Sainz: “Me da mucha rabia, pero debí ser más conservador”
El piloto de Williams analiza con AS su 2025, coronado con el podio de Bakú. “Me lo tomaba a broma, pero quiero pensar que el ‘efecto Sainz’ es real”.


Carlos Sainz (Madrid, 31 años) se sienta con AS en Qatar y analiza una temporada que no se parece tanto a las suyas en el pasado, pero que concluye coronada por los mejores resultados de 2025 para Williams: el podio de Bakú y el tercer puesto en el esprint de Austin. Faltó regularidad, lo que siempre fue seña de identidad para el español, pero se subió a un Williams noveno en 2024 y lo ha hecho progresar hasta el quinto puesto en el Mundial de constructores. Sobre ese proceso, la autocrítica y la comparación con Hamilton y Ferrari, habla en esta entrevista.
—¿Qué le ha parecido su temporada?
—Ha sido una temporada muy rara. He tenido seis meses de adaptación que quizás ha sido de los coches a los que más rápido me he adaptado, me he sentido cómodo desde el primer momento. Se demuestra en las primeras carreras o el test de Bahréin, donde fui muy rápido. En las clasificaciones de Ímola o Miami ya estaba haciendo top-5 con el Williams. Si alguien dice cuando firmé en el verano de 2024 que sería primero en la Q2 de Ímola o 5º en la Q3 de Miami, te esperas que me vaya bien en Williams. El problema es que por una razón u otra, los resultados el domingo no llegaban. Es muy raro, cada vez era una razón diferente y no conseguía entender por qué me pasaban tantas cosas. Pero manteniendo la calma y trabajando duro, los resultados llegaron en la segunda mitad.
—¿En qué parte de todo este proceso hace autocrítica?
—En esas diez primeras carreras hubo errores de todos, incluidos los míos. Yo siempre levanté la mano cuando creí que fue así. Si fueron factores externos o errores de ciertos departamentos del equipo, también lo dije. En esta segunda mitad ha seguido habiendo errores, también míos. Errores de carrera, quizás de no elegir bien las batallas o no tener en cuenta contra quién luchaba. He tenido tres o cuatro accidentes siempre con pilotos rookies que debí juzgar mejor que eran rookies y darles medio metro más. Y, sigo siendo autocrítico, ha habido muchas ocasiones este año en las que se podía asegurar un octavo, séptimo o noveno puesto como en Monza, Austin y otras carreras. A mí los octavos puestos no es que me den igual, pero me enorgullezco menos por dar al equipo cuatro o seis puntos y no le veo tanto valor, porque he ganado carreras y he hecho podios. Pero he tenido que readaptar mi mente para recordarme que esos cuatro puntos para Williams sí son muy valiosos en el campeonato de constructores. Hago autocrítica porque podía haber asegurado muchos más puntos de los que tengo y no aseguré por querer ganar una o dos posiciones más.
—¿Se ha llegado a plantear volverse un piloto más conservador en esta zona de la parrilla?
—Sí, está claro. En esta zona de la parrilla lo tienes que ser. Cuando corría en Toro Rosso, Renault o McLaren lo era.
—Tenía rachas muy largas de carreras terminadas y en los puntos…
—Tenía rachas largas. Es una reflexión que he hecho a final de año, lo he pensado, porque yo antes era un piloto que no me bajaba de los puntos en carreras consecutivas. ¿Qué hacía diferente? En esa época el octavo era mi victoria. Ahora que he conseguido podios o victorias, quizás no pienso con claridad que un sexto puesto o un octavo siguen siendo una minivictoria en Williams. Hay que escoger mejor las batallas, en el sentido de los rookies, y también hay que pensar en que en las condiciones que he corrido este año debía haber sido más conservador. Y me da mucha rabia decirlo, porque nunca he sido conservador desde que estoy delante. Pero podía tener cien puntos esta temporada si lo hubiese sido.

