Sainz aguanta el arreón pero el Aston Martin no destaca
Verstappen logra la pole en Austria por delante de Leclerc y Carlos. Séptimo discreto de Alonso en una pista ‘favorable’ y superado también por un McLaren.
Parrilla nublada, como el cielo de Spielberg. Porque Sainz amenazó con varios vueltones antes de quedarse tercero por detrás de Verstappen y Leclerc, que está muy bien aunque puede estar todavía mejor. Y porque Alonso se encontró un Aston Martin más limitado de lo esperado y partirá séptimo este domingo por detrás de Stroll. Las diferencias fueron relativamente pequeñas, medio segundo entre el primero y Fernando, porque la vuelta a Red Bull Ring es muy corta. En cualquier caso, las expectativas alrededor de Aston Martin y de Mercedes eran otras al llegar a este GP de Austria, apuntaban más al podio que a salir por detrás de un McLaren, por ejemplo. Tienen un sábado al esprint para enmendarlo, y también la carrera principal.
La clasificación fue tensa porque los comisarios eliminaron decenas de vueltas a los pilotos que se excedieron de los límites de pista en las curvas uno, cuatro, nueve y diez. “Es muy difícil juzgar en una línea tan fina con estos coches tan pesados y anchos”, explicó el poleman Verstappen. A él le hicieron sudar con un par de vueltas borradas, pero peor le fue a Pérez, que se quedó sin tiempo en la Q2 y partirá 15º en otra de esas clasificaciones incomprensibles por su parte, como en Mónaco, Barcelona y Montreal. Le borraron hasta tres intentos en momentos clave. Póker de desastres, póker de poles consecutivas de Max.
Ferrari amenazó con quitársela. Sainz fue muy rápido en Q1 y Q2, con un pequeño incidente: sus ingenieros le sacaron a última hora para mejorar su propia vuelta (era 2º) y gastar un juego de neumáticos extra en caso de que le borrasen su crono, algo que no sucedería. En la Fórmula 1, que tira de ciencia y precisión milimétrica, a veces algunos optan por apuntar a una mosca con un cañón, por lo que pueda pasar. El ‘set’ de neumáticos perdidos debió despistar a Carlos: en la Q3 perdió ese punto y se quedó tercero a 0.190 del neerlandés. Y por primera vez en todo el día, le superó Leclerc (2º, 0.048). Las cosas de Ferrari.
Volaron los McLaren, Norris se clasificó cuarto con un paquete de evoluciones que ha reforzado de verdad a este MCL60, al menos a una vuelta. Lando superó a Hamilton (5º) y a los dos Aston Martin. El séptimo de Alonso es el segundo peor puesto en parrilla este año, solo tras el octavo de Barcelona, y allí el domingo no arregló las jornadas previas. Al menos, en Spielberg hay oportunidades de sobra: este sábado (12:00 horas) se celebra la clasificación del esprint y por la tarde, esa carrera corta pero intensa (16:30) que regala más espectáculo que puntos. Y el domingo, algo se podrá hacer desde un séptimo puesto en parrilla, o un tercero. Ganar a Verstappen no. Eso son palabras mayores.