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Fórmula 1 | Se acabó la pesadilla

Una temporada llena de desencuentros

Alonso llegó a McLaren como bicampeón del mundo, pero desde la primera carrera vio que las decisiones de su escudería favorecerían a su compañero Lewis Hamilton

Alonso llegaba a McLaren con la idea de formar un tándem perfecto, pero desde el principio ya vio que no sería así. A pesar de sus doce podios y cuatro triunfos, el año no ha sido lo esperado y la ruptura era un secreto a voces.

GP de Australia. Primera carrera del año y Alonso percibe una situación rara. El tercer puesto de Hamilton es celebrado con mucha más euforia que su segunda plaza.

GP de Bahrain. La noche del viernes al sábado un plafón del techo cae sobre el monoplaza de Alonso. El equipo no cambia el coche y en carrera pierde seis décimas por vuelta frente a su compañero en McLaren.

GP de España. Al acabar, Hamilton mete presión al afirmar que espera recibir en Mónaco la misma ayuda que había tenido Alonso en Barcelona.

GP de Mónaco. Doblete de McLaren que Lewis no acepta de buen grado. Dice que le han obligado a adelantar sus paradas para que ganase Alonso. La FIA abrió una investigación.

GP de Canadá. Hamilton no recibe ninguna reprimenda por lo sucedido en el Principado, le otorgan la mejor táctica de carrera al lograr la pole y deciden compartir todos los datos entre sus pilotos con el consiguiente beneficio para el novato inglés.

GP de EE UU. Nueva vuelta extra en la calificación para Lewis que le permite salir por delante de Alonso. En carrera ocurre lo mismo que en Mónaco, pero a la inversa. Bajan las revoluciones de ambos coches cuando el doblete está asegurado. Alonso calla y Hamilton, el beneficiado por la decisión, también.

GP de Francia. Alonso sufre una extraña avería en un sensor que le imposibilita sacar partido a una tanda de entrenamientos libres. En la calificación se le estropea la caja de cambios y sale décimo en carrera.

GP de Gran Bretaña. Hamilton llega a su casa y recibe menor carga de combustible y la vuelta extra para asegurarse la pole. En carrera, Fernando acaba segundo tras Raikkonen y le queda la espina de que si hubiera salido primero, Kimi no le habría ganado.

GP de Hungría. Lewis no respeta las órdenes de equipo en la calificación y acusa de mentirosos a McLaren y a Alonso. Esto provoca una sanción para el asturiano que le relega desde la pole hasta la sexta plaza.

GP de Bélgica. Alonso ve que algo no va bien en su monoplaza en los entrenamientos libres. Los mecánicos lo revisan y descubren que falta la tapa del aceite del motor. Nadie sabe qué ha podido pasar.

GP de Japón. Fernando tiene problemas con la presión de sus neumáticos en la última tanda de la calificación. De nuevo nadie en el equipo sabe nada.

GP de China. Alonso es más rápido que su compañero, una vez más, en los entrenamientos libres y en las dos primeras series de la calificación pero en la tercera y definitiva incomprensiblemente no. Lewis abandona en carrera y sólo un mecánico acude a celebrar el segundo puesto del asturiano. Dennis declara: "La lucha no era con Ferrari, era con Alonso".

GP de Brasil. La mejor vuelta de Alonso se queda a más de seis décimas de la de su compañero. Es el fin de la temporada y el enfriamiento definitivo de las relaciones entre el asturiano y la escudería británica.