“Si Alonso hace trompos, algo está mal”

El Aston Martin se ha cavado progresivamente un pozo. Aquel coche que subió siete veces al podio con Alonso y llegó a luchar por la victoria con las evoluciones de Canadá es hoy carne de Q1. Fernando sumó 19 puntos en Zandvoort, su último gran resultado de 2023, y apenas 14 puntos en las seis carreras posteriores. Las teorías para explicar el bache son diversas, algunos en el paddock hablan de correcciones indicadas por la FIA en algunas piezas para ajustarse completamente al reglamento. Pero eso solo no justifica un bajón tan pronunciado en comparación con Ferrari, Mercedes y sobre todo McLaren. Las evoluciones que han llegado de la fábrica han sido insuficientes y no han aportado el extra de prestaciones esperado. El AMR23 terminará el año como quinto coche en constructores, cuando llegó a ser segundo; y Alonso ahora es quinto en el Mundial, pero aún puede perder un par de puestos si no paran la sangría.

Mike Krack, jefe de la escudería, niega que estén perdidos: “Cuando estás perdido pruebas cosas que no son razonables. Este no es el caso, tuvimos conversaciones con los ingenieros para valorar salir desde el ‘pit-lane’ en las últimas carreras y es importante que entendamos los datos que encontramos. Hay que tomar decisiones pragmáticas. No es fácil, pero es lo correcto para progresar”. “Los coches son complejos, intentas mejorarlos todo el tiempo, pero cuando traes mejoras… sabemos los problemas que tuvimos en Austin, y luego en la carrera estábamos muy contentos con cómo fue. Y todo funcionaba como esperábamos. Luego vamos a México y no estamos como esperábamos. Habrá que averiguar por qué porque habrá otras pistas con otras características. Tenemos que entender lo que estamos haciendo. La mejor manera de hacerlo es volver a lo que conoces y comparar”, justifica el ingeniero luxemburgués.

AS consulta a Tom McCullough, director de rendimiento, dónde está el problema: “Definitivamente no son los pilotos porque cuando han tenido un buen coche han hecho un buen trabajo. Es difícil para ellos, hemos visto trompos de Fernando, salvados con mucho control en alta velocidad. El coche es difícil de pilotar en México. Cuando cambias un concepto aerodinámico, o el suelo o cosas características, siempre lleva tiempo optimizarlo. Quizás en Austin se hizo bien y pensábamos que sería más fácil en México, pero sufrimos para tener el balance en la zona lenta”.

Krack también ahonda en los trompos de Alonso como la punta del iceberg: “Ha ganado más de 30 carreras y tiene dos títulos, así que si hace trompos algo está mal. No estaba contento y debemos darle un coche mejor. Si no le damos un buen coche a nuestros pilotos, no hay nada que puedan hacer. Son pasajeros. Ha sido así para Fernando desde el inicio del fin de semana (en México)”. Sobre la caída de posiciones del asturiano en la tabla: “No es bueno. A nadie le gusta. Pero tenemos que ser realistas, ¿qué hacemos? Tenemos que tener la competitividad para evitar estas circunstancias. Aún quedan carreras y podemos hacer algo. Lucharemos hasta la última vuelta como Fernando”.

Mientras deciden con qué paquete aerodinámico compiten en el GP de Brasil (al dejar México aún había dudas, aunque “no se tomarán riesgos”, aseguran ante un fin de semana con esprint), preguntan a Krack cual es el gesto de Lawrence Stroll, propietario del equipo: “No está contento, pero nosotros tampoco. Nadie lo está. Cuando tienes un inicio tan bueno en la temporada y luego pierdes competitividad, no estás contento. Nadie lo está”.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.