Ferrari se queda a medias
La escudería italiana confirma que han encontrado una solución “a corto plazo” para el problema hidráulico de Sainz, pero todavía deben resolver el del coche de Leclerc.
Se dejó dicho en Bahréin que la temporada era muy larga y todo podía cambiar de un momento a otro, después de presenciar el doble cero inesperado que protagonizó Red Bull en la cita inaugural del curso. Los problemas de fiabilidad amenazaban con complicarle la defensa del título a la fábrica de Milton Keynes y sin embargo, todo ha cambiado siete grandes premios después. Verstappen lidera la tabla y en esta ocasión, ha sido Ferrari en la cita de Bakú quien ha experimentado en primera persona un doble abandono demasiado inoportuno debido a la organización del calendario.
Desde Azerbaiyán, la F1 se ha desplazado de manera inminente hasta Canadá para seguir cumpliendo con sus compromisos, lo que no da margen para un análisis certero de qué sucedió en la octava prueba de la temporada con los dos F1-75 que se averiaron durante las primeras 20 vueltas de gran premio en el trazado urbano. Sainz fue el primero en ver la cruz de la moneda con un problema hidráulico y pocas vueltas después, Leclerc corrió la misma suerte aunque en el caso del monegasco, la avería llegó a través de un motor que dijo basta.
Después del batacazo y todavía en Bakú, Mattia Binotto se negó a “dramatizar” la situación a pesar de un doble cero que les complica las cosas en su lucha personal frente a Red Bull. “Ahora es más difícil pero puede volver a cambiar”, decía el ingeniero suizo al respecto, antes de iniciar una investigación que deja las cosas a medias en Maranello. Ferrari se enfrentaba a dos averías diferentes y pese haber identificado con bastante rapidez qué sucedió en el monoplaza de Sainz, la solución llega “a corto plazo para Canadá, mientras se continúa trabajando para encontrar soluciones a medio y largo plazo”.
El comunicado distribuido por la Scuderia augura un fin de semana sin problemas aparentes para Sainz en Montreal, mientras que al otro lado del garaje no se descartan penalizaciones ante la posibilidad de montar un nuevo motor en el F1-75 de Leclerc. El motor averiado del monegasco “llega a la fábrica (en el día de hoy), y se completará una primera evaluación por la noche”, según informan los de Maranello. El objetivo es intentar recuperar las máximas piezas posibles para el stock disponible para el resto de la campaña, aunque eso no aparca la posibilidad de montar esa nueva unidad de potencia que puede seguir poniendo en apuros a Ferrari. Porque aunque no sea “obligatorio ganar en Canadá”, sí puede ser muy importante, sobre todo, a final de temporada...