Terrorífico accidente de Pérez

Espeluznante choque de Sergio Pérez con Kevin Magnussen en la salida del GP de Mónaco. El mexicano trató de defender el exterior en la subida hacia Massenet, cerró el paso al Haas y con el toque ambos perdieron el control. El Red Bull quedó a la deriva camino de los guardarraíles y el danés se estrelló de manera perpendicular con el monoplaza de Checo, que quedó seccionado en su perfil izquierdo, sin ruedas. Entre los damnificados, Hulkenberg no pudo evitar el toque con el otro Haas y su coche también sufrió daños, así que no pudo continuar la carrera. La buena noticia: todos los pilotos se bajaron de los coches por su propio pie y sin daños aparentes.

Fue una primera media vuelta enormemente peligrosa en el Principado: Sainz había tenido un toque con Piastri y una posterior salida por el pinchazo que le había provocado el australiano en su Ferrari; y Ocon casi se lleva por delante a Gasly, tuvo un vuelo por el contacto entre los dos Alpine. Esteban no podría tomar la salida más adelante por los daños en su monoplaza.

Salió la bandera roja a los pocos instantes. Eso permitió, por ejemplo, que Sainz recuperase la tercera posición en la parrilla en lugar de la 16ª a la que había caído tras el incidente en la curva del Casino, cuando le pasó prácticamente todo el pelotón, porque no todos los pilotos habían completado el primer sector cuando se decreta la bandera roja. Durante cerca de tres cuartos de hora, los operarios del circuito de Montecarlo limpiaron la importante cantidad de piezas de fibra de carbono que habían quedado en el asfalto tras el aparatoso accidente. La resalida se prefijó para las 15:44 desde la parrilla, 44 minutos después de la salida original.

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