Aston Martin no se rinde
Norris y Piastri lideran en Silverstone. Alonso, 11º. Estrenó un alerón delantero, pero las evoluciones de esperadas llegarán en Hungría. Sainz, octavo.
A un lado de la rotonda de Silverstone, Norris y Piastri golpean primero y convierten a McLaren en el orgullo patrio del GP de Gran Bretaña. La superioridad es importante para ser solo viernes, más de cuatro décimas con respecto al tercero, Pérez (0.434). Que ni siquiera fue Verstappen (7º, 0.684), en el enésimo ejemplo de que Red Bull ya no tiene la renta de la que disfrutó en los últimos dos años. Y cuando crecen los rivales, aumentan también los problemas. Al otro lado de la rotonda, en el imponente campus de Aston Martin, trabajan a fondo para dar la vuelta a una temporada que se tuerce por la falta de mejoras, que no de piezas nuevas. Este fin de semana, Alonso y Stroll estrenaron un alerón delantero nuevo que cambia poco con respecto a su predecesor (se refuerza la fiabilidad). Y para Hungría, dentro de dos semanas, se prevé un paquete aerodinámico con suelo nuevo que pueda servir de base para un AMR24 más estable.
AS visitó las vanguardistas instalaciones de Aston Martin. El primer edificio que sirve de oficina para el equipo de diseño está operativo desde el año pasado. Ahora trabajan en el segundo (simulador) y el tercero, con un túnel de viento que funcionará a partir de enero de 2025 y dará servicio al coche de 2026. Allí también está la maquinaria con la que fabricarán su primera caja de cambios, que se debe ensamblar a la perfección con la unidad de potencia de Honda. El despliegue es imponente. La simplicidad también. En esa casa no faltan recursos. Los ocho podios y el cuarto puesto de Fernando en 2023 fueron un premio, pero es evidente que los resultados no terminan de llegar en un 2024 con altibajos. Tuvieron un gran coche a una vuelta en el primer cuarto de la campaña pero se han desdibujado desde mayo.
Tom McCullough, jefe de prestaciones, se explica: “Hay características en el balance del coche que lo hacen más difícil de ajustar y conducir. Es todo relativo, este coche es mucho mejor en cuanto a velocidad que el del año pasado, tiene más carga aerodinámica y otras características. Pero luego hay altibajos en los resultados”. Para el GP de Hungría anticipa evoluciones relevantes: “Será un cambio razonable en algunas filosofías del coche. Aunque siempre es relativo. El coche no va a pasar de donde está ahora a delante de la parrilla. Es cuestión de ver si vamos por la buena dirección y por cuánto. Las piezas principales están previstas para Hungría, aunque también habrá piezas específicas (de baja carga aerodinámica) para Spa”.
En ese contexto, se apreció una leve mejoría del Aston en la primera sesión de entrenamientos (Stroll fue 2º, Alonso 6º) que se matizó por la tarde (Stroll, 9º; y Fernando, 11º). Si hay brotes verdes, son muy incipientes aún. Si bien en circuitos de curva rápida como Barcelona y Austria estaban detrás de rivales de la zona media y ahora sí se asoman como quinta fuerza por detrás de los cuatro grandes, que cada vez son más fuertes. Delante, solo Hulkenberg (4º, 0.441) alteró el orden establecido en una pista ventosa y difícil, con el asfalto más bien templado. Llegó a llover a lfinal de la sesión y puede volver a suceder el domingo. Sainz fue octavo (0.700), a una décima de Leclerc y justo por detrás de Verstappen. Habrá pistas McLaren, hay pistas Red Bull. Pero da la sensación de que ya no quedan casi circuitos para este Ferrari.