Metal Gear Solid: The Legacy Collection

Metal es una de las sagas más importantes de la historia de los videojuegos. La obra que acuñó el término Stealth ya en la época de MSX y que se consagró de manera brillante con el primer Metal Gear Solid aparecido en Playstation llega ahora a Playstation 3 con el recopilatorio definitivo. O casi. Cinco juegos, seguramente los más importantes de la franquicia, en un pack que consta de dos Blu-Ray y que viene acompañado de un libro de arte de 100 páginas y un par de novelas digitales que no habían llegado nunca a Europa. Ahora no hay excusa para todos aquellos que a día de hoy, y de manera errónea, no han disfrutado de la gran obra de Hideo Kojima.

Cuando se trata de analizar un recopilatorio, la cosa no es nada fácil. Siempre es complicado valorar las compilaciones que las compañías deciden tirar hacia delante, ya que muchas veces hay ausencias destacadas y en otras se presentan juegos que tienen pocas novedades que puedan llamar la atención. Se puede decir, en todo caso, que esta recopilación es de las más completas que hemos visto hasta la fecha. En su haber hay estos títulos disponibles: Metal Gear Solid (formato descarga digital), Metal Gear Solid 2 HD Edition, Metal Gear Solid 3 HD Edition, Metal Gear Solid: Peace Walker HD edition, Metal Gear Solid 4: Trophy Edition y Metal Gear Solid: Special Missions. Las mejores versiones disponibles de cada una de las entregas en un solo pack a las que se añaden, vía la tercera entrega numerada, las dos versiones originales para MSX de Metal Gear. Todo ello con los citados extras del libro de arte y las novelas gráficas, además de un precio sensiblemente inferior al de un lanzamiento normal y algo mayor que el de los clásicos recopilatorios (oscila entre los 45 y 50 euros según establecimiento).

Su salida este 12 de septiembre supone ofrecer a los jugadores una parte de la historia de los videojuegos imprescindible, con títulos de una calidad superlativa y otros que no bajan del excelente. No en vano, además de tener un 9 y tres 9’5, la compilación añade la obra maestra Metal Gear Solid 4. Una media en definitiva elevadísima que da una idea de la calidad de esta compilación. Destacando, entre otras cosas, que la segunda, tercera y Peace Walker vienen en formato HD con la revisión que se vio hace algún tiempo y que mejoraba elementos como la tasa de framerate, la resolución o algunas texturas. En el caso de la cuarta entrega, la versión es la que lleva integrados trofeos que, dicho sea de paso, son todo un reto y no vienen a ser los habituales de un juego cualquiera. Seguramente la inclusión de Metal Gear Solid y las misiones especiales en formato descargable, no en disco, es uno de los contratiempos que se le puede achacar a la compilación.

Eso sí, es importante remarcar que no están todos. Hay dos títulos que se echan en falta en la compilación –dejando a un lado spin-off y pruebas diversas de otros formatos, como móviles o juegos de cartas- y son el juego de Gameboy Metal Gear Solid: Ghost Babel, a menudo olvidado por muchos a pesar de ser un bombazo para la portátil de Nintendo, y Metal Gear Solid: Portable Ops, que apareció en PSP y que además de ser un gran título tenía un lugar interesante dentro de la cronología de la saga, justo en 1970 entre los acontecimientos de Metal Gear Solid 3 y Peace Walker. Ghost Babel se entiende que no esté por formato, plataforma, etc. Aunque la ausencia de Portable Ops es más discutible, teniendo en cuenta que también salió en una plataforma Sony.

Dicho esto, también es un recopilatorio peligroso en algunos sentidos. Estamos ante una compilación única, pero tiene la pega importante delante de sí que Metal Gear Solid IV no es precisamente un título que se vendiera poco y que la compilación HD que apareció no hace mucho ya traía consigo tres de los juegos que vienen en este The Legacy Collection, por lo que seguramente carecerá de interés a quienes ya adquirieron el Collection HD, que además se ha ofrecido en alguno de sus formatos para los usuarios de PS Plus. Y es que no ha pasado tanto tiempo entre dicha colección y el legado de Kojima que aparece esta semana en las tiendas españolas.

Llegados a este punto, lo mejor es que nos pongamos a desgranar los títulos que forman parte de Metal Gear Solid: The Legacy Collection. En un formato distinto al habitual a la hora de realizar análisis, ya que lo que vamos a hacer es recordar las conclusiones de cada uno de los títulos que se han analizado en Meristation a lo largo de los años. Salvo los dos primeros de MSX, de los que se pueden encontrar referencias en el reportaje que dedicamos a la saga este mismo 2013, los demás han sido valorados con grandes puntuaciones por diversos analistas de la casa. Esto es lo que trae consigo la compilación más completa de la saga Metal Gear Solid: títulos del género del espionaje de una calidad indiscutible.

