Sainz pelea por la pole
El español, tercero en el último entrenamiento de Las Vegas. Russell lideró por delante de Piastri. Verstappen se reengancha (5º, 0.567) con un Red Bull afinado.
Al menos Verstappen ya pelea contra el resto con herramientas similares. El inicio del fin de semana fue terrorífico para Red Bull y también el arranque de la última sesión de entrenamientos libres en Las Vegas. “El coche es inconducible, me voy a chocar”, dijo el campeón por la radio a sus ingenieros. Caló el mensaje y acertaron con los cambios, porque a los pocos minutos regresó Max a la pista y marcó el mejor tiempo de entonces, luego caería a la quinta plaza. “Muchísimo mejor”, reconoció. El holandés se quedó a medio segundo de Russell, tercera sesión de tres que lidera Mercedes, pero en la pelea por ese top-5 que componen cuatro coches y en el que hay sitio para siete u ocho pilotos. Piastri fue segundo por delante de Sainz (0.348), que luchará por la pole y la victoria este fin de semana igual que Ferrari lo hace por el Mundial de constructores.
Las bajas temperaturas dieron un respiro, aunque siguen siendo mínimas en comparación con cualquier otro circuito del calendario. El asfalto marcó 16,3ºC durante el entrenamiento. Ese contexto debía beneficiar a los equipos que tradicionalmente sobrecalientan los neumáticos. Ha devuelto a la zona delantera a Mercedes, que ha sufrido con ese apartado esta temporada. Pero no ha hecho milagros con Aston Martin, que a pesar de cocinar las gomas en carrera no ha sido capaz de presentar un monoplaza competitivo para sus pilotos. Alonso fue 15º en el entrenamiento y la Q3 es otra vez una quimera para el español.
Stroll provocó una bandera roja a cinco minutos del final por una aparente avería en el monoplaza. Apenas quedó tiempo para relanzar. Las tres prácticas de Las Vegas dejan una parrilla razonablemente igualada. McLaren tiene más que Ferrari y mucho más que Red Bull, los dos pilotos de Woking estuvieron cómodos en el top-4 de la tabla de tiempos. Pero Max ha conseguido no descolgarse antes de la clasificación y Sainz y Leclerc (12º, marcaba récords antes de la bandera roja) quieren hacer valer el favoritismo de Ferrari en un circuito propicio.