Mercedes se encapricha con Verstappen y Horner estalla
“Max tomará la decisión, el coche más rápido no es la única razón para estar en un sitio”, lanza Wolff. “El problema de Toto no son los pilotos”, dice Chris.
El mercado no solo no se enfría, sino que se calienta aún más. O lo calienta Toto Wolff, que todavía no renuncia a que Verstappen sea el sustituto de Hamilton en Mercedes a partir de 2025. A pesar de que el neerlandés tiene contrato hasta 2028 con Red Bull, y de que la aparente crisis entre Christian Horner, Helmut Marko y Jos Verstappen (que no pisa un circuito desde el cruce de reproches en Bahréin) pasa ahora por una tregua pública, el jefe de Mercedes sigue enturbiando el caso con declaraciones ambiguas que sí dejan claro el interés de la firma alemana por convencer al tres veces campeón. Juega la carta de que en 2026 cambia la normativa de motores y hay dudas sobre la capacidad de Red Bull para fabricar su primera unidad de potencia.
Toto habló después de la carrera en Shanghái, que no le fue precisamente bien a su escudería (Russell fue 6º y Hamilton, 9º) en comparación con el doblete de Red Bull. “No creo que nadie pueda vender nada a Max, Jos (Verstappen) y Raymond (Vermeulen, mánager del piloto). No va a cambiar nada. Es cuestión de dónde ven que el futuro es mejor para ellos considerando muchos factores. Estamos en una muy buena posición para 2026 y somos ambiciosos con los objetivos que nos hemos marcado para las baterías y el combustible. Creo que podemos construir un chasis decente y estamos en una buena posición, pero quién sabe”, dijo el dirigente austriaco.
“Hay muchos factores que tienen un papel para que un piloto se una. Si se mira desde el punto de vista más racional, el coche más rápido está en manos del piloto más rápido. Pero no creo que esa sea la única razón para estar en un sitio. Puede serlo para una mentalidad simple, pero puede haber más matices. Intentaremos convencer pero no creo que sea cuestión de convencer, Max tomará la decisión que sea la mejor para él, algunos factores tendrán una influencia, pero él es quien activará lo que suceda, todos están esperando para ver qué hace”, opina Wolff. Entre los intangibles que pueden influir, Verstappen ya no será el mejor pagado de la parrilla en Red Bull (unos 45 millones de euros anuales) por el astronómico contrato de Hamilton en Ferrari.
“¿Cuándo ha dicho eso Toto?”
Horner recibía a la Prensa minutos después con cara de extrañeza. “¿Cuándo ha dicho eso Toto? Voy a pensarme bien mi respuesta”, inició. “¿Habéis hablado con Max? Cuando hablas con Max, no es cuestión de papeles firmados. Sabemos que tiene un contrato hasta 2028, pero es cuestión de cómo se siente en el equipo y a qué nivel está rindiendo. No creo que el problema de Toto sean sus pilotos. Tiene otros elementos en los que se debería centrar antes de pensar en pilotos que no están disponibles. No sé cuántas veces tengo que decirlo, lo he dicho ya muchas. A veces esto está hecho para generar ruido”, dijo el ‘team principal’ de Red Bull. Y en segunda fila, Sainz espera para ver cómo se desarrolla el mercado sin cerrar puertas a las dos opciones más competitivas que ofrece. Que, curiosamente, son Red Bull y Mercedes.