Duro golpe para Sainz: “Tengo que recuperarme”
El vuelco que protagonizó el español en la primera parte de la 48 Horas condiciona todo su Dakar. “Mis opciones de ganar han desaparecido”, asume.
Tan solo dos etapas después de haber inaugurado este Dakar, la carrera ha hecho estragos entre los favoritos. Entre contratiempos mecánicos que eran de esperar ante la llegada de nuevos coches a la categoría reina, lo imprevisible fue el vuelco que protagonizó Carlos Sainz durante la primera parte de la 48 Horas. El accidente, tan inoportuno por el momento como decisivo de cara a sus aspiraciones para revalidar el Touareg, fue importante. Tanto, que el madrileño da por perdidas todas sus opciones en esta edición: “Mis opciones de ganar han desaparecido”.
Tras una llegada casi milagrosa al vivac de Bisha con un T1+ que era lo más parecido posible a un buggy, ante la ausencia de carrocería y parabrisas delantero, Carlos atendió a la prensa con un mensaje muy claro: la victoria es una misión imposible. Con diez etapas por delante, ese detalle ni siquiera es ahora mismo un aliciente para el español, que ha recibido un duro golpe inesperado: “Todo ha salido mal. Quiero recuperarme tanto anímicamente como físicamente”. El día de Reyes escondía un regalo envenenado que comenzó durante la jornada anterior: “La verdad es que ayer tuvimos el accidente y perdimos bastante tiempo (59 minutos) y hemos seguido perdiendo. Esta mañana pues hemos tenido otro pinchazo y luego nos hemos perdido también en un sitio, no éramos capaces de controlar el camino y bueno, dos días para olvidar”.
Todos los contratiempos de estos últimos 300 kilómetros de especial fueron lo de menos, en un día donde todo pudo ser peor. Sin parabrisas delantero, con solo una rueda de repuesto y un coche que conservaba la base de una manera delicada, estar a una hora y media de la primera posición es tan milagroso como haber llevado el coche de vuelta al vivac. Nada más bajar del Raptor, Sainz respondió con una disculpa a un gesto de agradecimiento por no haber tirado la toalla que llegó desde los altos responsables de Ford. Pero la realidad es que han sido “dos días muy difíciles de aceptar nada más empezar la carrera”. “Es lo que hay y ahora debemos seguir para adelante, tratar de ayudar al equipo y tratar de aprender el máximo”, expresó.
En ese mensaje Carlos va más allá y asume cuál será su papel a partir de este momento en el Dakar. La prioridad será pensar en el equipo y aunque no esperaba que la carrera se decidiera en dos etapas, es imposible regresar al pasado. “Ha sido un poco exagerado este recorrido. Sabíamos que esta etapa de 48 Horas podía ser determinante y lo ha sido para nosotros desde luego. También para otra gente, pero es lo que hay, ha sido así y nos ha tocado a nosotros. Quizás ha sido un arranque de rally muy duro”, expresaba el español, en un momento donde incluso ganar etapas pasa a un segundo plano. Sainz solo piensa en ayudar y “si llega alguna etapa pues mejor”. Pero primero, debe recuperarse de una espalda “un poco tocada, pero que es normal por el golpe”.