y cuando vio que ya estaba en este camino y que no iba a cambiar, es cuando me empezó a ayudar de verdad y empecé a hacer todo lo posible para llegar hasta aquí. Además, en todo este tránsito empecé a entrenar con Barreda. A Joan le hizo mucha ilusión que a mí me gustara también el rally, así que hice mis primeros roadbooks con él, y me ha enseñado que es un deporte donde tienes que estar muy concentrado, porque a la mínima que hay un despiste puedes tener un accidente grave. Joan es conocido por lo rápido que es, pero también no ha tenido mucha suerte en este deporte. Para mí es un referente porque ha ganado muchísimo. Sí que no habrá ganado el Dakar porque se le ha escapado varias veces, pero ha ganado casi 30 etapas y entonces, para mí es todo un ejemplo a seguir. Además, hay aspectos donde él está intentando ayudarme también en lo máximo posible.
—Aunque este año Barreda ya no formará parte de la carrera, ahora tenemos delante a otro español como es Tosha Schareina. Ambos tienen estilos de pilotaje muy diferentes, pero ambos van rápidos. ¿Se ve reflejado en alguno de ellos?
—No sé... Si tengo que hablar de un referente en el mundo del rally, la verdad es que no tengo uno claro. De momento tengo mucho como referente a Nani, ya que ha ganado el Dakar en motos y a Marc Coma que ha ganado 5 dakares... No me fijo en un piloto en concreto, porque ha sido todo un grupo de personas los que me ayudan en todo lo posible y cojo lo mejor de cada uno. Yo intento aprender lo máximo posible de ellos, que tienen mucha experiencia. Tosha Schareina es un piloto con el que he hecho un poco de motocross, hemos coincidido en algún circuito y mira ahora; está en el punto de mira en el rally raid, es uno de los favoritos a la victoria este año y aunque no he entrenado demasiado con él, ahora mismo está en la élite del rally raid.
—En cierto modo, ¿no se siente usted también un poco en el punto de mira? Se va a estrenar en el Dakar, llega como oficial de KTM y aunque está en Rally2, ya se ha codeado en carrera con los pilotos de RallyGP.
—No, la verdad es que estoy motivado, es una cosa que me motiva, pero que no puede volverme loco. No puedo intentar luchar contra los ‘top riders’ este año, yo voy a hacer mi carrera, y si van saliendo los resultados no va a ser para compararme, ni mucho menos, va a ser porque estarán saliendo las cosas bien. Este año el objetivo es terminar y aprender lo máximo posible, para más adelante poder luchar con ellos de verdad.
—¿Pensar en la victoria de su categoría es demasiado ambicioso o pretencioso?
—Pensar en la victoria es imposible, yo creo.
—El hecho de que sea el piloto más joven de la carrera, con 19 años, ¿es lo que le resta presión y le hace ir con ese perfil bajo?
—Exacto, yo no tengo ningún tipo de presión, porque el único objetivo que tengo y que todo el mundo, el equipo y todos me están diciendo, es que tengo que aprender. No tengo prisa en ir rápido, tengo muchos años por delante en los cuales podré demostrar el nivel, pero de momento toca coger ese nivel que me gustaría tener, ya sea de navegación, de concentración... Quiero tener todos los aspectos controlados. Soy junior y estos aspectos me faltan por aprender, por eso este año no voy a forzar más de la cuenta. No tengo el objetivo de ganar el rally, esto lo tendré más adelante. De momento es aprender, y si van saliendo los resultados serán bienvenidos, pero el objetivo es aprender.
—Pero habla muy a su favor el que esté tan bien rodado y que en tan poco tiempo KTM haya confiado totalmente en usted.
—Sí, la verdad. Estoy muy contento de toda la ayuda que recibo de la familia de KTM, pero tanto Nani como Kini y otras personas me han ayudado lo máximo posible, porque ellos también han visto la motivación que tengo. Jordi (Viladoms, Director Deportivo de Rally de KTM) sí que me invitó a ir a hacer el test en Estados Unidos con el equipo Factory para probar, estuve con ellos, aprendí muchísimo, y ahí estuvimos haciendo seis días de navegación que me han ido muy bien. KTM me está ayudando y cómo lo está haciendo también dice mucho. Es la marca en la que he estado toda mi vida, así que yo estoy muy ilusionado de todo lo que están haciendo por mí.
—Aunque tiene muy claro que es un año de aprendizaje, ¿con qué resultado volvería satisfecho a casa?
—Pues me iría satisfecho a casa, primero, si termino. A partir de ahí, con algún top 10 en la general yo estaría contento. Pero dejando aparte el resultado, que es lo que me dicen todos los compañeros, tanto Nani, como Joan, como Viladoms... es que sea capaz de no mirar para nada la clasificación después de cada día. No sirve para nada, lo único que hace eso es meterte presión y no tenerla es lo bueno que tengo este año. No me tengo que fijar en los números, voy a aprender algún día, porque de todo se aprende, y algún otro día sí que voy a intentar hacer un buen resultado. Pero por si sale algún error o por si falla alguna cosa, poder aprender de ello.