“No veía tanto valor a un octavo puesto después de ganar o subir al podio, pero para Williams son puntos muy valiosos”
Carlos Sainz
—Ha habido otros pilotos ganadores que han llegado a un equipo más pequeño y les ha costado mucho estar al nivel. Pienso en Ricciardo con McLaren. ¿Le preocupaba que le pudiera suceder algo así?
—Siempre tienes dudas y preocupaciones en una temporada nueva. Pero si hay velocidad no hay dudas. Yo dije desde el principio que era rápido. Otros pilotos puede que nunca fueran rápidos con esos coches, pero yo sabía que los resultados iban a llegar en cuanto pudiera enderezar un par de cosas. Por eso el podio de Bakú para mí fue tan importante, por dárselo a Williams por primera vez en tantos años, y también porque yo tenía una narrativa desde el inicio del año, decía que iba rápido y que nos pasaría algo bueno cuando nos dejasen de suceder algunas cosas. Con ese podio me recordé a mí mismo que en cuanto hay un coche para luchar por un podio, lo hago. Lo consigo. Lo hice también en Austin (en el esprint), eso me tranquilizó porque pude demostrar tanto a mi equipo como a los medios como a mí mismo que iba a ser así.
—Es simplista decir que Ferrari va peor desde que se ha marchado y que Williams va mejor desde que ha llegado, porque la F1 es un deporte muy complejo. Pero es una tendencia clara que ha llegado a equipos y esos equipos se han consolidado o han progresado. ¿Eso es otra cualidad importante como piloto?
—No conozco los problemas que está teniendo Ferrari este año, no sé si yo personalmente podía haber tenido un efecto en que no sucediesen. Sin conocimiento, no puedo opinar de esa estadística, de que si me voy el equipo va peor. Pero sí puedo hablar de la otra estadística. Me tomaba un poco a broma eso del ‘efecto Carlos Sainz’, hubo una especie de movimiento en redes de cuando fui a McLaren, que la gente decía que cada vez que Sainz va a un equipo, el equipo mejora. Es verdad que en Williams este año se confirma esta estadística… puede ser coincidencia, pero quiero pensar que algo de efecto tendré. Hay pilotos con cualidades muy distintas y, si soy sincero, me gusta involucrarme mucho en el desarrollo del coche y sacar el máximo rendimiento de todas las personas del equipo. Cada piloto tiene sus cualidades, y creo que una de las mías es intentar mejorar el equipo al que voy.

“Me pongo del lado de Hamilton y es muy, muy difícil llegar a un equipo y destacar, el nivel es muy alto”
Carlos Sainz
—Ferrari le dejó marchar para fichar al piloto más exitoso de la historia, pero no ha destacado allí todavía. ¿Eso, de manera indirecta, le hace a usted quedar bien?
—No. Lo que me hace quedar bien a mí depende más de lo que hago en el equipo al que voy, pero no de lo que pasa en un equipo en el que ya no estoy. A Ferrari siempre le he deseado lo mejor. Aunque Hamilton estuviese teniendo un buen año, mientras yo lo estuviera teniendo en Williams lo que pase al otro lado para mí es irrelevante. Sé que a la gente le gusta ese salseo, sobre todo si hablamos de un siete veces campeón del mundo, pero el nivel en la F1 es muy alto. Leclerc está a un nivel increíble; Albon, Norris, Verstappen o Russell están a un nivel altísimo. Me pongo del lado de Lewis (Hamilton) y es muy difícil llegar a un equipo y destacar. Más en tu primer año, cuando tu compañero conoce tan bien el coche y el equipo. Es muy, muy difícil. No puedo explicar lo difícil que es.
—¿Cómo de pendiente va a estar del mercado en 2026?
—Al principio poco, no tengo otro objetivo que hacer un buen 2026 con Williams. Luego hay que ver quién ha acertado con la nueva reglamentación y quién no. De todos modos, mi situación ideal pasa por que el Williams sea un buen coche y yo pueda hacer un proyecto aquí. Esto está claro al cien por cien, he encontrado un buen sitio para mi futuro y nada me haría más ilusión y orgulloso que ser parte del equipo que llevó a Williams a volver a ganar. Mi objetivo es que Williams haga un buen coche y eso me haga confiar y quedarme.
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—¿Se siente hoy más cerca de ser campeón que cuando estaba en Ferrari?
—Este año ha sido un paso atrás hacia el Mundial. Pero al final de este año, vuelvo a ver la posibilidad de poder ganar el Mundial en el futuro. A principios del año tenía las dudas, pero ahora he visto un equipo que me puede ayudar a conseguirlo en el futuro.






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