Las fuerzas terroristas cada vez son mayores y cualquier pequeño lugar del mundo se está convirtiendo en un escenario para la guerra. Es una nueva era. Terrorist Takedown 2 nos permitirá de nuevo salvaguardar la paz en el mundo.
Ahora nos llega una nueva entrega de esta franquicia. En primer lugar debemos destacar el cambio de nombre, ahora y con un '2' en el título, Terrorist Takedown se desmarca del resto de entregas y nos supone un cambio cualitativo respecto a las anteriores, algo necesario para no caer en el atoramiento general que estaba sufriendo.
¿Qué novedades nos trae este juego? Hemos podido probarlo y podemos vislumbrar un cambio generacional que era de obligado cumplimiento. Ahora bien, las dudas recaen en si las mejoras producidas lograrán aupar esta saga dentro de un género sobreexplotado o la harán caer en el olvido. Como ya sabéis, la guerra nunca termina.
Para combatir al enemigo dispondremos de un equipo a nuestra disposición con el que debemos apoyarnos para acabar con el enemigo. A través de diferentes órdenes podemos pedirles ayuda o instarles a buscar flancos del enemigo. Las armas que tendremos en nuestro poder son bastante variadas y tendremos que hacer uso de sus distintas posibilidades dependiendo de la situación que nos encontremos.
Hay varios puntos destacables dentro de lo que hemos visto: una física aceptable, unas escenas cinematográficas realizadas con el motor del juego que nos sumergen en la trama, una buena calidad de escenarios y buenos efectos de iluminación. Aunque el motor del F.E.A.R. sea antiguo, no podemos quitarle galardones ya que cuenta con unos gráficos más que aceptables en estos tiempos.
Es una pena que un juego con buenas intenciones acabe en el fondo de las estanterías de las tiendas. Esperemos, al menos, que no tenga una duración escasa como el resto de juegos de esta franquicia y que la versión final nos dé alguna sorpresa positiva. Seguro que City Interactive tiene más de un as en la manga, aunque, y como pasa en multitud de títulos, puede que esos ases ya estén pasados de fecha de caducidad.