Gasly fue al hospital por el ‘porpoising’
El rebote de los coches de 2022 no solo ha afectado al rendimiento de muchos equipos, sino también a la salud de los pilotos.
Los rebotes generados por el ‘porpoising’ han sido uno de los temas más polémicos de esta nueva generación de monoplazas en la Fórmula 1. A raiz del efecto suelo, este fenómeno aerodinámico ha afectado al rendimiento de los equipos en la primera parte del campeonato, el equipo Mercedes el que más. La Federación Internacional confirmó esta semana, que a partir de Bélgica medirán el rebote y pondrán límites a este balanceo en los monoplazas. También, exigirán, a partir del año que viene, que los equipos suban 15 milímetros el fondo plano para evitar totalmente el porpoising.
Sin embargo, también ha afectado al estado físico de los pilotos. Pierre Gasly, piloto de Alfa Tauri, ha comentado a GPFans.com que tuvo que acudir al hospital para hacer un chequeo tras sufrir dolores de espalda en la carrera de Bakú. “Fue muy duro para mi espalda, hasta el punto de que después del fin de semana, tuve que hacerme una resonancia magnética para comprobar que todo estaba en orden con las vértebras”, comentó el francés. Muchos equipos para ganar rendimiento, bajaron al máximo sus coches, aunque los pilotos tuvieron que pagar en su cuerpo los costes del porpoising.
Otros pilotos que fueron muy críticos con el rebote fueron Daniel Ricciardo o el propio Lewis Hamilton y valorarán positivamente el cambio de reglas por parte de la FIA. El británico incluso tuvo que ser ayudado para salir del Mercedes tras la carrera de Bakú. “Seré sincero, parece horrible y se siente 100 veces peor. Definitivamente tengo que recuperarme y trabajar duro con el equipo antes de Montreal para superar este obstáculo”, decía el heptacampeón por Twitter tras la carrera de Azerbaiyán. La Fórmula 1 ha llegado a un consenso, aunque en las últimas carreras, todos los equipos ya habían minimizado al máximo esta circunstancia.