Verstappen estalla contra la FIA
El campeón se indigna con el castigo por decir “jodido” en una rueda de prensa. “Este tipo de cosas también influyen en mi futuro”, amenaza.
Al margen de lo que sucedió en el asfalto en el GP de Singapur, que no fue poco, uno de las anécdotas del fin de semana ha escalado progresivamente hasta el punto de enfrentar a Verstappen con la FIA. El holandés tuvo que declarar ante los comisarios y fue castigado con “servicios comunitarios” aún no concretados por decir en la rueda de prensa del jueves que “el coche estaba jodido”. El presidente de la FIA, Ben Sulayem, había declarado pocos días antes que los pilotos no podían “hablar como raperos” y debían cuidar el lenguaje. La primera reacción de Max, ya el sábado, fue responder cortante en la rueda de prensa oficial. El domingo después de su segundo puesto también pasó rápido por el trámite de la conferencia y después convocó una rueda de prensa paralela en el hospitality de Red Bull.
Entonces sí se explayó y fue crítico: “No voy a dar respuestas largas cuando me tratan así. Nunca he sentido que tuviera mala relación con ellos (por la FIA), incluso este año hice trabajo voluntario con comisarios júnior, les di media hora de entrevista, yo intento ayudar. No suelo decir que no, si me piden algo lo hago, pero luego me tratan así. Pues no funciona así, así que si es obligatorio responder (en la rueda de prensa), nadie dice cuánto tiene que durar la respuesta”.
“Carlos tuvo una multa por cruzar la pista, ¿pero esto qué es?”
Max expuso su caso a la asociación de pilotos “y todos se empezaron a reír, les parece una tontería”. De hecho, el holandés sacó a la palestra otra penalización extrema, una sanción de 25.000 euros a Carlos Sainz (reducida a 12.500 mientas no reincida) por cruzar la pista de camino al garaje después del accidente del sábado en la Q3. “Carlos tuvo una multa por cruzar la pista. ¿Pero esto qué es? Bandera roja, los coches están entrando, es una situación segura y él sabe lo que hace. Para mí esto es ridículo, no somos estúpidos. Desde el momento en el que los comisarios lo anotan, es una tontería”, opinó el tricampeón.
“Si no puedes ser tú mismo, es mejor no hablar. Y en el fondo, eso es lo que nadie quiere. Tienes que poder mostrar tus emociones porque esto es deporte. Yo siempre voy a ser yo mismo, no voy a cambiar mi manera de ser en la vida ni aquí”, zanja el líder, con 52 puntos de ventaja sobre Norris tras la victoria de Lando en Marina Bay. Verstappen no se plantea aún hablar con Ben Sulayem aunque matiza: “No es solo la FIA, también la F1 y cómo operan juntas”.
Max, de 26 años, lanza una amenaza: “Esta clase de cosas también influyen en mi futuro, cuando no puedes ser tu mismo y tienes que lidiar con esta clase de estupideces. El éxito está bien y también las carreras, pero cuando has tenido éxito y has ganado títulos lo que quieres es pasártelo bien. Todos van al límite, delante y detrás en la parrilla. Pero estoy en un momento de mi carrera en el que no quiero tener que tratar constantemente con estas tonterías, es realmente exigente y no es manera de seguir en este deporte”.