Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged, la diversión en miniatura

“Lo que teníamos claro a la hora de diseñar Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged es que los Hot Wheels son coches de juguete”, afirman en Milestone, la desarrolladora italiana especializada en juegos de carreras. Tras el éxito de Hot Wheels Unleashed, el estudio presenta en las oficinas de Koch Media una segunda entrega en la que la diversión en miniatura nos invita a una conducción muy imaginativa y vibrante, con la que ir calentando motores hasta que los Hot Wheels lleguen al cine. El pistoletazo de salida se dará el próximo 19 de octubre en PC, PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series y Nintendo Switch.

El placer de conducir en miniatura

Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged es totalmente consciente de que adoramos los circuitos imaginativos y el coleccionismo. Por ello, nos abre su garaje con más de 130 vehículos entre los que debutan motos y vehículos ATV. Tendremos 3 categorías llamadas Stock, Powered y Ultimate según el rendimiento, y también podremos utilizar puntos de habilidades para mejorar nuestros juguetes y adquirir ventajas en la carretera.

En cuanto a los circuitos, volveremos a vivir esa sensación de estar jugando en nuestro hogar, con 5 escenarios donde se ha aprovechado la verticalidad, la imaginación de la física, las curvas vertiginosas y los loops. Los módulos también añadirán un componente impredecible en la partida para no relajarnos al volante: rampas desde las cuales saltar hacia otro tramo de la pista, obstáculos como rodillos giratorios, propulsores hacia un atajo elevado, rutas alternativas... Durante nuestra carrera, deberemos mantener una atención muy viva para saber reaccionar y adaptar nuestra estrategia.

Carreras de vértigo llenas de imaginación

Asimismo, a nuestra conducción se añaden nuevas mecánicas que fomentarán la agresividad con nuestros oponentes, como el salto y la embestida lateral para impactar o evadir. Con el ya mencionado salto, no sólo podremos superar ciertas secciones de la carrera y descubrir atajos, sino adelantar a nuestros rivales mientras aprovechamos un descuido de ellos.

El derrape y el impulso, que ya conocimos en la anterior entrega, seguirán teniendo una importancia vital, además de ir acumulando turbo para desplegarlo en el momento más conveniente. Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged se trata de recrear nuestras carreras con juguetes e imaginación llevado al ocio digital, y al mismo tiempo incentiva que mantengamos una mente estratega.

Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged vendrá con un modo campaña nuevo, cimentado sobre una historia protagonizada por 4 personajes muy diferenciados y con un trasfondo elaborado y narrado a través de cinemáticas. Por el momento, no conocemos más de este modo, si bien sí pudimos experimentar otros tantos en juego solitario.

En el quick-play, podemos acceder a una carrera estándar con otros vehículos. Cabe mencionar que nos han parecido incluso más interesantes los desafíos alternativos como el modo contrarreloj; la carrera de checkpoints, donde recorremos una pista marcada con objetivos por los que debemos pasar, y la muerte súbita, donde cada cierto tiempo se va eliminando al último en la carrera.

Por supuesto, también contaremos con modo multijugador online con crossplay y con 12 jugadores simultáneos, con la posibilidad de crear un grupo de amigos y organizar carreras privadas. También será posible enfrentarnos con otro piloto desde un mismo sofá gracias al modo cooperativo. La creatividad también tiene un gran papel dentro de Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged, gracias a un editor de pistas que evocará la propia experiencia de diseñar nuestros propios circuitos de juguete y dotarlos de diversión y belleza. En dicho editor, encontraremos módulos y funciones especiales, mientras que el modo Libreas ofrecerá un editor de pegatinas y vinilos para crear, guardar y compartir diseños y formas originales.

Los circuitos destilan un sabor a infancia y nostalgia en el mejor de los sentidos, y evoca esa época en la que la imaginación era el mejor complemento para los juegos con Hot Wheels. Diferentes mini-golfs y otros circuitos improvisados en un jardín nos han sentado como un abrazo a nuestro yo infantil, al mismo tiempo que nos hemos sentido muy cómodos al volante en un juego donde la conducción resulta muy intuitiva, así como hacerse a las mecánicas de salto, derrape y embestidas. Con un primer bocado, deseamos experimentar con un Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged que promete muchas posibilidades para gozar de la velocidad en un pequeño salón, donde los muebles, cojines y utensilios forman parte de nuestro circuito.