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Conclusión: Desde que hizo aparición en las tiendas niponas y lo disfrutamos en la redacción, no hemos hecho más que desear que llegara a nuestro país. Sólo hemos tenido que esperar unos meses para que pudieran traducirlo, doblarlo y acondicionarlo al sistema PAL. Impresionante el trabajo el que ha realizado Konami, aunque ha llegado en ciertos momentos a desesperar los múltiples cambios de la fecha de salida. Fabuloso, grandioso, un trabajo como sólo era de esperar de un maestro como Hideo Kojima y su equipo, que no han desaprovechado la oportunidad de hacer revivir a su serie militar de la mejor de las maneras.

Un auténtico imprescindible para nuestra PSX, para la que esperamos más juegos como este. Apunte: Uno de los elementos por los que ha pasado a la historia el juego en nuestro país fue por el gran trabajo de doblaje al castellano todavía recordado a día de hoy y con Alfonso Vallés haciendo un papel de Snake que seguramente no hemos visto igual en ningún otro protagonista virtual. Tanto esta versión como las misiones especiales llegan en formato digital para descargar desde PSN mediante código, siendo los únicos que llegan en este formato dentro de la compilación.

No fuimos pocos los que contemplamos por primera vez a éste "Metal Gear Solid 2" con la boca abierta, conteniendo el aliento, como si el más leve sonido fuera a despertarnos del sueño al que esas imágenes nos estaban transportando irremediablemente. El que aparecía en el televisor de nuestro hogar era Solid Snake, pero había cambiado. Ahora era más sigiloso, si cabe, más atlético, más inteligente... Tenía muchos más recursos a la hora de enfrentarse a los enemigos y, saltaba a la vista, el cambio de plataforma le había sentado a las mil maravillas. Aquella genialidad en movimiento me entusiasmó de tal modo que desde aquél momento supe que me compraría la consola de Sony tan pronto como ésta estuviera a la venta.

Me equivoqué. No pude esperar tanto y al visionar la cinta sobre el título de Kojima un par de veces más, contacté con una tienda on-line y reservé una Playstation 2 para poder disfrutar antes que nadie del que prometía ser otro glorioso título de Konami para una consola de Sony. Lo que yo no sabía entonces era que la obra de Mr. Kojima tardaría aún más de 2 años en salir al mercado. La espera ha sido, sin duda, muy larga pero la pregunta del millón es: ¿ha merecido la pena? Y la respuesta, sin dudarlo un segundo, es un rotundo sí. A pesar de que no esté doblado al castellano ni tenga selector de 60 hz, "Metal Gear Solid 2" es el mejor juego del cada día más extenso catálogo de PS2. Y punto. No hay nada más qué decir. Apunte: llega en su versión HD realizada para la compilación de Playstation 3 y Xbox 360.

Metal Gear Solid 3 Snake Eater es la culminación de la saga en PS2. Hideo Kojima ha exprimido el potencial técnico de PS2 hasta límites que nadie había logrado, creando unos escenarios naturales totalmente vivos y detallados. Seremos testigos de las mejores animaciones faciales que hemos visto hasta ahora, movimientos suaves y fluidos en todos los personajes, efectos de partículas y fuego muy trabajados, texturas bastante más variadas y ricas que en MGS2, un motor gráfico que tiene su apogeo en algunas de las escenas cinemáticas más espectaculares que han pasado por la consola de SONY... en definitiva un prodigio, y uno de los juegos más completos de esta generación técnicamente hablando.

Pero la cosa no se queda ahí: la jugabilidad se ha visto incrementada de forma extraordinaria gracias a varios factores, como el CQC, el camuflaje, tener que comer para sobrevivir, las curas, recoger plantas para hacer medicinas, las peleas con algunos final bosses -otros son bastante sosos-, la IA de los enemigos, las armas, los detalles 'made in Kojima',... pero sobre todo la historia, la fuerza de algunos personajes, el perfecto balance acción/sigilo y la equilibrada acción entre escenarios exteriores/interiores. Snake Eater es, a todas luces, uno de los mejores juegos de esta generación, que puede gustar o no a algunos usuarios por su propia naturaleza (muchas escenas cinemáticas y algunos detalles que le restan realismo, pero que son seña de identidad de la saga), pero es totalmente obligatorio reconocerle su calidad.

