‘Reina Roja’. Una serie con las mismas virtudes y defectos que el libro

‘Reina Roja’ es tanto en su versión televisiva como en la literaria un producto de consumo fácil que reúne muchos de los tópicos del género, pero que siendo entretenida no termina de funcionar tan bien como debiera.

Koldo Serra ha sido quizá demasiado respetuoso con el texto original y eso le ha llevado a caer en las mismas trampas en las que se vio atrapada la novela: situaciones incomprensibles y unos diálogos en ocasiones impostados.

Así que lo que podría haber sido un thriller con tintes oscuros, con psicópata incluido, y en el que se notan las influencias de títulos como ‘El silencio de los corderos’, ‘S7ven’ o el ‘Sherlock’ de Benedict Cumberbatch, termina convirtiéndose en una buddy movie seriada con varios agujeros de guion importantes que le restan tensión a la trama. En más de una ocasión el espectador se pregunta esto por qué o esto simplemente no tiene sentido.

No es un problema de actores ni de química entre ellos, ya que tanto Vicky Luengo como Hovik Keuchkerian coincidieron en ‘Antidisturbios’ y ambos realizaron un trabajo sobresaliente. Aquí tienen que lidiar con dos personajes demasiado exagerados, uno encasillado en el estereotipo de genio con problemas de relaciones sociales y otro al que sus continuos chascarrillos terminan devorando.

La serie es de una factura técnica impecable, con una buena dirección artística, unos planos interesantes y unos efectos especiales que, aunque no son novedosos, sí están a la altura de cualquier producción estadounidense de primer nivel.

La serie no es mala, simplemente es que había mimbres para haber construido algo mejor; se ve fácil, tiene ritmo, la trama es bien simple y el reparto es bueno. Pero algo le ha faltado a la fórmula para que terminara produciéndose una reacción. Probablemente alejarse más de la sombra de Juan Gómez-Jurado.

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¿Merece la pena ver ‘Reina Roja’?