Test Drive Unlimited Solar Crown
Review
Análisis Test Drive Unlimited Solar Crown, a toda velocidad contra la pared
Test Drive Unlimited regresa tras trece años en barbecho con Solar Crown, una propuesta diferente en aspecto pero bastante conservadora en el género.
La original —en su día— franquicia de mundo abierto del género automovilístico está de vuelta gracias a la desarrolladora KT Racing en colaboración con la distribuidora Nacon, también fabricante de periféricos gaming para ordenadores y consolas. Siendo esta última una ya conocida editora en un ya lejano pasado bajo el nombre de BigBen Interactive y KT Racing (Kylotonn) creadora de juegos como V-Rally 4 o WRC 9, las expectativas eran altas.
Ahora bien, ha pasado ya 13 años desde la última entrega Unlimited de la saga y hay varias opciones similares a lo que Test Drive inició, así que si bien había expectación por Solar Crown también encontrábamos reticencias. Por desgracia Solar Crown está muy lejos de ser el videojuego que todos esperábamos.
Hong Kong nos da la bienvenida
Test Drive Unlimited Solar Crown nos propone involucrarnos en una competición algo quinqui maquillada por el futurismo que vimos en aquél legendario spot televisivo de Neutrex Futura. Es decir, jefa del cotarro con vestido y maneras de un par de décadas más allá de la que nos encontramos, edificios imposibles, tecnología inaudita y una presentación en pantalla que puede gustar más o menos.
En esta ocasión dejamos los escenarios verdosos y bonitos de Hawai e Ibiza para trasladar la acción a la concurrida región de Hong Kong, urbe donde más aficionados al motor compiten entre si dentro y fuera de la Solar Crown —la competición que da nombre al título—. Es aquí donde la primera novedad de la nueva entrega nos da la bienvenida con los brazos abiertos; se conduce por la izquierda.
Para muchos jugadores de África, Asia o América —entre otros— no supondrá un problema, de hecho es de agradecer que el videojuego refleje su estilo de conducción, pero para la gran mayoría de europeos y otros países, esto provocará más de un derrame cerebral. Por suerte te acostumbras rápido y en una carrera lo que menos miras es si pisas el carril contrario. Es simplemente una curiosidad y un pequeño desafío al mismo tiempo.
Después de alquilar uno de los vehículos iniciales durante un corto espacio de tiempo, algo habitual en la saga, comenzará el traslado a lo que es la competición, al edificio Solar Crown. Se trata de una mega estructura a modo de torre donde habitan los diferentes jugadores, hay espacio para un pequeño concesionario y el hub del juego online entre otros.
Una vez metidos en el ajo se nos abre un mundo de posibilidades, como elegir nuestro primer coche, participar en las primeras carreras, conocer a los diferentes clanes de Hong Kong, recoger objetos coleccionables, superar pruebas de velocidad en radares y lo habitual en un juego de estos términos. Sobre el primer punto la verdad es que hay mucho donde elegir porque entre el catálogo vemos marcas como Audi, Lamborghini, Koenigsegg, Alpine, Alfa Romeo, Lancia, Jaguar, Ferrari o Citroën entre otros. En total unos 100 vehículos más o menos que no dejarán indiferente a ningún jugador.
Explorando Hong Kong nos hemos dado cuenta que su extensión es bastante más escueta que en entregas anteriores. Circulan por ahí entrevistas en las que sus desarrolladores comentaban que la región estaba replicada en el juego a formato 1:1, pero lo cierto es que tan solo son 78 kilometros cuadrados, nada que ver con los 1545 de la primera entrega o los 2116 km cuadrados de Test Drive Unlimited 2. En esencia, se queda pequeño si lo comparamos con Forza Horizon 5 y similar al de la cuarta entrega de Playground Games.
A todo esto no queremos seguir este análisis sin informar al usuario de que Test Drive Unlimited Solar Crown requiere conexión permanente al videojuego. De hecho no podréis jugar a él si no pasáis por el aro y además os creáis una cuenta en Nacon, la editora del juego. Es lógico ya que se trata de un videojuego multijugador online, pero creemos que en 2024 este San Benito debería de haberse dejado de lado.
Otro juego de conducción más
El esquema jugable es sencillo y para nada novedoso. Llegamos a la competición como una joven promesa, subimos escalafones en el ranking de notoriedad ganando pruebas y desafíos, ganamos Solar Coins para comprar nuevos coches y accesorios y bajo esta guía de estilo completamos todas las tareas que nos proponen. Como veis, no muy diferente a otras propuestas.
Mientras tanto podemos personalizar nuestro avatar con nuevas ropas y accesorios, comprar nuevos coches, desbloquear piezas para personalizar —o tunear— nuestros vehículos, potenciarlos y no mucho más. Eso sí, hay que poner la balanza en favor a KT Racing por las auténticas bellezas que puedes lograr con su editor de personalización, algo parco en opciones a veces pero muy espectacular, dando lugar a diseños increíbles.
Llegados a cierto punto es hora de rendir cuentas a uno de los clanes que dominan Hong Kong, cada uno con su propio estilo de conducción y marcas de vehículos favoritas. Al escoger uno, el resto se vuelven rivales automáticamente por lo que también habrá que competir contra ellos.
Tenemos pruebas de todos los tipos. Las clásicas carreras contra otros jugadores o coches controlados por el juego, cronometradas, de transporte, de velocidad y un par más que no difieren mucho de lo aquí resumido. No hay innovación alguna ni vehículos diferentes a los de cuatro ruedas, algo que añadió frescura a Horizon o The Crew.