Aparte de todo lo bueno que hemos dicho, hay que decir que Snake Eater tiene un fallo muy grande que en la puntuación no lo puede ser tanto, igual que lo tuvo Sons of Liberty: la ausencia de un doblaje al castellano, que hubiese dado esa inmersión que le falta al título por tener que estar leyendo todo el rato las conversaciones (y varios fallos gramaticales, todo sea dicho), sobre todo con la sombra de MGS de PSX encima, auténtico modelo de cómo presentar un videojuego en España a sus usuarios.

Un doblaje al castellano le hubiese dado a Snake Eater lo poco que le falta para acercarse a la perfección, la sensación de ser el protagonista de una película. Konami Europa se merece un tirón de orejas -pero grande, eh?- por esto, sabiendo que la gente no dudaría en esperar un par de meses más si ello implicase recibir esta tercera parte en completo castellano. Rentabilidad? Está claro que la iban a tener, por eso se entiende menos aún la falta de las voces en castellano. Alfonso Vallés, te añoramos... Konami Europe, un CERO. Nos habéis vuelto a fallar, y van...

En definitiva, y teniendo en cuenta lo dicho anteriormente, MGS3 es la aventura perfecta para cerrar las andaduras de Snake en la generación de los 128 bits (suponemos). Un compendio de sigilo y acción perfectamente narrado, con una profundidad de juego y una libertad de acción para realizar los objetivos amplísima. Una joya que quedará para siempre marcada por la ilógica decisión de Konami de no querer -porque no han querido, simplemente- darle al usuario español el cielo, cuando lo tenían en sus manos. Apunte: Llega en su versión HD.

Es un gran juego este Peace Walker que Kojima Productions regala a los aficionados de PSP, sin duda uno de los más esperados de esta generación desde que se anunció por primera vez, con tanto trabajo por delante que hoy no sabríamos decir a ciencia cierta si realmente iba camino de ser un Metal Gear Solid destinado a PlayStation 3 o si realmente fue un proyecto concebido desde el principio para una portátil que vuelve a sorprender por enésima vez. Son demasiadas cosas las que habría que destacar en esta conclusión: argumento, gráficos, sonido, jugabilidad, misiones, innovaciones… No hay ninguno que deba primar por encima del otro, pero sí algún que otro defecto que no se puede ignorar pese a la calidad del título del que hablamos. Esos defectos vienen, como sucedería en su momento con Portable Ops, motivados más por las propias características de la plataforma en la que corre que por hándicaps propios del UMD.

A medida que el jugador comience a descubrir las bondades que oculta el modo principal de juego (desde el que entramos en las misiones cooperativas), se descubrirá batallando con una cámara que le dejará vendido en más de una ocasión, especialmente en los momentos de mayor exigencia en cuanto a escenas de acción se refiere. Disparar sin poder fijar un blanco y con los torpes movimientos de la cámara dificulta una tarea ya de por sí bastante compleja que otros títulos, léase el caso de Syphon Filter, han sabido enmendar ampliando el número de enemigos y haciendo de la acción un requisito imprescindible, parte del guión. Peace Walker se mantiene fiel a la fórmula de sus antecesores y, pese a la presencia de misiones en las que será necesario hacer uso única y exclusivamente de la acción, aproximadamente un 80% del juego sigue basándose en pasar desapercibidos a ojos del enemigo.

A cada cual corresponde valorar el uso de las misiones cooperativas como plato fuerte, una costumbre que se verá desde un punto de vista distinto en función de las querencias del jugador. Si eres de los que disfrutas con el argumento y las sensaciones del juego, es posible que en algún momento dado eches en falta el estilo clásico, que si bien sigue presente invita a que uno o más compañeros se unan a nuestra partida. No en las clásicas misiones en las que no debemos hacer más que ir de punto A hacia punto B, pero sí cuando se interpone en nuestro camino un tanque de primera o segunda generación acompañado por un centenar de soldados. Es la cara y la cruz de enfocar el contenido hacia el público que disfrute del multijugador, tendencia que se ha puesto de moda en esta generación por motivos de sobra conocidos y que ahora no vienen a cuento.

Esto no implica que las misiones cooperativas sean deliciosas cuando decidimos hacer uso de ellas, o que de contar con un compañero el nivel de diversión no aumente considerablemente, lo que unido a la posibilidad de terminar el juego sin necesidad de tener a un amigo cerca hace de este hándicap un mal menor, con más o menos presencia en determinados momentos, pero menor en cualquier caso. La posibilidad de instalar el juego en la Memory Stick hace que los tiempos de carga se reduzcan considerablemente hasta el punto de pasar totalmente inadvertidos pero ojo porque, en su defecto, nos veremos obligados a esperar más de la cuenta con los continuos tiempos de carga a los que nos somete la aventura, comprensible por los saltos entre la Base Madre, la evolución de armas y demás. Como de costumbre, la mayor parte de los aficionados no tendrán el menor problema en instalar 800MB de espacio en su Memory Stick, pero imaginamos que de igual forma habrá una gran cantidad de jugadores que sufran las consecuencias de jugar vía UMD.

