Un remake con arena en los bolsillos

Allá por el año 1982, Atari, bajo licencia de Namco, nos ofrecía a los pocos videoadictos de la época la posibilidad de jugar al Dig Dug, juego con el que ya se podía disfrutar en máquinas recreativas. Tras el éxito de esta primera parte apareció Dig Dug 2 (1985), que pasó casi desapercibido y que hoy pocos recordaríamos de no ser por los emuladores.

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Hoy Creature Labs, nos ofrece la posibilidad de revivir aquellos tiempos o de conocer un clásico, perdido hoy entre apabullantes gráficos 3D y sonido Dolby, según nuestra veteranía en esto de los videojuegos. Pero dejemos atrás la historia, y centrémonos plenamente en el juego, he de advertir que los referentes al original van a ser inevitables, pero creo, que también necesarios.

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La mecánica del juego se mantiene intacta respecto del primer Dig Dug, es muy simple, asumimos el papel de un minero cargado con una pala de propulsión a chorro, cuya misión es excavar la tierra en busca de Fygar, bichos parecidos a los dragones, y Pooka, unos personajillos regordetes, para hincharlos hasta que revienten, no se beben descuidar las verduras que estos bichos van dejando y que dan grandes cantidades de  puntos.

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Pues armados con nuestra pala-hinchador debemos recorrer un total de 6 planetas (parque, ciudad, desierto, hielo, volcán y Luna) cada uno con diversos mundos y cada mundo con varios agujeros, tranquilos no hay que pasárselos de golpe, el juego guarda automáticamente cada vez que completamos un mundo y después nos da la opción de elegir donde queremos empezar a jugar entre todas las zonas que hemos acabado.

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La mecánica es siempre la misma, llegamos a un planeta y desde aquí a un mundo, entonces la visión del juego es tridimensional, con la cámara fija eso sí, y en ese escenario se van abriendo agujeros en los que tendremos que entrar para acabar con los monstruos y recoger comida para conseguir puntos. Es dentro de estas brechas donde el juego recupera su vista clásica en dos dimensiones, si bien los gráficos, mucho mejores que lo que fueron antaño, nos ofrecen una sensación de profundidad que nunca tuvimos en versiones anteriores, el juego se desarrolla en este punto puramente en 2D.

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Ya una vez dentro comenzamos a excavar y a hinchar a los bichos, también podemos aplastarlos con piedras, quemarlos o asfixiarlos con bolsas de gas, si los eliminamos de alguna de estas maneras nos dan un premio en forma de habilidad, por unos momentos podremos avanzar más rápido, hinchar antes o sólo con un toque hacer que nuestra manguera llegue más lejos o volvernos invencibles.

Debemos tener cuidado porque, a pesar de que cuando empezamos cada criatura tiene su hueco hecho en el terreno, al poco de jugar comienzan a salir y a moverse por la pantalla, en forma de fantasmas, buscando al protagonista.

Bueno más o menos estos son lo tipos de seres que podemos encontrar:

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Puede ocurrir que alguno de estos bichos, se nos escape, normalmente, el último nos deja un premio en forma de comida (de puntos, vamos), para "distraernos" y poder salir del hoyo, pero no pasa nada ya que cuando salgamos nos estará esperando fuera, en la vista tridimensional, y allí también podemos hincharlo.

Prácticamente ahí acaba todo el juego, no tiene mayores complicaciones, está pensado para conseguir puntos y en ningún momento para buscar el final, así que a nadie se le ocurra devorarse el juego en un par de días (se puede acabar mucho antes), buscando un vídeo final, pantallas nuevas,… nada de eso, en este juego no gana quien acaba el juego sino quien más puntos consigue. Es como el Tetris, que sólo sirve para que tu primo llegue y te diga "me he hecho 100.000 puntos" y tú no puedas dormir durante dos días hasta hacerte 100001. Así que el que espere juego para rato, que se olvide, Dig Dug Deeper sirve únicamente para competir a puntos, eso sí, al que lo acaba le dan puntos extras.

Hay que reconocer que está pensado para un público más bien infantil, es una buena manera de empezar con esto de los videojuegos. Los jugadores más veteranos también disfrutarán de este juego, aunque sea por un tiempo muy inferior o de forma diferente. En resumen, los más pequeños encontrarán un importante reto pasar los diferentes planetas, los más creciditos en cambio deberán dejarse llevar por las ansias de conseguir puntos, que era la única medida que hace 20 años había para saber quien era bueno y quien no, jugando a algo y la manera que aún hoy predomina en las recreativas.

Audio / Vídeo

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Nada nuevo, unos gráficos que cumplen su papel sobradamente y que desde luego gustarán a todos aquellos que recuerden los viejos tiempos de la recreativa o de la Atari 2600. El audio, acompaña, los sonidos de victoria y final del juego se mantienen fieles al original aunque bastante mejor orquestados.

Guión

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Entrar, excavar, hinchar y recoger comida, ¡así de sencillo!

Jugabilidad

Total, tan sólo necesitas cuatro teclas de dirección y una de fuego, fácil de manejar.

Estrategia y Trucos

Hay que aprender a utilizar las piedras y las bolsas de gas, deben ser usadas con tacto porque también matan a nuestro héroe, pero pueden servirnos de gran ayuda sobre todo en las pantallas finales donde hay muchos más monstruos.

Cada vez que se abre un agujero sale disparado un Pooka, que luego vuelve a entrar, si estamos lo suficientemente cerca podemos engancharlo al hinchador y acabar con él antes de que vuelva a la caverna.

Para acabar con los enemigos en vez de engancharlos y mantener pulsado el botón de fuego, si alternamos este botón con la flecha de dirección hacia donde se encuentra podemos acabar de hincharlo un poco antes.

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Muchas veces podemos vernos rodeados de dragoncitos y regordetes y no saber como escapar, porque mientras hinchamos a uno el resto puede matarnos, lo que podemos, y debemos hacer, es hincharlos a medias y dejarlos que se desinflen, momento en el cual no nos pueden hacer nada y nos da tiempo de acabar con los otros o de escapar, retirada táctica lo llaman.

Comparándolo con…

Inevitablemente, al tratarse de un revival, como se hace en las películas, hay que compararlo con el videojuego original el primer Dig Dug, y claramente este refrito sale ganando, conserva el espíritu del original pero le añade buenos gráficos.

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Es muy difícil encontrar otro juego que se parezca mínimamente a éste, quizás los plataformas puedan entrar en la comparación, o tal vez algún pac-man, pero el estilo de juego cambia bastante entre estos y no se puede hablar de cuál es mejor sino de que tipo nos gusta más.

Lo que está bien

Requerimientos del sistema