Un Aston Martin para olvidar

Si no lo remedia un gran botín de puntos en alguna de las últimas tres carreras, Alonso habrá pilotado en 2025 su peor coche desde que regresó a la Fórmula 1. Aston Martin es séptimo en el Mundial de constructores con 72 puntos, en una pelea apretada con Racing Bulls (6º, 82), Haas (8º, 70) e incluso Sauber (9º, 62). La escudería británica había terminado en quinta posición el campeonato de fabricantes en las temporadas de 2023 y 2024, ya con Fernando y Stroll en el equipo. Y antes, en las dos campañas con Alpine, Fernando pilotó el quinto coche en 2021 y el cuarto en 2022, según la tabla de puntos.

Aquellos Alpine fueron competitivos dentro de la zona media, el punto negativo fue la fiabilidad. El Aston Martin de 2023 resultó un gran monoplaza que permitió a Alonso ser cuarto del Mundial y subir ocho veces al podio. Y el AMR24 arrancó bien la temporada, mostró muy buenas condiciones a una vuelta, aunque luego se desdibujaba en carrera. Sin embargo, el AMR25 no ha tenido puntos fuertes y apenas se ha defendido circuitos de alta carga y curvas de baja y media velocidad, con un gran déficit en pistas de alta eficiencia aerodinámica.

Alonso fue quinto en el GP de Hungría, su mejor resultado del año. Ha salido desde el top-10 en nueve carreras de 21, casi la mitad; y por ahora ha puntuado también en nueve. Pudo hacerlo en alguna otra, como Mónaco (luchaba por el sexto y falló el motor). Pero también hubo ocasiones en las que el piloto sumó más de lo que mereció Aston. En el Mundial de pilotos es 12º, su peor posición desde 2017 con McLaren Honda.

“No echaré de menos esta generación de coches”

Fernando reconoce que al dirigir todos los esfuerzos de la fábrica hacia el proyecto de 2026, no ha sido posible progresar con el AMR25: “Es una temporada muy diferente porque el cambio de reglas de 2026 es muy importante para todos. Así que este 2025 se ha quedado en medio de la nada. No hemos hecho el trabajo que nos hubiera gustado con este coche, la base de 2024 no era la mejor. No fuimos muy competitivos ya en la segunda mitad del año pasado y desafortunadamente esa era la base de 2025. Así que, con 2026 siendo prioritario, nos ha costado encontrar el camino en esta temporada. Ha sido difícil para Aston y no estamos contentos con la temporada, pero era un escenario complicado”. Los principales ingenieros que lideraron el diseño de este coche y su predecesor, con Fallows y Blandin a la cabeza, ya no están en Aston Martin. La responsabilidad del proyecto de 2026 recae sobre Newey y Cardile.

Después de cuatro temporadas, concluye un ciclo reglamentario que prometió carreras apretadas y luchas rueda a rueda, pero que en realidad propició el coche más dominante de la historia (Verstappen ganó 19 carreras en 2023 y Red Bull, 21). Alonso no lamenta este fin de ciclo: “No echaré de menos esta generación de coches. Aunque probablemente el año que viene iremos más lentos y los echaremos de menos, porque siempre quieres pilotar lo más rápido posible. Pero pienso que son coches demasiado pesados y el efecto suelo o las alturas nos hacen correr de una manera que no es divertida, ni podemos seguir a otros coches. Las expectativas con estas reglas eran que se podría seguir de cerca a otros coches y tendríamos más acción en la pista, pero más allá del primer año, eso no ha sucedido”.

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