Salvando estos pequeños problemas, Peace Walker se destapa como la mejor obra que hemos tenido ocasión de jugar en PSP con perdón de God of War. Mejora Portable Ops, equipara su rendimiento al mostrado en Snake Eater, amplía las condiciones habituales de un juego de portátil (nuevamente se entiende que por todo lo que abarca lo disfrutaremos más en casa tranquilamente que en un autobús o en el metro, aunque siempre queda la opción de suspender la consola) y exprime hasta lo indecible las opciones cooperativas que llevarán a cuatro amigos (o dos, dependiendo de la misión) al sumun del divertimento a medida que nos acercamos a la paz. Un camino duro que ha llevado años de desarrollo y de espera, que por desgracia supura un aroma a despedida de las grandes producciones que quedan por delante en la vida de PSP. No queda más remedio que tirar de convencionalismos, pero francamente, Peace Walker es Metal Gear Solid en estado puro. El control de MGS4, la historia de MGS3, el humor de MGS2, la genialidad de MGS, las opciones multijugador de Portable Ops… Y el pequeño granito de arena que aporta su propia originalidad. Apunte: llega en su versión HD.

Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots es sin duda una obra maestra, pero alcanza este mérito siguiendo la propia dirección que Kojima ha marcado, diferente a la de otras creaciones que comparten esta distinción. Supone un nuevo clímax para el género del 'Tactical Espionage Action' que ha acompañado al nombre de Metal Gear desde sus inicios, tanto a nivel jugable como cinemático y online. Es un claro exponente de esa tendencia a caballo entre la película interactiva y videojuego que persiguen unos pocos creativos de la industria y que otros muchos repudian; una creación multimedia todoterreno. Y es una premisa que todos los jugadores deben aceptar y saber valorar, más en este gran final de la historia, en el que sus cinemáticas y aquello que se expresa en ellas adquieren una importancia trascendental para entender y disfrutar aún en mayor medida.

Es un producto redondo para los fans de Metal Gear, que podrán descansar tranquilos con las respuestas ofrecidas, y con las sensaciones evocadas en el proceso; desde tristeza o desánimo, al respeto, sorpresa, indefensión, también desacuerdo y negación, pero en último lugar, no queda más que una profunda satisfacción, vivida desde el recuerdo y nuevas experiencias. También lo es para los usuarios de PlayStation 3, que verán en él su primera gran exclusiva, envidiada, a veces desde el respeto, otras desde el desprestigio, por los jugadores de otros sistemas.

Metal Gear Solid 4 no es demasiado rejugable, aunque los diferentes modos de dificultad invitan a desarrollar tácticas diametralmente diferentes en el acercamiento. Tampoco es demasiado longevo, a diferencia de GTA IV, pero la intensidad y grandeza de su experiencia dejará huella en todos los jugadores. Incluso si cuentan con ese terrible hándicap de adentrarse por primera vez en la serie. Los extras son numerosos y tan jugosos que Kojima Productions ha prohibido desvelarlos, pero continúan la línea de auto homenaje, incluso haciéndola extensiva a otros juegos.

Pero darle más meses de vida a Guns of the Patriots es misión de Metal Gear Online, la experiencia multijugador a través de Internet y que bien podría constituir un juego independiente, segregado de MGS4. Un máximo de 16 jugadores simultáneos en diferentes modos, mapas basados en los lugares clave de toda la franquicia, el mismo método de control y todo el trasfondo de Metal Gear visto con otros ojos diferentes, buena motivación son, aunque contenga un bloqueo regional.

Pocos juegos te harán vivir lo que Guns of the Patriots puede hacerte experimentar. Abrázalo sin prejuicios y sin presión alguna, y sabrá recompensarte como sólo Kojima sabe hacer. Todavía estás a tiempo, repasa todos los antecedentes de este, uno de los grandes relatos del ocio electrónico -vía los documentales Metal Gear Saga o bien rejugándolos- y el 12 de junio disfrútalo como lo que es: una obra maestra que ha tardado 20 años en fraguarse. Un juego redondo para los amantes de Metal Gear Emotivo, emocionante e impactante Impecable combinación entre ocio electrónico y cine Fantástica dirección y ejecución audiovisual Gran variedad de misiones Numerosos avances en el terreno jugable que mejoran la serie La atención por el detalle y los guiños al aficionado Una magnífica historia que contesta a las preguntas de la saga.