Alonso no termina de despegar

Los test pasan muy rápido, a Alonso solo le queda una tarde al volante y el Aston Martin AMR25 no termina de despegar. Quizás se han tomado en serio lo de recoger datos, afianzar la correlación y mantener un perfil bajo, pero en día y medio de entrenamientos se suele dejar entrever algo. Algunos coches rebajan sus tiempos con facilidad o están entre los mejores sin intentarlo. Otros van cortos de vueltas y no terminan de destacar u ofrecer detalles brillantes. Entre estos últimos está el Aston. Alonso hizo un par de intentos con el neumático C3 a estrenar (teórico blando en Bahréin) que le hicieron progresar algo, pero poco.

Se quedó con el quinto tiempo de la mañana a 1.3 segundos del Ferrari de Hamilton; a un segundo de Russell con el Mercedes y seis décimas por detrás del Williams de Sainz, que además montó el compuesto C2, más duro. La carga de combustible la saben ellos (no era escasa, porque el español hizo tandas cortas con varias vueltas rápidas, no una sola) y la potencia de los mapas de motor también. Pero la cámara ‘on-board’ no muestra una vuelta placentera para Fernando, hay correcciones en el volante y algo de subviraje en las frenadas fuertes. Y aunque el objetivo de los test nunca es causar una buena impresión de puertas hacia fuera, sino hacer un buen trabajo útil para la fábrica y los pilotos, un buen coche siempre sale a flote.

Andy Cowell, team principal de Aston Martin, trató de dar explicaciones a la falta de rodaje al comienzo de la segunda jornada: “Fue el primer día de test para aprender del coche, tuvimos algunos pequeños problemas por la mañana y otros por la tarde pero simplemente estamos aprendiendo del paquete aerodinámico y las dinámicas del coche. Son solo tres días muy condensados y queremos hacer muchas pruebas para entender cómo funcionan las evoluciones”.

Hamilton lidera, Sainz sigue delante

En la liga de los grandes, Hamilton rodó en 1:29.379 con el neumático C3, una vuelta que le otorgado la segunda posición en la parrilla del GP de Bahréin 2024. Ya son cronos seriamente competitivos en un entorno hostil, con mucho viento y la pista a baja temperatura (18 grados centígrados a media mañana). De hecho, llegó a llover durante la mañana y los monoplazas rodaron menos de lo previsto. Algunos se centraron en las tandas largas descaradamente, como Haas. Red Bull tuvo problemas de motor con Lawson. Y Carlos Sainz siguió, paso a paso, demostrando que quizás Williams llegue a 2025 en mejor condición de la prevista. Su tercer mejor tiempo, a siete décimas del Ferrari, lo marcó con un neumático C2. Le quedan cuatro horas de pruebas para seguir demostrando hasta dónde puede llegar con el FW47.

Clasificación de los test de Bahréin (día 2, mañana)