La conducción es bastante arcade aunque podemos modificar las ayudas para que el desafío sea más desafiante, valga la redundancia. Hay sensaciones diferentes a los mandos de cada coche pero desde luego nada comparado con las que podría tener un juego de simulación. Aquí hemos venido a hacer el cabra.
Por desgracia la IA del juego no está para nada balanceada y puede darse el caso que el juego te empareje con pilotos controlados por ella misma de un rango superior al tuyo que se comporten como simples novatos o todo lo contrario. Además en muchas de las partidas hemos visto cómo te empujan por detrás constantemente, restándole un poco de magia a la competitividad.
Hasta ahora no hay nada reseñable ni para bien ni para mal en Test Drive Unlimited Solar Crown, solo otro juego de la franquicia donde pilotamos en una nueva región, con un par de características novedosas para la marca y poco más. Por desgracia aquí acaba lo “bueno”, todo lo demás es una película de terror de serie B.
Un desastre al volante
Comenzamos por la cantidad de errores que ha sufrido y sufre a día de hoy el videojuego. Desde servidores cerrados por arreglo de errores, semanas de problemas con el guardado de partidas que impedían avanzar en el videojuego que aún continúan —de ahí la demora de este análisis—, vehículos rivales que desaparecen en nuestros morros, caídas constantes a los pocos minutos de empezar el juego, servidores totalmente vacíos —tan solo hemos podido emparejar con un solo jugador y este se cayó del servidor— con apenas un par de jugadores, pérdidas de sonido, fallos en la conexión de mandos, coches que no funcionan y mucho más.
De hecho, el 30 de septiembre el juego se actualizó con un mega parche y un enorme mantenimiento que dejó a los servidores KO que, en teoría, solucionaba más de 300 errores relacionados con lo mencionado y más características, incluyendo la pésima optimización del videojuego en ordenadores y consolas. Dicho esto, un día después de dichos arreglos, la mayoría de los fallos siguen presentes y los foros de Steam son un hervidero de quejas, sobre todo de usuarios que compraron el acceso anticipado y no han podido disfrutar del juego debidamente.
En este punto no podemos olvidarnos de las críticas que le han llovido a Test Drive Unlimited Solar Crown en su apartado gráfico. Es cierto que no es un juego de última generación pero tampoco es tan paupérrimo como para colocarlo como título de un hardware obsoleto. Tiene detalles como reflejos, agua y modelado muy trabajados que, por supuesto, no llegan a lucir como deberían debido a algunas texturas algo cavernícolas. De hecho los vehículos disponibles, que también han sido criticados por su modelado, lucen espectacular tanto por fuera como por dentro, con un mimo envidiable en este último apartado, llegando incluso a personalizarse con diferentes telas, pieles y accesorios.
Eso sí, las animaciones y modelado de los NPCs del videojuego distan mucho de ser, siquiera, de la anterior generación. Está claro que es un videojuego de conducción pero son simples marionetas sin alma ni cariño que choca bastante con el aspecto general del videojuego. Si además le sumamos la extraña decisión de que nuestro personaje se presente ante el mundo en primera persona negándonos la posibilidad de ver su personalización, el problema se agrava.
Lo que sí es cierto es que con un PC de última generación el título sufre, y mucho, para mantener una tasa de 60fps. Da igual que activemos las ayudas disponibles de AMD y Nvidia o que rebajes detalles de las sombras o texturas, nunca consigue mantenerse estable. Y molesta y mucho. Lo hemos analizado con un i5 10400, RTX 3070i con disco duro M2 y 32GB de memoria RAM e incluso en configuración media no hemos podido llegar a la esperada tasa básica de imágenes por segundo.
La música por otra parte no está nada mal, hay algunas canciones que chocan un poco con el estilo del género pero dentro de lo que cabe incluso se agradece que se atrevan con nuevos géneros. En la banda sonora encontramos nombres como Yuksek, Neon Beach, Luna Wave, Mikey Geiger o Daniel King. Podéis echarle una escucha aquí.
Si bien el videojuego cuenta con unos cuidados textos en castellano no podemos decir lo mismo del doblaje, bastante artificial, algo sobre actuados y, por supuesto, con nula sincronización labial con los personajes del juego. De hecho en este punto hemos notado desfases bastante notorios que rompen muchísimo la inmersión.
Conclusión
Había muchas ganas por volver a tomar el volante en un Test Drive Unlimited pero Solar Crown se empeña en que no lo hagas. El juego ha sufrido graves errores en todos los campos y es prácticamente injugable. Tiene ideas —aún siendo bastante conservador— y puede mejorar con el tiempo pero ha pasado casi un mes desde su lanzamiento y el juego sigue roto. Esperemos que KT Racing eche gasolina a su motor y corrija el título cuanto antes.
Lo mejor
- Máximo detalle en los interiores de los vehículos.
- Banda sonora atrevida y diferente.
Lo peor
- Multitud de problemas en diferentes apartados desde su lanzamiento.
- Apenas encontramos gente en el juego.
- IA bastante deficiente.
- Modelados humanos de hace dos generaciones.
- Técnicamente justo y con serios problemas de rendimiento.
Sigue el canal de MeriStation en Twitter. Tu web de videojuegos y de entretenimiento, para conocer todas las noticias, novedades y última hora sobre el mundo del videojuego, cine, series, manga y anime. Avances, análisis, entrevistas, tráileres, gameplays, podcasts y mucho más. ¡Suscríbete!
Correcto
No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.