Calor para los motores
Ferrari ha sufrido con la fiabilidad en las carreras recientes y las temperaturas del GP de Francia serán elevadas. Sainz puede salir último. Alpine corre en casa.
Alpine llega a la carrera de casa, y todo indica que será la última. No por la escudería de Alonso y Ocon, que goza de buena salud comercial y deportiva, sino por el GP de Francia: no está en el borrador del calendario de 2023 ni tendrá sitio con la entrada de Las Vegas y Qatar, el teórico regreso de China y la posible Sudáfrica. Sobran dos, y al juego de las sillas llegan a la última fase, sin haber renovado, Paul Ricard, Spa y Mónaco. El Principado tiene ventaja. El campeonato pretende implantar un sistema de rotación a medio plazo para que los grandes premios tradicionales no desaparezcan del todo mientras se exploran otras opciones más exóticas.
La firma de Enstone, de carácter inglés pero bajo bandera tricolor, tiene a estas alturas de la temporada el cuarto coche por merecimientos propios, y eso que han desperdiciado cerca de 50 puntos con averías y algún otro inconveniente en el coche ‘14′, el de Alonso. La continuidad de Fernando a partir de 2023 es un tema candente alrededor de Alpine. No hay desencuentros ni nada de lo que sugiere el habitual ruido mediático, pero el bicampeón español aprieta porque espera ambición y no conformismo ante un equipo que ocupa su mejor posición en el Mundial desde 2018, pero que no lucha por victorias, podios y poles; el objetivo de Alonso. Un fin de semana limpio de viernes a domingo, algo poco habitual para él en 2022, sería un buen punto de partida para que esa renovación empiece a concretarse.
Asterisco
Delante, Ferrari recupera las mejores sensaciones de la temporada frente a un Red Bull cada vez menos invencible. La Scuderia ha ganado los últimos dos grandes premios; Gran Bretaña con Sainz y Austria con Leclerc. Es cierto que en ambos casos exhibieron también su debilidad, porque no supieron consolidar dos dobletes factibles a escasas vueltas del final por fallo estratégico en Silverstone y mecánico en Spielberg. Pero el rendimiento estaba ahí, las escasas mejoras funcionan y el F1-75, cada vez menos destacado los sábados, cuida mejor las gomas el domingo. Charles se sitúa a 34 puntos de Verstappen, líder del Mundial, y Sainz a 75.
El abandono con incendio de Red Bull Ring es una losa para el madrileño, por los 18 puntos que dejó de sumar y porque previsiblemente tendrá que montar una unidad de potencia nueva este fin de semana y salir desde el fondo de la parrilla. Remontada o nada. No es un secreto que el motor de Ferrari ha sufrido las temperaturas veraniegas: Leclerc rompió en Barcelona y Bakú y el coche de Carlos salió ardiendo hace dos semanas. Para este fin de semana, en Le Castellet, pronostican mínimas de 23ºC y máximas de 33ºC sobre un asfalto que fácilmente rondará los 50ºC.