“Dicen que soy el Messi del Dakar”

El propio Nasser Al Attiyah (Qatar, 52 años) expuso lo mucho que le había costado llegar hasta donde está ahora. Compitiendo en el Dakar desde 2004, el qatarí necesitó desembarcar en un buen equipo para comenzar a hacer historia en una carrera donde tiene a tiro su quinto Touareg. La suerte le ha sonreído en las últimas ediciones, aunque dice sin tapujos que es “el mejor”. No esquiva ninguna pregunta ni tampoco esconde una fórmula ganadora para tener éxito en el rally más duro del mundo. Ese, en el que como ha demostrado, la velocidad no lo es todo.

—Vuelven a dominar de nuevo y comenzaron a hacerlo desde la primera semana.

—Hemos tenido buenas sensaciones, sobre todo después de la primera semana. Me dejó satisfecho llegar al final de la primera semana con una ventaja importante en el liderato. A partir de ahí solo necesitábamos manejar la segunda semana y aunque nunca es fácil, siempre intentamos dar lo mejor de nosotros mismos.

—Habla de que no es fácil, pero en los últimos años siempre ha parecido fácil para ustedes.

—No, para nada, no lo es. Pero nosotros lo que intentamos es hacerlo fácil cada día, porque necesitamos encontrar las sensaciones en cada etapa para poder hacer una carrera sin problemas. Pero este año hemos pasado etapas que también han sido muy duras para nosotros. No está siendo un Dakar fácil, pero desde el primer momento intentamos ser fuertes en cada etapa y me dejó muy contento tener un liderato así después de tres días. Es algo que también hicimos el año pasado.

—¿Es cuestión de suerte o usted es el mejor?

—Soy el mejor (risas).

—Sabemos que le gusta el fútbol, ¿se podría decir que usted es el Messi del Dakar?

—En el fútbol el mejor jugador también es el que se ha llevado este año el Mundial y ese ha sido Messi. La gente sí que dice que Nasser es el Messi del Dakar (risas).

—¿Pero no cree que en una carrera como esta la suerte también influye?

—También influye la suerte. Por supuesto que también necesitas tener suerte en el Dakar, pero si te das cuenta todo lo que hacemos, lo estamos haciendo de una manera realmente asombrosa. Tengo mucho respeto por otros pilotos, Carlos (Sainz), Peterhansel, Loeb... Son unos pilotos muy fuertes y están en unos equipos muy fuertes. Pero como dices, se ha visto que a veces ganar es buena o mala suerte para el piloto. Tanto yo, como Mathieu (Baumel, su copiloto) como el propio equipo, siempre hacemos las cosas de una forma determinada para que salga todo bien.

—¿Cree que el resto de equipos no lo hace bien?

—No lo sé, no trabajo con ellos. Audi por ejemplo es un equipo muy fuerte.

—No decía lo mismo al principio sobre ellos...

—Sé muy bien lo que dije y también que hablé de Loeb como rival. Pero Sébastien cometió muchos errores desde que empezó el Dakar. Ahora ha recuperado y es tercero en la general, está intentando recortar distancias para terminar en el podio, pero no me preocupa. Está bien que trabaje así, pero porque solo me recupera cinco minutos al día, ¿sabes? Eso con nuestra ventaja no es nada. Le queda todavía un camino muy largo y primero tendría que coger a Moraes. Pero además, si empujas como lo está haciendo él ahora mismo, te pueden surgir los problemas. Mientras nos recupera cinco o diez minutos al día no tendremos problema con las etapas que quedan por delante. Queremos ganar y defender el título, hemos hecho un buen trabajo y es lo que siempre digo, hay rivales peligrosos pero tenemos que empujar para ganar.

—¿Ha empujado todo lo que ha podido?

—Comencé a empujar el 3 día, que gané la etapa, el día 4 ya fui un poco más lento porque el recorrido era peligroso, los días cinco y seis también empujé para ganar y a partir del día siete ya entendí que necesitábamos perder. En ese momento necesitábamos pensar y supimos que esa era nuestra estrategia. En nuestra situación necesitas perder etapas y empezar desde el fondo. No necesitas relajarte, que es diferente. Yo compito con tres velocidades: una es cuando empiezo detrás, otra cuando necesito terminar entre los tres primeros y otra que activo cuando veo que puedo ganar. Esas son las que uso cada día, así lo hago.

—Y así gana... ¿Esa gestión es la que necesita un piloto para llevarse el Dakar?

—Para ganar el Dakar no necesitas ir rápido, cualquiera puede ir rápido. Necesitas ser fuerte, inteligente y no cometer errores en ningún momento. El piloto necesita experiencia, muy muy buena experiencia. Necesitas eso y también entender todo y cuál es el nivel. Si vas por encima de tus posibilidades comenzarás a tener problemas y si vas por debajo, pierdes... tiene que saber encontrar un equilibrio y no es difícil hacerlo. Eso forma parte de la carrera. Audi ganó inmediatamente las dos primeras etapas y subieron mucho de confianza y en la tercera etapa ya no fue tan bien y ahí comenzaron los problemas. Cuando empiezas a perder todo el mundo quiere empujar y empujar, mientras que cuando nosotros ganábamos y encontrábamos los tiempos, ahí empezaron los problemas para los demás.

—¿Cómo se imagina el Dakar del año que viene?

—Depende... Si Audi quiere ganar tendrá que ficharme y si Toyota quiere que me quede, tendrá que pagarme más (risas). Estoy bromeando...

—¿Cree que tendrá el mismo poder dentro del equipo si llega Fernando Alonso?

—Fernando no complicaría las cosas para mi porque necesitaría tiempo para ganar. Loeb tiene nueve títulos mundiales de rally, empezó a competir en el Dakar en 2016 y hasta ahora no ha ganado. 2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021, 2022.... han pasado 8 años. Pero es verdad que lo sigue intentando y está muy cerca. Pero a veces necesitas entender cómo gestionarlo todo. Es lo mismo que me pasó a mí. Cuando llegué en 2004 ganaba etapas pero no podía ganar el Dakar. Ganaba, ganaba y ganaba cada año, iba rápido... pero de repente cuando cambié de equipo, a un buen equipo como fue Volkswagen Touareg, ahí fue cuando supe que podía ganar. Tener a un gran equipo detrás ayuda a ganar el Dakar.

—¿Volverá Fernando?

—Yo espero que le vuelva a ver aquí y que venga al Dakar a competir. Es un buen amigo mío, hablamos muchas veces y personalmente creo que sí volverá. Por supuesto (que puede ganar), por qué no, tiene unas buenas habilidades, pero necesitará tiempo si quiere ganar el Dakar.