“Alonso lucharía por el título en Red Bull o Ferrari”

Si comenzamos a hacer cuentas, el contador de Fernando Alonso se detiene en dos Mundiales de F1. Sin embargo, esta cifra siempre ha sido inferior para muchas voces autorizadas del automovilismo en relación con los números que debería ostentar el asturiano en el Gran Circo. Las actuaciones del bicampeón con monoplazas más discretos que le permitieron llevar a Renault hasta lo más alto de la categoría, convencieron a escuderías como McLaren o la mítica Ferrari, siendo la de Maranello una experiencia reservada para los grandes prodigios del volante, entre los que los italianos consideraron al español.

La carrera de Fernando siempre fue exitosa, de hecho tuvo privilegios a la altura de su talento, que sin embargo no se reflejaron en un palmarés donde las circunstancias de los equipos por los que pasó tuvieron mucho que ver. El asturiano hace tiempo que no se ha puesto al volante de un monoplaza ganador con garantías. Cuando abandonó Renault no dejó de sumar unas victorias (ha alcanzado las 32 en F1), que llegaron por méritos propios más que por el rendimiento de su monoplaza. Y eso quiere decir que el piloto, siempre fue mejor que la máquina con la que salía a competir.

¿Qué pasaría si ahora le dieran el volante de Red Bull o Ferrari a Fernando? “Que ganaría el Mundial, estoy 100% seguro”, reconoció Gerhard Berger, jefe del DTM y expiloto de F1, en Sport 1. El austriaco ha sido el último en unirse a una lista interminable de halagos hacia el bicampeón, a quien considera “un piloto brillante” para el que las coronas de 2005 y 2006 son insuficientes. Es cierto que Alonso tuvo más oportunidades para seguir sumando títulos, de hecho tiene en su poder tres subcampeonatos (2010, 2012 y 2013), todos ellos con Ferrari, en una época de dominio absoluto por parte de los de Milton Keynes donde un coche rojo, consiguió hacer sombra a la gran obra de Adrian Newey.

El asturiano se quedó a las puertas, pero demostró que con el mejor monoplaza de la parrilla sería imbatible. A la hegemonía de Red Bull le continuó la de Mercedes con la llegada de la era híbrida. Los de Brackley dominaron el Mundial con ocho títulos de constructores consecutivos y aunque Alonso hubiese sido la mejor baza para la escudería alemana, “después de lo de McLaren, se cerró un poco las puertas, porque si estuviera sentado en un Mercedes, tendría cinco títulos mundiales”, afirma convencido Berger.

La motivación del volver a ganar

Esa cifra ahora mismo se antoja imposible. El A522 que ha desarrollado Alpine para esta temporada vuelve a estar lejos de los monoplazas ganadores, pero su rendimiento actual no conlleva una prolongación en el futuro. Fernando dijo abiertamente que su regreso al ‘Gran Circo’ estaba motivado por la posibilidad de volver a ser campeón y para ello confió en la fábrica de Enstone. Todo apunta a que tanto la escudería como el piloto continuarán de la mano la próxima temporada, a pesar de que la renovación no se ha hecho oficial todavía, y eso es síntoma de que el equipo francés puede presentar un proyecto ganador, con el que Alonso vuelva a lo más alto.