"Esto acaba de empezar"

Diez años se cumplen ya del nacimiento de Halo: Combat Evolved. El juego de acción en primera persona que diseñó Bungie como gran lanzamiento de salida de Xbox, consola que cumple el mismo aniversario que el Jefe Maestro. Con obras como Goldeneye (1997) se vio que los FPS no eran territorio exclusivo de los compatibles. Que en consolas se podía diseñar también algo más que interesante dentro del género. Halo y Bungie confirmaron unos años más tarde que sí, que el género FPS tendría recorrido de sobras en las plataformas sobremesa. Sí, se puede. Y vaya si se ha podido.

Halo es un nombre ligado completamente a la historia reciente de la industria de los videojuegos. Representa el buque insignia de Microsoft y de Xbox. Fue el gran Triple A que la compañía norteamericana necesitaba para entrar con todo en el mundo de los videojuegos, dominado por marcas consagradas como Nintendo y Sega y por una tercera, Sony, que se había ganado al público en la generación anterior. Con este panorama, Microsoft le debe mucho a Halo. Bungie consiguió crear un FPS de consola lleno de elementos que posteriormente se han adoptado dentro del género. No en vano, se acuñó el término Halo-Killer para describir esos títulos que intentaban superar a un juego que se había colocado como uno de los referentes en los FPS de consolas.

No está Xbox ni tampoco Bungie. En diez años Microsoft se ha asentado en la industria, tiene una segunda consola en el mercado y ha visto como la desarrolladora a la que más gratitud le debe -y viceversa- en esta década ha decidido volar sola. Pero diez años es una cifra simbólica, y 343 Industries, los nuevos encargados de la franquicia Halo de ahora en adelante -con muchos miembros exBungie en sus filas-, ha decidido recuperar el mítico Combat Evolved, darle un más que interesante lavado de cara y publicarlo para Xbox 360, plataforma en la que la saga se ha acabado de consolidar como el gran referente de Microsoft.

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Combat Anniversary  mantiene estrictamente los mismos niveles que vimos en su momento en Halo: Combat Evolved. Eso significa que el juego consta de diez fases a superar para terminar la campaña. Esta puesta al día de Halo no añade nuevos diseños en los niveles en cuestión ni modifica el avance o los objetivos a cumplir para poder seguir adelante. Es, a nivel de desarrollo, el mismo juego que hace diez años. Como veremos a continuación, no es para nada malo, ya que la aventura aguanta el tipo a pesar de los años y sigue siendo un desafío variado, intenso y lleno de posibilidades. Las bases de Halo se sentaron en este juego, por lo que quien no tuviera la oportunidad de jugarlo en su momento pero sí hacerlo en las secuelas aparecidas en Xbox 360 (Halo 3, ODST, Reach) estará rápidamente familiarizado con la mecánica y el desarrollo.

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Combat Anniversary respeta punto por punto todos esos elementos. Nos encontramos con un FPS que establece las bases de la franquicia: dos armas como mucho, las granadas como las mejores aliadas de todos, regeneración automática de vida -aunque con matices, ya que tenemos un escudo que cuando se agota deja nuestra barra de salud a merced de los disparos, y esta solo se recupera mediante botiquines- y unos saltos más que generosos gracias a la armadura que posee el Jefe Maestro. Variedad de armas tanto de la UNSC como del Covenant -algo inferior a títulos posteriores- que van desde ametralladoras a francotiradores, lanzacohetes, escopetas recortadas hasta armas alienígenas como la pistola de plasma, rifle de plasma, el aguijoneador o las granadas pegajosas.

El desarrollo de la historia en Combat Evolved y Combat Anniversary mantiene la frescura de hace diez años gracias a la gran variedad de situaciones en las que nos ubica. Tan punto estamos en una nave laberíntica donde nos perderemos una y otra vez en pasillos estrechos y decenas de enemigos delante de nosotros como nos encontramos en un enorme valle combatiendo a 360 grados, subiendo a un tanque, limpiando la zona con un Warthog o robando un Ghost enemigo. Bungie diseñó un desarrollo que supiera aprovechar en cada momento el arsenal disponible, y lo explotó al máximo. Iremos sigilosamente disparando mediante el francotirador en un nivel, mientras que más adelante la escopeta recortada será clave para deshacernos de los Floods en la denostada Biblioteca. Añadimos Banshees para volar por los aires, ametralladoras montadas y una serie de objetivos que no son avanzar hasta el final de fase y tenemos una de las grandes campañas de los últimos años.

