Review
Análisis de Alan Wake 2: La Casa del Lago, un DLC de Control 2 y no de Alan Wake
La segunda expansión del juego es un adelanto del próximo proyecto de Remedy más que un adiós satisfactorio a la historia de Bright Falls.
Es la Remedy que menos nos gusta. La que se empeña en conectar todos sus juegos en un mismo universo y se deleita a sí misma con decenas de cameos y referencias que sólo comprende ella. Luego decimos de Nomura. La Casa del Lago es el segundo DLC de Alan Wake 2, pero tiene poco que ver con el escritor que trajo de cabeza a Bright Falls. La expansión es en realidad un cebo para Control 2 y sirve para ir poniéndonos en situación de cara al próximo proyecto de la compañía. En cierta manera es lo justo, pues el segundo DLC del primer Control iba sobre Alan Wake, así que ahora es como si éste le devolviera el favor. Lástima que a nosotros las cortesías entre sagas no nos evitan irnos con ganas de algo más, de algo distinto.
La Casa del Lago nos propone internarnos en un edificio gubernamental que pareciera Quántico o, en su defecto, la Colmena, el laboratorio subterráneo de Umbrella en la película de Resident Evil. Una construcción bajo tierra donde el FBC investiga los poderes de Alan Wake. Por ejemplo, ¿y si alguien contratara a otro escritor y le pidieran que imitara el estilo de Wake? La misma máquina de escribir, la misma cadencia en sus frases... ¿También cobrarían vida esos manuscritos? Es más, ¿no existirá en el mundo otro artista que pueda alterar la realidad gracias a sus creaciones? ¿Qué tal un pintor? Hola, Layers of Fear. ¿Existe alguien capaz de modificar nuestro mundo mediante sus cuadros? La investigación se irá de madre, cómo no, y la agente Kira Estevez tendrá acudirá a poner orden. La premisa no es mala y hasta guarda una reflexión de lo más interesante sobre los intentos de las grandes corporaciones por imitar el genio artístico. Es fácil hacer una analogía con la actual guerra abierta contra la Inteligencia Artificial y Chat GPT.
El problema reside en que Alan Wake cuando más brilla es cuando aprovecha sus enormes parajes abiertos y su ambientación a lo Twin Peaks. En esos bosques de secuoyas gigantes y sombras perturbadoras. En sus bucólicos dinners y residencias. Cuando la acción no vence la balanza y combina puzles, exploración y combates. En esos momentos en los que la narrativa nos agarra por las solapas y presenta un sinfín de personajes memorables y situaciones tan naturalistas como sobrenaturales, al más puro estilo Stephen King. La Casa del Lago es todo lo contrario. Una sucesión de estancias constreñidas en las que apenas nos limitaremos a superar hordas de enemigos y a buscar las contraseñas de distintos ordenadores, a cada cual más ridículamente escondida. La trama, que prácticamente sabrás en la primera de las cinco plantas a visitar, termina teniendo tan poco interés como su propuesta jugable.
Lo mejor de la expansión es cuando apuesta por el enfoque survival horror que muestra en los tráileres. Nuevas criaturas y armas inservibles contra ellas. Sustos y persecuciones. Momentos tan brillantes como por desgracia efímeros. Fuera de ellos, también guarda alguna sorpresa para los seguidores de Control y lo cierto es que trata a Estevez mejor que a los personajes del anterior DLC (recordemos que van cuatro pequeñas historias con cuatro personajes diferentes). Hasta intenta replicar los bucles temporales y juegos de luces que vimos durante Alan Wake 2, pero son tantos palos por tocar en apenas tres horas de duración que al final se queda en la superficie de todos ellos. La experiencia no termina de aportar nada que se vaya a recordar en un futuro Alan Wake 3 y resulta café para muy cafeteros.
Hay momentos en los que pone tanto el foco en la acción que evidencia que es uno de los primeros aspectos a retocar en futuras entregas. La mecánica con la luz de la linterna y los escudos de oscuridad ha pasado a ser anecdótica, casi opcional, y las esquivas y el gunplay se antojan un tanto toscos, especialmente cuando uno se enfrente a tantos enemigos como aquí. Por eso no es de extrañar que vayan a surgir más rivales y herramientas, como se deja entrever. En cualquier caso, nada que preocupe a corto plazo, pues siempre nos quedarán los poderes de Jesse. En resumen, La Casa del Lago propone una ración de graficotes, algún que otro susto, muchos tiroteos y menciones insustanciales por aquí y por allí a personajes de los que nos hubiera gustado despedirnos con un poco más de chicha.
Conclusión
La segunda expansión de Alan Wake 2 resulta un tanto decepcionante, sobre todo al pensar que lo mismo tardamos otra década en volver a la saga. Remedy sigue empeñada en crear su propio UCM y despliega un sinfín de referencias y cameos de otros títulos que dejarán indiferentes a quienes sólo querían ampliar la historia de su escritor favorito, aquel que puso patas arriba Bright Falls. Son alrededor de tres horas de acción y puzles simplones que además sustituyen la característica ambientación de Twin Peaks por interiores genéricos y repetitivos. Aunque nos ha hecho gracia manejar a Estevez y ver a Dylan, y a pesar de la interesante crítica velada a la IA y de un momento survival horror con un monstruo de lo más prometedor, el DLC está tan centrado en preparar el camino hacia Control 2 que se olvida de que estábamos en otro juego que se hizo famoso por, efectivamente, otra cosa.
Lo mejor
- El mensaje contra la IA que subyace en su trama.
- Los momentos survival y el nuevo monstruo al que nos enfrentaremos.
Lo peor
- No aporta absolutamente nada a la historia de Alan Wake 2.
- ¿Cuándo caducarán los puzles de buscar la contraseña de un ordenador?
- Se centra en la acción y deja patente que es precisamente un punto a mejorar en Alan Wake 3.
Sigue el canal de MeriStation en Twitter. Tu web de videojuegos y de entretenimiento, para conocer todas las noticias, novedades y última hora sobre el mundo del videojuego, cine, series, manga y anime. Avances, análisis, entrevistas, tráileres, gameplays, podcasts y mucho más. ¡Suscríbete!