NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

FÓRMULA 1

El tirano llega a Monza

Un Verstappen imbatible encara la recta final del curso con el título sentenciado. Red Bull amenaza con un paseo casa de Ferrari.

El tirano llega a Monza
DAN MULLAN

Verstappen tiene 102 puntos de ventaja sobre Leclerc y Pérez, el Mundial ya está decidido con siete grandes premios aún por delante y si la diferencia no decrece, es factible que el neerlandés se proclame bicampeón del mundo en Suzuka (9 de octubre) o Austin (23 de octubre), a más tardar. Es curioso, porque el campeonato empezó igualado y con superioridad de Ferrari sobre Red Bull. Pero las averías recurrentes del F1-75, los errores varios en la estrategia, el par de fallos de Leclerc y las carreras que necesitó Sainz para extraer todo el potencial del monoplaza han desembocado en un año de tiranía inquebrantable de ‘Súper Max’ que pocos hubieran imaginado hace unos meses. Son diez victorias para el neerlandés, las últimas cuatro consecutivas. Checo, su compañero, está en la pelea para ser el subcampeón de 2022 empatado con Charles.

Ferrari, gane o pierda, es siempre protagonista. Ahora regresan a un GP de Italia a pleno rendimiento, con los tifosi abarrotando la grada después de la pandemia. Contaron con un coche ganador durante buena parte de la temporada (Leclerc en Bahréin, Australia y Austria; Sainz en Gran Bretaña) pero los últimos tres grandes premios han ofrecido una imagen desdibujada del Cavallino Rampante frente al Red Bull, imbatible en las rectas; o incluso un Mercedes que en carrera cuida mejor los neumáticos y no acusa tanto la degradación, aunque todavía no hayan extraído todo el potencial del W13 a una vuelta.

Si el patrón de Spa-Francorchamps se repite en Monza, algo que es habitual, el RB18 es insultantemente favorito en Maranello. El sábado de Bélgica, Verstappen aventajó en seis décimas a Sainz en su vuelta de clasificación. Hay varias teorías alrededor de la extrema superioridad de Red Bull acentuada en los últimos grandes premios. Primero se dijo que habían aligerado el chasis, algo que no era del todo cierto pero tampoco es del todo mentira: hay una nueva especificación de chasis en camino que todavía no se ha usado en carrera. La mejoría sí puede estar relacionada con la unidad de potencia que estrenó Max en Spa (y que aún no lleva Pérez) con evoluciones en el sistema híbrido. En cualquier caso, el Red Bull vuela en las rectas porque genera muy poco ‘drag’, funciona a la perfección con poca carga aerodinámica en comparación con sus rivales. Era más pesado que el Ferrari al inicio de la campaña, así que conforme han aligerado, se han marchado.

Las fortalezas del coche energético están definidas, pero los puntos débiles del Ferrari aún no han quedado claros. Rindieron a un nivel muy alto antes del parón veraniego en circuitos variados como Silverstone, Spielberg y Paul Ricard. De repente, desaparecieron del mapa en Hungaroring, con un ritmo de carrera muy pobre con cualquier compuesto de Pirelli; y sucedió algo similar tanto en Spa como en Zandvoort. Sin embargo, pueden luchar por la pole casi en todos los escenarios, algo que no ha conseguido todavía Mercedes. Sería una sorpresa que ahora aspirasen a una victoria en Monza como la que logró por última vez Leclerc en 2019. Y es que Verstappen, después de protagonizar contra Hamilton uno de los Mundiales más disputados de la historia del deporte, en la última vuelta de la última carrera; va directo a conquistar el segundo por la vía rápida.