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Teniendo el desarrollo de la campaña intacta, 343 Industries decidió incorporar algunos elementos al juego para potenciar su rejugabilidad. Estos elementos son los terminales y las calaveras. Diez de cada a encontrar en las diez fases de las que se compone la campaña. Los terminales nos ofrecen información contextual del universo Halo y algunos detalles sobre donde puede ir Halo 4 -primer juego que realizará íntegro la compañía desarrolladora- en el futuro. Algunas están bastante visibles y nos las encontramos por los caminos de la trama principal, aunque hay otras que nos obligan a explorar las estructuras de arriba abajo para dar con ellas. En el tramo final veremos alguna secuencia de los terminales simplemente sobrecogedoras. Las calaveras, que permiten activar trucos y desafíos nuevos para la campaña, tienen más enjunia, obligándonos a buscar en puntos recóndidos del mapa (en lo alto de montañas, entre cascadas, después de saltar en un lugar mediante una granada) para dar con todas ellas. El hecho de no contar con puntos de control intermedios en cada nivel obliga a que debamos recorrer más de una vez todos los niveles enteros si queremos encontrarlo todo.

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Por ejemplo, los valles del nivel Halo ganan en detalle y en riqueza de manera notable. Luz de día, contrastes de colores entre el cielo, hierba, arena… mucho más agradable que lo visto en Combat Evolved. Los acabados generales en ‘La verdad y reconciliación', con ese espléndido horizonte remodelado en la nueva versión, son dignos de mención también. La misma biblioteca, que parecía un bucle horrible y oscuro, ahora sigue siendo un bucle, pero al menos hay algo más de luz y un diseño más agradable en el que pasar ese mal rato. Y así podríamos seguir en la gran mayoría de niveles. Las texturas y los acabados de los personajes o elementos como las armas son lo más destacado de este nuevo motor funcionando en el Halo original.

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Eso sí, no se puede esperar un juego tan sólido a todos niveles como pasa con Halo: Reach. De hecho, el resultado del Saber3D acaba siendo algo por debajo de otros juegos de la franquicia aparecidos en 360. Daremos buena cuenta de ello en algunas texturas que no están tan bien recreadas como en el último juego de Bungie -se puede apreciar sobre todo en elementos como la vegetación en términos generales, hierbajos y demás elementos en campos abiertos- y padece de contratiempos técnicos como texturas que tardan a cargar más de la cuenta y que lo hacen a nuestro paso. Aunque sea algo que esté relativamente cerca. Junto a ello, la certeza que no es un juego creado de cero con el nuevo motor, sino que se ha aplicado el lavado de cara al producto ya creado. Y eso provoca que aunque tengamos delante nuestro personajes con buena carga poligonal y acabados notables en sus ropas o detalles faciales interesantes, estos se muevan con animaciones algo bruscas y poco naturales. Las animaciones de hace diez años. El resultado es que se ve muy bonito, pero con elementos que desentonan -expresiones faciales, sincronización labial- debido a esta combinación entre juego antiguo con lavado de cara visual. Otro caso son las físicas, que se mantienen inalterables respecto al original y puede provocar controversia (el control del Warthog, por ejemplo, está lejos de ser tan accesible como en Reach o Halo 3).

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Junto a ello, el juego llega doblado y traducido al castellano. Se han respetado la gran mayoría de voces originales, un detalle a tener en cuenta aunque a veces por eso mismo suene algo raro a nivel de interpretación. Eso sí, el doblaje contiene algunas traducciones bastante libres como la de decirle ‘bengala' a las granadas de plasma -lo dicen los grunts- o llamarle jabalí en diversas ocasiones a los Warthogs. Todo lo demás referente al sonido, desde explosiones a ráfagas de disparo, pasando por proyectiles de mayor calibre o los desagradables sonidos de los enemigos, suena a un buen nivel también.

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Aquellos que compren Anniversary tiene además el otro añadido: Instalación 04, para el modo tiroteo. Grande en extensión y con una propuesta de lo más interesante, ya que tenemos disponibles todo tipo de vehículos aliados y enemigos para disfrutar de este mapa, que se puede jugar con hasta cuatro jugadores. Tanto humanos como del Pacto, que nos atacarán desde tierra y aire. A pesar del buen aspecto de Instalación 04, sabe a poco tener solo un mapa del modo tiroteo como extra. Vistos los antecedentes de Halo 3: ODST y el contenido que incluyeron a nivel multijugador, la opción escogida en este Anniversary puede quedarse corta. En modo local, Anniversary nos permite también disfrutar de los mapas multijugador con cuatro jugadores a pantalla partida.

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